Unidades de almacenamiento inteligente eficientes

Las baterías tienen como característica la capacidad de recibir y almacenar la energía eléctrica, siendo capaces de entregarla cuando sea requerida. En especial cuando se trata de proporcionar energía a una carga crítica. Esta fuente alterna de energía debe abastecerse de energías renovables, especialmente en los centros de datos.

Tradicionalmente, las baterías han sido los dispositivos de almacenamiento de energía utilizada, para proporcionar una fuente de energía alternativa y mantener las actividades de una industria o empresa.

Sin embargo, existen distintos tipos y opciones de almacenamiento de energía, que puede garantizar de forma fiable el funcionamiento ininterrumpido y la integridad de los datos.

Simplemente es necesario evaluar los beneficios, costos, riesgos y características requeridas por cada instalación para elegir el dispositivo que se adapte mejor a las necesidades de cada centro.

Diseñadas para resolver cortes de energía de 5 a 60 minutos. A pesar de que son diseñadas para dar servicio durante 10-12 años, en realidad ofrecen una vida útil de 6 a 8 años antes de tener que reemplazarlas. Este tipo de baterías se encuentran habitualmente en centros o salas de datos que están dispuestas a sacrificar la duración de la batería por conseguir importantes ahorros de costos de capital en su instalación.

Las plantas de baterías de celda húmeda tienen una vida útil de 20 años, pero la vida útil de servicio está en el rango de 14 a 16 años y es particularmente adecuada para entornos desafiantes y condiciones de trabajo difíciles. Son pesados, requieren mantenimiento y son bastante costosos.

Las baterías de iones de litio cuestan entre un 20 y un 30% más que las VRLA. La batería ofrece una capacidad de almacenamiento equivalente a las baterías de plomo ácido pero su vida útil es de dos a tres veces superior. Además, su tamaño es aproximadamente un 50% más compacto, lo que se traduce en unos pesos que también son entre un 30-50% más ligeros. Otra ventaja adicional es que el tiempo de recarga supone un tercio del tiempo y puede operar de manera efectiva durante al menos tres veces la cantidad de ciclos, en comparación con las baterías tradicionales VRLA que pueden ofrecer.

Recientemente, ABB ha diseñado una batería de Iones de Sodio con el objetivo de desarrollar equipos más compactos para ahorrar espacio y mejorar la flexibilidad del diseño de centros de datos y otras instalaciones críticas. Estas baterías pueden suministrar de manera fiable y segura decenas de miles de ciclos a descargas a potencia máxima muy elevadas asegurando el nivel más alto de protecciones de seguridad sin el riesgo de fuga térmica, lo que les permite desplegarse en ubicaciones críticas no adecuadas para otros tipos de baterías.

Estas baterías ofrecen una resistencia interna extremadamente baja, una alta tasa de ciclo y una alta capacidad de potencia máxima. No son inflamables y no presentan características de desplazamiento térmico por diseño.

Los procesos químicos no solo son seguros, ya que cumplen con los requisitos de las normas UL9540A y NFPA855, sino que también son sostenibles, ya que para su fabricación se utilizan principalmente aluminio, manganeso, hierro, Azul de Prusia (un tinte para productos básicos) e iones de sodio.

Estas baterías no se ven afectadas por la dependencia de metales raros, minerales en conflicto o implicaciones cuestionables de la cadena de suministro.

Rendimiento energético de la batería de iones de sodio

Desde el punto de vista del rendimiento, la batería supera tanto al plomo como al litio en potencia de pico, velocidad de descarga, recuento de ciclos, tiempos de carga/descarga, eficiencia, seguridad y funcionamiento en un rango de temperaturas mucho más amplio... Así, permiten a los centros de datos y a otras instalaciones de críticas con limitaciones de espacio liberar energía y espacio en planta, ya que la capacidad de potencia máxima y la reserva de capacidad de arranque/puente, puede alcanzarse en un espacio mucho más pequeño sin necesidad de sobredimensionar la climatización.

Para proporcionar repetidamente, de manera fiable y segura descargas con potencias picos muy elevadas, garantizar el máximo nivel de protección de seguridad sin riesgo de fuga térmica un uso frecuente y repetitivo significa que pueden instalarse en lugares y arquitecturas que son impensables para otros tipos de baterías. Las baterías de iones de sodio pueden instalarse y se están instalando en centros de datos y comunicaciones dentro de las salas blancas donde se alojan los racks de equipos de IT/Telecom, un área donde los tipos de baterías en algunos casos no están permitidos o no ofrecen el rendimiento necesario para soportar la carga.