Mirar al pasado para mejorar las técnicas del presente es lo que le ha permitido a Sonoma by SAS ser un referente en el diseño y fabricación de depósitos de hormigón
Vinos más untuosos y complejos gracias a los depósitos de hormigón de Sonoma by SAS
Los depósitos de hormigón convierten a la uva en la gran protagonista del vino, al conservar los aromas del lugar de donde proviene, aportando autenticidad y tipicidad. Inspirados en los depósitos antiguos, pero rediseñados y actualizados, la gama de hormigón de Sonoma by SAS ofrece una mayor estabilidad durante los procesos de fermentación y crianza, brinda mejores características organolépticas gracias a su capacidad de oxigenación y otorga un color intenso al vino. Si uno busca vinos que lo transporten al terroir en el que se han elaborado, el hormigón es la elección perfecta.
SAS prefabricados de Hormigón y la empresa estadounidense Sonoma Cast Stone se unieron para crear Sonoma Cast Stone by SAS, una nueva línea de negocio dedicada al desarrollo de depósitos de hormigón para vino.
La nueva gama de productos lleva el alma de más de 4 generaciones de experiencia en el sector del hormigón de SAS, marca referente en el mercado español; y de Sonoma Cast Stone, compañía californiana líder en la industria de depósitos para vino.
Pero, ¿por qué decidió SAS introducirse en el sector vinícola? Por su potencial y su emoción. De este modo, tras varias visitas al Priorat (Cataluña) y a Petaluma (Californa), nació una unión que ha derivado ya en 8 depósitos: NuBarrel, Teacup, Amphora, Egg, Square, Conical, Tower y Segment.
Hormigón, el material perfecto para vinos de calidad
Albert Pérez, sumiller y comercial de Sonoma by SAS, tiene muy claro porqué el hormigón es tan interesante para elaborar vino: “El hormigón es un material natural y poroso, con gran inercia térmica, neutro, resistente y duradero que, que cuando se usa para depósitos de vino, se convierte en un material perfecto tanto para la fermentación como para realizar la crianza. El hormigón es capaz de aportar suavidad, estructura y volumen al vino sin añadirle otros aromas que puedan distorsionar su olor original”. Además, añade que “gracias a la gran inercia térmica del hormigón, necesitamos menos energía para mantener la temperatura, favoreciendo un entorno adecuado a la vez que ahorramos en electricidad”.
Sin duda, el hormigón no para de ganar adeptos entre los elaboradores de vino de gran calidad, especialmente aquellos que quieren transmitir las características de su suelo en cada copa. Para Pérez, el hormigón es un material neutro que hace que el vino esté tranquilo: “Tendremos el aroma del terroir y la parte mas afrutada de la variedad de la uva, sobre todo en los vinos tintos”. Y es que para el sumiller, el hormigón permite que “el vino se redondee, sea agradable e incluso mucho más elegante ya que la variedad de uva no está enmascarada. Con el hormigón no tienes el toque de la madera ni las reducciones por falta de oxígeno producidas en los depósitos de inox y, además, hay mucha más presencia de la fruta de la uva. Pero no una fruta madura, macerada o compotada, sino todo lo contrario, una presencia de fruta fresca y de aromas vivos”.
El diseño del Amphora (izquierda) permite que las lías se muevan con el vino, protegiéndolo de la oxidación. El Conical (derecha), al no tener aristas, permite también que las lías se muevan con el vino.
La doble capa de los depósitos de Sonoma by SAS
“El sistema de control de temperatura integrado es un complemento muy interesante, sobre todo a la hora de fermentar. Además, con él se se eliminan los riesgos de contaminación del vino”, añade el sumiller. Y están tan seguros de la calidad y la durabilidad de sus depósitos, que SAS ofrece en todos sus equipos una garantía de diez años contra grietas y fugas.
Por otro lado, SAS cuida cada detalle del depósito. En su fabricación no se utiliza agua clorada ni aditivos químicos que puedan alterar el producto. Asimismo, el color escogido no se aplica de manera superficial como una pintura, sino en masa en la mezcla. Con ello se garantiza la homogeneidad y uniformidad en cada producto y se evitan daños estéticos por deterioro.
El Tower maximiza el espacio de almacenamiento gracias a su estructura y capacidad de almacenaje.
8 modelos únicos para necesidades específicas
Actualmente Sonoma by SAS cuenta con 8 depósitos. NuBarrel (con capacidad para 9 hl) es el modelo óptimo para pequeñas vinificaciones. Teacup (10 hl) es el modelo más pequeño, ideal para fermentaciones en depósito abierto o para elaboraciones experimentales.
Square (22 o 30 hl) es el modelo cuadrado de SAS, lo que permite un uso más eficiente del espacio en bodega, a veces limitado. Este depósito ofrece la posibilidad de fermentar en abierto, acumula menos calor, favorece la fermentación y facilita las adiciones, las operaciones de bazuqueo, supervisión y limpieza. También ofrece fermentación en abierto el modelo Tower que, con sus 54 hl de capacidad, permite maximizar el espacio de almacenamiento.
El depósito Conical es el modelo idóneo para realizar délestage. Además, se pueden colocar sobre una base elevada de acero, hormigón o piedra arenisca, lo que permite personalizar el depósito según la estética deseada.las necesidades de cada bodega
El Segment es el depósito cúbico de mayor capacidad (164 hl). Consiste en un ensamblaje único, basado en un concepto modular, con el que es posible combinar diferentes depósitos. Cada Segment se fabrica de acuerdo con las necesidades de la bodega, lo que permite una fácil adaptación a cualquier proyecto, optimizando su capacidad de producción.
Tal y como indica Albert Pérez, cualquier modelo de depósitos SAS sirve tanto para blancos como para tintos: “Yo personalmente prefiero un vino blanco hecho con el modelo Amphora (12 hl), ya que el resultado que se obtiene es un vino más complejo en boca y también más graso, oleoso. Para el vino tinto, el modelo Conical (31, 36, 38 o 40 hl) es perfecto, idóneo para su fermentación, ya que el líquido empapa el sombrero, facilitando su rotura e intensificando la maceración. En cuanto al vino espumoso, el modelo Egg (18 hl) es el más adecuado gracias al movimiento natural de las lías”.
Actualmente, SAS ya ha implantado sus depósitos en varias bodegas de la geografía española: La Rioja, Ribera del Duero, Priorat, Galicia, Pla de Bages o Conca de Barberà, entre otros. “Los directores técnicos y los enólogos están muy contentos con el resultado que están obteniendo. Además, todos destacan la facilidad de la limpieza del depósito”, afirma Pérez.
Así, la Bodega Eduardo Garza se decantó por el modelo Nubarrel y en él ha criado una variedad Cariñena con un poco de Garnacha, aportando el hormigón la parte más afrutada y manteniendo la acidez.
También seleccionaron Nubarrel las Bodegas Foraster para elaborar su vino Pep: “En este caso, la uva ha estado fermentando con las pieles y el raspón, dando como resultado un vino con más estructura en boca y con aromas mucho más herbáceos”, subraya el sumiller.
Otro ejemplo de éxito en la aplicación de depósitos SAS lo encontramos en la bodega Alma de Carraovejas, en La Rioja, que trabaja “una Viura con sus lías en nuestras Amphoras de 12 h, aportando mas complejidad en boca y estructura, a parte de la expresar también la fruta y el la mineralizad del terreno”.
La base de los depósitos Square también se pueden personalizar según la estética deseada.