Evitar que los componentes críticos afecten a las operaciones cuando estén dañados o no funcionen correctamente

Los manómetros son un indicador visual crítico del buen funcionamiento del sistema.

Un enfoque proactivo de la gestión y el mantenimiento de los manómetros puede ser una solución eficaz a estos problemas. La capacidad de un operario para reconocer las lecturas de presión inexactas y otros indicadores de fallo inminente de manómetros puede ayudar a evitar resultados no deseados, aumentando la eficiencia y la seguridad general de la planta.

¿En qué hay que fijarse? Estas son las cinco causas principales de los fallos de los manómetros, sus indicadores y algunas medidas que pueden tomar las plantas para solucionar el problema antes de que provoque un problema operativo mayor.

Dave Ross, ingeniero de servicio técnico senior, Swagelok Company.

Un problema común en los sistemas industriales es utilizar un manómetro que no tiene el rango adecuado para las aplicaciones y, por lo tanto, es incapaz de reflejar la verdadera presión del sistema. Esto puede verse con frecuencia cuando el puntero del manómetro se queda fijo en el tope del dial (como se muestra en la Figura 1), lo que indica que el caudal del sistema está funcionando por encima de la presión máxima nominal del manómetro.

Figura 1. Un manómetro inadecuado para la aplicación se verá sobrepasado por la presión, con el puntero clavado en el tope mecánico.

Si los operarios observan que el puntero del manómetro está roto, doblado, mellado o dañado de alguna manera (véase el ejemplo de la Figura 2), esto suele ser una indicación de que el manómetro ha sido sometido a un pico inesperado en la presión del sistema, donde el pico ha hecho que el puntero golpee con fuerza el pasador de tope. Estos picos suelen estar provocados por el encendido o apagado de una bomba, o por una válvula que se ha abierto o cerrado aguas arriba de la válvula de presión.

Figura 2. Los picos de presión del sistema generalmente se manifiestan con un puntero doblado. Los picos repentinos provocarán que el puntero salga disparado e impacte contra el pasador, causando el daño.

Esto puede ser otra señal de que el manómetro no está bien clasificado para la aplicación. Sin embargo, los picos de presión pueden evitarse utilizando prácticas sólidas de diseño de sistemas que pueden eliminar las presiones imprevistas y la tensión resultante en los componentes del sistema. Si los responsables de solucionar los problemas no están seguros de si estos picos se deben a un problema de diseño, puede ser útil asesorarse con un proveedor de confianza que tenga experiencia en el diseño.

Los ciclos rápidos y frecuentes de los fluidos del sistema pueden crear un desgaste no previsto en los componentes móviles del manómetro, lo que puede repercutir negativamente en la capacidad de éste para medir la presión. Este problema es el que suele indicar un puntero que fluctúa de forma inestable. (Ver la Figura 3).

Figura 3. Puntero que fluctúa es un indicador común de que existe una pulsación excesiva que interfiere con la capacidad del manómetro de ofrecer una buena lectura. También puede provocar el fallo total del manómetro.

Esto también puede provocar la rotura del tubo Bourdon y el fallo total del manómetro, y es otro problema que puede aliviarse reevaluando el diseño del sistema. Reubicar el manómetro dentro de la aplicación puede reducir la velocidad de los ciclos vistos por el manómetro y ayudar a mantener la integridad de la medición necesaria. Si no es posible rediseñar el sistema, utilizar un manómetro con llenado de líquido, un restrictor de orificio del manómetro o un amortiguador ayudará a reducir los efectos negativos de las pulsaciones.

Las vibraciones resultantes de una bomba desalineada o de un compresor de émbolo pueden hacer que se pierda el puntero, el dial, el anillo del dial o la placa posterior. Una instalación deficiente también puede provocar los mismos problemas. Los operarios también pueden observar polvo negro en el dial del manómetro, o arañazos a causa de un puntero suelto, lo que indica que se están produciendo daños por vibración (ver la Figura 4).

Figura 4. Las vibraciones excesivas pueden dañar los componentes del manómetro, provocando el fallo, y frecuentemente se reflejan en un manómetro que vibra visiblemente o en que la lente ha saltado.

Muchos sistemas de procesos industriales funcionan a altas temperaturas, lo que puede interferir con la capacidad de un manómetro para funcionar correctamente. Una temperatura elevada somete a tensión el sistema de presión del manómetro y afecta a la precisión de la medición al provocar tensión en el tubo Bourdon. Un manómetro montado demasiado cerca de líquidos o gases del sistema excesivamente calientes puede tener el dial o el relleno de la carcasa del líquido decolorados, debido al deterioro relacionado con el calor de los componentes críticos del manómetro (ver Figura 5).

Figura 5. La decoloración es un síntoma de queel exceso de calor está dañando el manómetro. Esto puede significar que el manómetro está instalado en un lugar no óptimo o que no es adecuado para la aplicación.