El Ayuntamiento de Madrid mejora el plan para los espacios interbloque, que facilitará la accesibilidad y aumentará la calidad de vida de los barrios
La Junta de Gobierno del Ayuntamiento de Madrid acordó el 31 de marzo aprobar inicialmente el Plan Especial de Incremento y Mejora de las Redes Públicas en Barrios de Promoción Pública. Tal y como explicó el delegado de Desarrollo Urbano, Mariano Fuentes, este plan, que arrancó en 2019, se aprueba ahora mejorado tras incluir una serie de modificaciones que le otorgan mayor seguridad jurídica y en el que se aumentan las condiciones de accesibilidad y la calidad de vida de los barrios de la ciudad consolidada.
Con este plan para adecentar los espacios interbloques, el Área de Desarrollo Urbano impulsa una estrategia de regeneración urbana y reequilibrio territorial que se apoya en los compromisos adquiridos en la Nueva Agenda Urbana de Naciones Unidas, con los objetivos de contribuir al desarrollo integral de barrios mediante la mejora de la movilidad, la renaturalización y adecuación del espacio público y la rehabilitación de edificios, informaron fuentes del ayuntamiento madrileño en una nota de prensa.
Mariano Fuentes, delegado de Desarrollo Urbano, durante la rueda de prensa posterior a la Junta de Gobierno.
Este plan afecta a los espacios interbloques de 45 barrios residenciales situados en 13 distritos, construidos por diferentes organismos públicos entre los años 50 y 80 y gestionados por la Agencia de la Vivienda Social de la Comunidad de Madrid (IVIMA). La superficie afectada asciende a 280 hectáreas, con un total de 60.479 viviendas y una población de 141.769 personas. Los bloques están localizados en su mayor parte en los distritos de Usera, Puente de Vallecas y San Blas-Canillejas, situados en el arco exterior a la M-30 comprendido entre las autovías A-2 y A-5.
La finalidad del plan aprobado es establecer una calificación urbanística de estos espacios libres existentes acorde a las necesidades de las zonas en las que se ubican y teniendo en cuenta su titularidad pública o privada para mejorar el estado de la urbanización y su mantenimiento.
Además, esto se complementa con las acciones de renaturalización de los barrios y con la línea de subvenciones municipales para apoyar la rehabilitación del parque de viviendas, que contempla ayudas a la conservación y la rehabilitación, la mejora de la eficiencia energética, la actualización de las instalaciones y la mejora de la accesibilidad con el fin de poder dotar a las edificaciones de ascensor.
Se configura así una actuación más integral que afecta a los espacios libres e implica la regeneración de la ciudad existente junto al crecimiento de nuevos barrios. Este plan servirá como proyecto piloto para los barrios de bloque abierto que ocupan más de la tercera parte del suelo urbano con similares problemas en sus espacios libres.
Lugares para los vecinos
Los espacios libres de estos barrios presentan una situación desigual en cuanto a su titularidad y regulación urbanística, lo que dificulta su mantenimiento y su utilización por parte de los vecinos. Se trata de espacios que precisan actuaciones de conservación y urbanización que no puede acometer el ayuntamiento ante la falta de regularización registral de los espacios libres.
Tras su aprobación inicial en mayo de 2019, este plan ha pasado por un amplio proceso de participación ciudadana y talleres vecinales para informar del proyecto y ha sido objeto de un estudio sobre la titularidad para mejorar el plan aprobado inicialmente y, así, dar lugar a uno más consensuado y ajustado a la realidad y necesidades de los vecinos.
Así, se completará el proceso de cesión iniciado para 240 hectáreas de suelo propiedad de la Agencia Social de la Vivienda a favor del ayuntamiento y se aumenta a otras 40 hectáreas, pudiendo dar un servicio integral de conservación, mantenimiento y limpieza en estos espacios hasta hoy en un limbo urbanístico.
Por otra parte, se establece una novedosa regulación para los espacios libres de uso general, propiedad de las mancomunidades privadas, pero que han sido usados por todos los ciudadanos de forma habitual y continuada. Este terreno supone casi 20 hectáreas de suelo, cuyo mantenimiento se hacía de forma incompleta e irregular. El plan va a calificar como espacios libres de uso general (ELUG) gran parte de los suelos que antes se calificaban como espacios libres vinculados a la edificación (ELVE), tal y como reclamaban los vecinos. Esto hará posible que los servicios municipales asuman el mantenimiento y conservación de los suelos.
Esta iniciativa contempla una inversión estimada de 32 millones de euros para las actuaciones de urbanización y de mejora de las condiciones de accesibilidad de los barrios que serán convenientemente programadas. Además, se contempla la reordenación de algunas áreas estanciales para facilitar su utilización, la mejora de la calidad ambiental y el paisaje urbano.