La medida permitirá reducir en 1.500 toneladas anuales las emisiones de CO2 equivalente.
Eficiencia energética en los centros de datos de BBVA con pasillos fríos
El BBVA espera reducir el consumo de energía un 5,88% gracias a un proyecto de cerramiento de pasillos fríos en sus centros de datos, lo que equivaldría a una reducción de 733,2 toneladas de CO2 equivalentes anuales. Con la colaboración de uno de sus socios estratégicos, Kyndryl, el banco ha instalado este sistema en los CPD de Tres Cantos y Ciudad BBVA, de 1.500 y 490 metros cuadrados respectivamente, y tiene previsto extenderlo al resto de Centros de Datos de la entidad.

Cualquier operación bancaria que tiene un componente tecnológico está operándose desde un centro de procesamiento de datos (CPD), un espacio por el que pasa toda la información de la compañía y de sus clientes. Son instalaciones que cuentan con la mejor tecnología, los mayores estándares de seguridad y resiliencia y medidas para lograr un consumo energético óptimo.
En España la entidad cuenta con un CPD principal, que se encuentra en Tres Cantos, y un CPD de respaldo en la sede de Ciudad BBVA, cada uno de ellos equipado con dos niveles de redundancia para garantizar el funcionamiento ininterrumpido de las operaciones, sistema de respaldo que proporciona continuidad sin paso por cero y autonomía eléctrica y de refrigeración en caso de emergencia.

Eficiencia energética y seguridad
“Dentro de que queremos tener una infraestructura resiliente, queremos que sea lo más eficiente posible, sin perder un ápice de la seguridad de la instalación”, comenta Jiménez Anguita. Los sistemas de contención de pasillos de máquinas (fríos o calientes) han sido el primer paso para lograrlo. El cerramiento de pasillos fríos va a permitir reducir hasta 1.500 toneladas anuales de emisiones de CO2.

La separación de los dos ambientes se completa con la instalación de cerramientos en los pasillos fríos, para evitar la recirculación de aire y consiguiendo mantener constante la temperatura interior con menor esfuerzo energético. En los espacios que realmente lo necesitan se regula la salida de frío de forma exacta. Además, se mide la temperatura de los pasillos a ras de suelo, a mitad del equipamiento y en la parte superior para localizar bien los puntos donde enfriar.
Para mantener la seguridad de la instalación dentro del CDP, el material del cerramiento, a base de polímeros, permite que el techo se desintegre cuando salten los sistemas de extinción de agua nebulizada. Además de la mayor eficiencia energética de los sistemas de climatización, el proyecto de pasillos fríos va a permitir disminuir las averías en el hardware y una mayor vida útil del equipamiento tecnológico y los equipos de refrigeración.