Seguridad aérea mediante la utilización de drones autónomos
La norma introduce algunos cambios de calado como las categorías de operaciones. Con esta nueva legislación desaparecen los términos de vuelo recreativo y vuelo profesional y todas las operaciones con drones se integran en tres categorías principales, abierta, específica y certificada, según el riesgo operacional.
La categoría específica prevé que se realicen operaciones en la línea visual, o más allá, en entornos urbanos o aglomeraciones, con drones con masa máxima al despegue (MTOW) de menos de 25 kilogramos y vuelo a más de 120 metros de altura, siempre sujeto a una autorización previa. En esta categoría tienen cabida los vuelos autónomos.
Nightingale Security es una empresa pionera en Seguridad Robótica Aérea (RAS, por sus siglas en inglés) con más de 5 años de experiencia operacional sobre el terreno, que utiliza robótica avanzada, inteligencia artificial y machine learning para ofrecer una solución totalmente autónoma diseñada específicamente para aplicaciones de seguridad.
Los tres escenarios típicos de operaciones de esta innovadora solución son las misiones programadas, el reconocimiento aéreo y las respuestas inmediatas. La primera hace referencia a la realización de misiones calendarizadas, en un horario y ruta previamente especificadas, para supervisiones repetitivas. Por otro lado, el reconocimiento aéreo permite lanzar una misión de forma manual para cubrir la vigilancia de una gran área de manera eficiente desde el aire. Y, por último, las respuestas inmediatas, o automáticas, ante eventos externos, desplazan automáticamente el dron a la ubicación del incidente, por lo que mejora el tiempo de respuesta ante cualquier alarma, gracias a la integración con distintas plataformas VMS y con el sistema PSIM de Desico, Vigiplus.
Este sistema RAS es una combinación de drone, estación base y software, que trabajan conjuntamente para proporcionar seguridad física autónoma, 24/7, utilizando cámaras de vigilancia aérea en tiempo real y sensores de recopilación de datos. La carga de sus baterías, además, se realiza de forma automática, por lo que no es necesaria la intervención humana para su operación continua. Por lo tanto, los tres elementos principales que componen la solución de Nightingale Security son:
Estación base
La estación base permite un flujo de trabajo autónomo completo, preparación para las misiones y carga automatizada. La base es la plataforma desde donde el drone despega y donde, tras la realización de cualquier misión, aterriza para realizar la carga de sus baterías. Incorpora, además, la baliza de aterrizaje que es un elemento indispensable para garantizar la precisión en el aterrizaje, algo especialmente crítico en este tipo de soluciones.
Asimismo, la plataforma es el hub de comunicación y datos de la flota, en ella reside la inteligencia de vuelo y el cálculo de las misiones y es, paralelamente, donde se guardan las grabaciones de vídeo de todas las misiones realizadas. Todos los datos recopilados por el sistema son procesados y almacenados en el firewall correspondiente, para garantizar que están seguros.
Drone
Blackbird, como se denomina al drone en homenaje a Blackbird SR-71, histórica aeronave de reconocimiento estratégico de la Air Force de Estados Unidos, se compone de un sistema de vídeo con dos sensores, una cámara visible con resolución 4K y una cámara térmica de 320x256 píxeles. Esto permite al operador recibir los streams de vídeo en tiempo real, mientras el sistema almacena las imágenes de cada una de las misiones realizadas. Otra ventaja es la analítica de vídeo embarcada con tecnología Deep Learning, que permite enviar alarmas en tiempo real al centro de control, si se detectan personas o vehículos en zonas prohibidas.
El drone tiene un peso en orden de marcha de 6 kilogramos, una autonomía de vuelo de hasta 33 minutos y cuatro motores con una temperatura de funcionamiento que va desde los -23°C hasta los +55°C. Este sistema completamente autónomo puede realizar misiones con lluvia, nieve y en condiciones de baja iluminación. Además, puede volar con vientos sostenidos de hasta 73 km/h y con rachas de hasta 89 Km/h.
Es importante destacar que todas las comunicaciones entre el dron y la estación base están aseguradas gracias a su redundancia. El drone es capaz de volver a casa incluso si perdiese la señal GPS.
Mission control
Esta plataforma software patentada, desarrollada por especialistas de SpaceX, NASA y Willow Garage, es la herramienta de trabajo del piloto. A través del software inteligente Mission Control se realiza la configuración completa del sistema de forma sencilla e intuitiva, pudiendo abarcar desde un único drone hasta la operación coordinada de varios sistemas.
A parte de la configuración, través de la plataforma se puede ver el estado de nuestra flota, los streams de vídeo en tiempo real, se otorgan los distintos permisos a los pilotos usuarios, se habilita la analítica de vídeo en las zonas de interés y se configura la zona de vuelo (geofence), las misiones, etc.
Actualmente, Casmar cuenta con una unidad de demostración en España para que todos los usuarios interesados en esta tecnología vanguardista puedan comprobar las capacidades y funciones de este sistema, totalmente autónomo, que realiza patrullas día y noche, con lluvia y nieve, aterriza, responde a alarmas, transmite vídeos en vivo, recarga, se comunica, coordina e informa de las necesidades de mantenimiento, todo por sí mismo.