Armonía con vistas a la montaña y el mar de fondo
Los colores neutros y los juegos de texturas son protagonistas en este proyecto.
Con una superficie construida de 510m2 y una parcela de 1.080m2, la vivienda ofrece todas las comodidades posibles para ser disfrutada en verano como segundo alojamiento o de forma permanente como casa principal. En dos plantas se han ubicado cuatro dormitorios, cinco baños, cocina abierta, comedor, sala de estar, oficina, lavadero, zona de recreo y ocio, así como varias terrazas, jacuzzi y amplias zonas exteriores con comedores y piscina de agua salada.
La cocina se ha diseñado abierta al comedor.
Espacios diáfanos
La planta baja acoge la cocina, el lavadero, el comedor, el salón principal con chimenea integrada y la oficina, además de dos dormitorios y dos baños. Desde ella se accede a la zona de piscina. En la primera planta está el acceso principal a la vivienda, que se abre a una amplia zona de entrada, seguida de la sala de entretenimiento con una gran pantalla de cine. Flanqueando esta zona central se ubican los otros dos dormitorios principales con baños en suite y uno de ellos con zona de vestidor incluida. Cada uno de estos dos dormitorios cuenta, además, con su propia terraza. Por su parte, la azotea de la villa se ha aprovechado para ubicar dos zonas más de exterior para el disfrute familiar y entre amigos, con un lounge y zona a modo de chill out y posibilidad de añadir un jacuzzi o ‘plunge pool’. Aquí reina el estilo ibicenco con piezas naturales en madera y tejidos de rafia.
“Diseñar y decorar los espacios interiores de villas que van a ser puestas a la venta requiere de un planteamiento diferente a un proyecto que es para un cliente final específico. El objetivo principal en estos casos es entender los diferentes tipos de clientes potenciales que podrán estar interesados en adquirir la villa; sus gustos, su forma de vida y, por lo tanto, el estilo debe agradar a diferentes públicos y, a su vez, permitir que se imaginen viviendo en las estancias. Además de que, por supuesto, se visualicen añadiendo sus toques personales”, explica Dominique Alexandra, responsable del estudio.
Elegancia y naturalidad
Para lograr precisamente esto, Alexandra ha planteado una decoración sofisticada que se basa en la utilización de colores neutros salpicados por tonos más potentes a modo de acento en zonas puntuales. “Una atmósfera tranquila, relajada y acogedora, que nos evoque el mar Mediterráneo, es lo que hemos intentado transmitir a través de una paleta de color en tonos gris cálido, beige y topo que se rompe a través de tejidos y complementos en tonos como azul petróleo, verde agua, o toques frescos de naranja contrastante. Esto, combinado a su vez con texturas como el terciopelo, el latón cepillado, piedra con acabado Calacatta Oro, la madera de roble o la piedra natural elevan los espacios y los hace más ricos ofreciendo un toque de lujo delicado”, continúa la interiorista.
Por lo que se refiere a las calidades, se ha apostado por potenciar lo más posible la homogeneidad y continuidad entre los espacios. Así, se ha elegido una tarima de madera clara con una pátina blanquecina para todo el primer piso y un porcelánico gris claro para el suelo de la planta baja y las zonas exteriores. El sobre de la mesa de comedor, que ha sido diseñado por el estudio, es de Calacatta Oro con las patas en acabado bronce cepillado. El estudio también ha apostado por incorporar una palillería de madera de roble para dividir la zona de salón de la zona de la escalera, arropando así este espacio. Las carpinterías y armarios empotrados se han lacado en gris topo. La cocina luce con encimera blanca en Calacatta en contraste con un mobiliario en beige y unas baldas vistas también en madera incorporando LEDs.
Hasta las toallas de los baños se han bordado con el logo de La Resina, para crear una mayor sensación de lujo.
Las piezas de mobiliario elegidas están a la altura de la propia villa. La mayoría del mobiliario ha sido diseñado por el estudio, como el escritorio con dos cajones en acabado gris claro o la estantería suspendida en la oficina con divisiones verticales en acabado bronce cepillado a juego con las patas de la mesa de comedor.El cabecero tapizado del dormitorio principal también es un diseño de Alexandra Studio, el cual va acompañado de un papel texturizado de Arte, lámparas suspendidas de Nuura, y mesitas de noche lacadas que son también diseño propio del estudio, junto con la bancada al final de la cama y el tocador.
Potenciar el confort
Todos los dormitorios de la Villa cuentan con su baño propio, de diseño elegante y contemporáneo, con ducha, bañera y todos los elementos que garantizan un extra de confort.
Griferías de la Colección A de Icónico en cobre cepillado. Inodoro Subway de Villeroy & Boch.
Las griferías son un depurado modelo de Icónico, la Colección A, con acabados en cobre cepillado en el baño principal y el aseo de invitados, y cromo en el resto. Se combinan con muebles suspendidos de Inbani y con bañeras exentas de Ideal Standard.
Villa La Resina cuenta, además, con calefacción por suelo radiante, aire acondicionado, persianas automatizadas, sistema avanzado de alarma y entrada de seguridad y doble acristalamiento.
La sensación de espacios diáfanos que protagoniza toda la casa se halla también en la zona de ducha.
“A fin de cuentas”, remata Dominique Alexandra, “desde el estudio lo que hemos buscado es proyectar una vivienda con personalidad sin incurrir en el exceso, que puede llegar a ahuyentar a determinados clientes; pero tampoco en el defecto, dejándola demasiado fría e impersonal. Y creo sinceramente que, siendo fieles a nuestro estilo, lo hemos conseguido”.
Villa La Resina forma parte de una promoción exclusiva de seis villas de lujo (The Resina 6IX), algunas de las cuales ya han sido adquiridas por personalidades de alto nivel. De hecho, hace unos años, el futbolista Cristiano Ronaldo compró una vivienda en esta zona.