La Fundación Juan XXIII, en colaboración con la UTE San José- El Ejidillo, cuidará espacios verdes en la ciudad de Madrid
El equipo de Soluciones Verdes de la Fundación Juan XXIII, en colaboración con la UTE San José- El Ejidillo, ha puesto en marcha un servicio para el cuidado de espacios verdes en diversas zonas de la ciudad de Madrid. Se trata “de un modelo de jardinería inclusiva y participativa que genera empleo de calidad para personas en situación de vulnerabilidad psicosocial a la vez que promociona la participación ciudadana”.
Gracias a esta iniciativa, en la semana del 24 al 28 de octubre alrededor de doscientos estudiantes y vecinos del Distrito de Hortaleza plantaron más de 1.300 ejemplares de nueve especies diferentes de plantas en colaboración con el equipo de la citada fundación.
En una nota de prensa la Fundación Juan XXIII señala que en los últimos ha cambiado la forma “en la que las personas nos relacionamos entre sí, pero también con nuestros espacios públicos y comunes. La pandemia o la situación del cambio climático nos están enseñando la necesidad de tener zonas verdes y parques en las ciudades como elemento imprescindible para conciliar la vida urbana. Se suma a ello la urgencia en fomentar una transición ecológica justa e inclusiva, que garantice que nadie se quede atrás, sino que sea una oportunidad para construir un futuro mejor”.
Conscientes de esto y de la importancia del cuidado de estos espacios, el equipo de Soluciones Verdes de la Fundación Juan XXIII, ” entidad que lleva más de 55 años trabajando para la inclusión social y laboral de personas en situación de vulnerabilidad psicosocial”, ha puesto en marcha una iniciativa conjunta con la UTE San José-el Ejidillo para el cuidado de espacios verdes de la ciudad de Madrid que genera empleo verde inclusivo. El servicio ya se ha puesto en marcha en los distritos madrileños de Ciudad Lineal, San Chinarro y Canillejas, aunque muy pronto llegará a otras zonas de la ciudad.
Esta iniciativa “genera empleo estable de calidad para personas en situación de vulnerabilidad psicosocial, especialmente con discapacidad intelectual y/o enfermedad mental. Hasta el momento, ya son dieciocho los profesionales contratados que están trabajando en la preservación de estos parques, jardines, plazas y bosques urbanos, frecuentados por más de 218.000 personas”, explican las mismas fuentes.