El sistema de evaporación AlfaVap de Alfa Laval permite al cliente reutilizar 37.000 litros de agua por hora, lo que supone el 92% de toda la necesidad de agua de la línea de procesamiento

Alfa Laval está en primera línea con las empresas que están a la vanguardia de la producción innovadora de alimentos de origen vegetal. Todo ello gracias a una demanda creciente a medida que los consumidores se acercan a los beneficios para la salud y el medio ambiente y se acelera el impulso mundial para reducir las emisiones de carbono y la seguridad alimentaria a largo plazo.

Una de estas empresas, con sede en EE UU, se ha afianzado en el mercado de las proteínas de origen vegetal, y las ventas de sus productos siguen aumentando.

Fundada en 2011 y pionera en el campo de las proteínas de origen vegetal, la empresa se ha expandido en los últimos años, inicialmente con una planta de producción en Europa y, más recientemente, con un proyecto en curso en Singapur, donde una nueva planta de producción, actualmente en construcción en un terreno virgen en el oeste del país, entrará en funcionamiento a finales de 2023.

"La demanda de los consumidores, impulsada por la salud, la seguridad alimentaria y la inocuidad de los alimentos, está creando un entorno de extraordinarias oportunidades para este tipo de empresas, pero es vital que esto se sustente en procesos sostenibles. Y aquí es donde Alfa Laval entra en escena. Tenemos las capacidades y las soluciones para conseguirlo. Este cliente lo consigue con un producto alimentario de origen vegetal, que utiliza un 98% menos de agua y un 83% menos de tierra para su producción en general, y que ha permitido a la empresa ahorrar más de 52 millones de kilogramos de emisiones de carbono desde que comenzó su andadura como empresa emergente”, explica David King, director de Segmento de Alimentos y Agua en Estados Unidos.

Así que, con la sostenibilidad como factor determinante, un sistema de evaporación para optimizar el uso del agua en la nueva planta de Singapur era imprescindible; y como parte de un sistema completo de extracción de proteínas suministrado por Alfa Laval, el evaporador AlfaVap recuperará el 92% del agua utilizada en el proceso de producción, que también extraerá proteínas para suplementos nutricionales.

“El evaporador era una parte clave del proceso para el cliente”, explica David King. “Tienen fuertes credenciales de sostenibilidad, y la reducción del uso del agua es una parte central de esta ética, por lo que era esencial una alta recuperación de agua y una alta reutilización del agua”.

Alfa Laval tiene una oferta atractiva dado el reducido impacto medioambiental y el rendimiento fiable de las soluciones, que proporcionan una proteína estable en términos de apariencia, textura, sabor y valor nutricional.

King continúa: “Hemos desarrollado una relación muy estrecha con este cliente, y con este pedido, estamos demostrando que entregamos sistemas que están optimizados tanto con respecto a la producción como a los gastos de capital y operativos para el cliente”.

Este proyecto es el último hito de una colaboración que se remonta a los primeros días del cliente como empresa emergente. La empresa se ha convertido ahora en un actor dominante en el uso de equipos de separación de Alfa Laval para proteínas de origen vegetal.

La solución del sistema de Alfa Laval también incluirá cuatro separadoras centrífugas Clara y seis decantadores Foodec, un orden de magnitud que refuerza aún más la posición de Alfa Laval en el mercado de las proteínas de origen vegetal, afirma Dharmendra Shukla, director de ventas globales de la BU Food Systems en el sudeste asiático.

“Nuestros clientes en este campo están respondiendo a una fuerte demanda de los consumidores de alternativas de proteínas de origen vegetal”, dice Dharmendra. “Cada vez más, vemos que los consumidores eligen alternativas basadas en plantas por sus beneficios para la salud y el bienestar”.

La sólida relación que Alfa Laval mantiene con este cliente y la amplia experiencia de Alfa Laval en este campo han resultado muy valiosas para el desarrollo continuado de la aplicación y, en última instancia, para asegurar el pedido, dice Joosep Masik, ingeniero de Procesos de Tecnología Global en BU Food Systems en Dinamarca.

“Nos hemos beneficiado enormemente de nuestra colaboración entre regiones dentro de Alfa Laval y con el cliente para aunar el conocimiento de la aplicación; hemos hecho que esto suceda”, concluye.