Fife Creamery sustituye sus unidades diésel por sistemas frigoríficos sin motor de Thermo King y Frigoblock
Fife Creamery, uno de los principales mayoristas de alimentos refrigerados y congelados de Escocia, ha modernizado su flota incorporando vehículos nuevos dotados de sistemas frigoríficos sin motor de Thermo King, referente en el sector de las soluciones de control de la temperatura para el transporte y una marca de Trane Technologies. La actualización de la flota se alinea con la estrategia de Fife Creamery para mejorar la eficiencia y la sostenibilidad de sus operaciones, a la vez que pasa de usar unidades diésel a soluciones más ecológicas. Los treinta nuevos camiones de 7,5 toneladas cuentan con unidades V-800 de alto rendimiento y accionadas por compresor de Thermo King y con dos nuevos vehículos de 18 toneladas con remolques con barra de enganche equipados con sistemas accionados por inversor FK25RL de Frigoblock.
“Al colaborar con nuestros clientes, podemos ayudar a acelerar la transformación del sector hacia la electrificación, demostrando que una refrigeración para el transporte sostenible y sin diésel es posible sin que se vea comprometida la cadena de frío”, comenta Jon Jerrard-Dinn, responsable de Ventas de Thermo King en el Reino Unido. Y añade: “Nuestra colaboración con Fife Creamery demuestra que Thermo King tiene las soluciones que ya permiten a los transportistas desmarcarse de la refrigeración diésel. Podemos ayudarles a reducir su huella de carbono, a mitigar el impacto del aumento de los costes de combustible y a continuar transportando alimentos y productos perecederos de manera eficiente y fiable”.
“Fife Creamery realiza repartos intensivos y de larga distancia en ciudades saturadas como Edimburgo, Glasgow y Aberdeen. El aumento del coste del combustible y el crecimiento de las zonas de bajas emisiones urbanas en todo el país han convertido la reducción de emisiones, el ahorro de combustible y el rendimiento en cuestiones prioritarias a la hora de elegir nuevos vehículos y sistemas frigoríficos para nuestra flota”, expone Richard Wishart, responsable de Logística de Fife Creamery. Y añade: “La tecnología de Thermo King y de Frigoblock ha demostrado ser capaz de proporcionar el rendimiento deseado que necesitábamos y nos ha permitido apartarnos de la refrigeración diésel, que es la que se ha venido usando tradicionalmente en este segmento del mercado”.
El proyecto comenzó cuando Fife Creamery se puso en contacto con Thermo King en busca de sistemas frigoríficos sin diésel para sus dos nuevos vehículos con remolque con barra de enganche. La empresa necesitaba un sistema de alto rendimiento que fuera capaz de hacer frente a un entorno de operaciones con múltiples entregas y una alta demanda y que, a su vez, permitiera ahorrar combustible y reducir las emisiones. La unidad FK25RL accionada por un sistema de alternador e inversor cumplía todos los requisitos y demostró ser la solución adecuada para los camiones de 18 toneladas.
La implementación exitosa de los sistemas de Frigoblock despertó el interés de Fife Creamery por las soluciones accionadas por compresor de alta potencia de Thermo King para su nueva flota de vehículos de 7,5 toneladas. Decididos a no instalar sistemas frigoríficos diésel, Fife Creamery optó por la unidad V-800 MAX Spectrum multitemperatura como la mejor solución para sus operaciones de alta demanda. Los casi 250 kg menos de peso de la unidad V-800 en comparación con un sistema diésel equivalente resultó ser un beneficio añadido, junto al menor consumo de combustible y a la reducción de las emisiones, lo que permite a Fife Creamery aumentar el volumen de carga de sus vehículos en cada ruta.
Fife Creamery calcula que gracias a escoger los sistemas frigoríficos sin diésel de Thermo King reducirán el consumo de combustible en entre 128.000 y 200.000 litros, lo que equivale a emitir entre 336.640 y 526.000 kg de CO2 y representa un gasto de entre 220 y 400.000 euros anuales, aproximadamente.
La mayor parte de la nueva flota de Fife Creamery ya está en funcionamiento y reparte productos refrigerados, congelados y a temperatura ambiente a clientes que van desde bocaterías y carnicerías independientes hasta grandes cadenas de venta minorista, restaurantes y hoteles.
