Plan de recuperación ante desastres, fundamental para las pymes

Al invertir tiempo y recursos en la planificación y preparación adecuadas, las organizaciones pueden aumentar su capacidad de resistencia y protegerse contra los impactos negativos de los desastres.

Desde el punto de vista de Tecnología de la Información (IT) es fundamental para garantizar la continuidad de las operaciones tecnológicas de una organización en caso de un evento adverso. Algunos componentes clave que deben incluirse en un plan de desastre recovery:

• Inventario y documentación de activos: Es importante tener un inventario detallado de todos los activos de TI, como servidores, equipos de red, dispositivos de almacenamiento y aplicaciones críticas.
• Evaluación de impacto empresarial: Identificar y clasificar los sistemas y servicios de TI en función de su importancia para las operaciones comerciales. Esto ayudará a establecer las prioridades durante la recuperación y asegurará que los recursos se asignen adecuadamente.
• Copia de seguridad y almacenamiento de datos: Establecer una estrategia de copia de seguridad regular para respaldar los datos críticos. Esto debe incluir la realización de copias de seguridad en ubicaciones fuera del sitio para proteger los datos de posibles daños físicos en el lugar principal.
• Procedimientos de recuperación de sistemas: Definir los procedimientos para restaurar los sistemas y servicios de TI en caso de una interrupción. Esto incluye la documentación de los pasos específicos a seguir, las secuencias de recuperación y la asignación de roles y responsabilidades.
• Infraestructura de respaldo y redundancia: Considerar la implementación de infraestructuras de respaldo y redundancia, como servidores y sistemas de almacenamiento duplicados, fuentes de energía alternativas, conexiones de red redundantes y centros de datos secundarios. Esto ayudará a garantizar la disponibilidad continua de los servicios de TI.
• Plan de comunicación: Establecer un plan de comunicación que especifique cómo se notificará a los empleados, clientes, proveedores y otras partes interesadas sobre la situación y el progreso de la recuperación. Incluir canales de comunicación alternativos en caso de que los sistemas normales no estén disponibles.
• Pruebas y entrenamiento: Realizar pruebas periódicas del plan de recuperación ante desastres para asegurarse de que funcione según lo previsto. Estas pruebas pueden incluir simulacros de recuperación y restauración de sistemas para evaluar la efectividad y realizar mejoras.
• Mantenimiento y actualización continua: Un plan de recuperación ante desastres no es estático y debe actualizarse regularmente para reflejar los cambios en la infraestructura de TI y las operaciones comerciales. Realizar revisiones periódicas para garantizar que el plan esté alineado con las necesidades actuales y las mejores prácticas.

Un plan de recuperación ante desastres de TI sólido ayuda a las organizaciones a minimizar el tiempo de inactividad, proteger los datos críticos y restablecer las operaciones tecnológicas lo más rápido posible después de un evento adverso. Es importante involucrar a los equipos de TI y a otras partes interesadas relevantes en la creación y el mantenimiento del plan, y asegurarse de que todos estén familiarizados con los procedimientos y roles asignados.

La nube y la virtualización son grandes aliados en la recuperación ante desastres para lograr reestablecer la operación en un mínimo de tiempo y de manera sencilla. Recurriendo a un proveedor de servicios de confianza, se gana seguridad cuando ocurre algún desastre grave. Se pueden crear backups, copias o imágenes de los sistemas continuamente o antes de hacer actualizaciones, para que el tiempo de recuperación sea el mínimo.

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