Sika en la punta de lanza de las soluciones industrializadas y a medida
El sector de la construcción industrializada en España está todavía muy lejos de las cifras experimentadas por otros países de su entorno como Reino Unido, Alemania, Países Bajos y Suecia. Sin embargo, durante los últimos años se ha apostado en este modelo constructivo por un mayor uso de materiales innovadores que aumenten la durabilidad de las edificaciones y con una alta capacidad de reciclaje y recircularidad para conseguir una menor generación de residuos.
Con 18 centros tecnológicos a nivel global, Sika está en constante evolución tanto en construcción como en industria, lo que le hace estar perfectamente posicionada para impulsar las innovaciones de la construcción industrializada en nuestro país.
En este sentido, como socio en innovación, aporta una experiencia global que permite a los fabricantes conseguir una producción más rápida, una disminución de la huella de carbono y una mayor durabilidad que implica también una vida útil más larga de los materiales y edificios.

Para hacer frente al nuevo desafío del sector de la construcción industrializada, Sika pone en el mercado una solución integral desde la fábrica hasta la obra, desde la optimización de los procesos en nave, mediante el uso de diferentes tecnologías que permiten la automatización y robotización de las líneas de producción, hasta la obra con soluciones para el ensamblaje.
Desde los cimientos a la cubierta, Sika ofrece soluciones a la medida y a todos los niveles; desde tecnologías de pegado que incrementan la seguridad de los productos finales y permiten una mayor libertad en el diseño; el aislamiento acústico tendente a reducir las vibraciones; las distintas opciones para asegurar una protección prolongada frente a las inclemencias climáticas, los agentes químicos y la contaminación; el refuerzo para incrementar la capacidad de carga de las estructuras portantes; o los marcos de ventanas ligeros.
Sika entiende la sostenibilidad en una doble vertiente: hacia dentro, buscando mejorar los procesos y las tecnologías para ser más eficientes y respetuosos con el medio ambiente y, sobre todo, hacia fuera, dedicando grandes esfuerzos y recursos en I+D, para conseguir materiales capaces de aportar confort, salubridad, eficiencia y durabilidad a los edificios en los que se instalan.