Hacia el mercado virtual de la vivienda
En el universo inmobiliario digital, el cliente es el rey. Por fin, todos los medios y tecnologías se han puesto a su servicio y hoy contamos con innumerables posibilidades de compra y venta de viviendas por diversos canales. Como en tantas otras actividades, los nuevos medios son el soporte ideal para la actividad, aportan nuevas formas de relacionarse con los clientes y agilizan las prácticas de negocio habituales.
Redes sociales, internet, móvil, apps de búsqueda, comparadores online. La forma de comercializar vivienda ha experimentado tal cambio, al rebufo de la creciente digitalización, que las formas de impactar en el consumidor final son mucho más ricas y variadas. Hoy es posible entablar una relación comercial sin verse en persona, a distancia y por el canal que el cliente prefiera.
La tarea de compra se ha agilizado, facilitado y universalizado, y la actividad profesional de inmobiliarias y constructoras debe ajustarse a esta nueva realidad. El software ERP, de Unit4, es un elemento clásico en la gestión de esta actividad que aporta la mejor administración de los recursos, procesos y decisiones de los agentes que intervienen.
Con tecnologías que también aprovechan la capacidad y flexibilidad de la nube, es posible analizar una ingente cantidad de información comercial (presupuestos, materiales, diseño…), de aprovisionamiento, obra y ejecución, con datos económicos y control de plazos de entrega, incluso con sistemas de alarma automáticos que saltan, en caso de sufrir desviaciones respecto a la planificación. Así, las necesidades de aprovisionamiento son calculadas con mayor exactitud, de forma que se evitan disfunciones, que al final acarrean mayores costes o retrasos en la entrega.
Se está provocando la industrialización de los procesos, de logística y organización, para también detectar hábitos y costumbres de los clientes en tiempo real, antes de tomar cualquier decisión. O segmentar la demanda y proponer alternativas y lotes adaptados a los gustos de cada cliente, con una granularidad que les lleve incluso a la unidad, en cuanto a producto.
A su vez, las aplicaciones actuales de gestión de proyectos ofrecen métodos de gestión y contratación, más participativos y colaborativos, en los que sus participantes tienen mayor control sobre los procesos y mucha más información, a la hora de tomar decisiones.
Gracias a ello, es posible reducir los costes de ejecución de en la gestión de proyectos, mantener un estricto seguimiento del mismo y agilizar los procesos de compras y subcontrataciones. Pero, también abre la puerta a un análisis de márgenes y rentabilidad más ajustado, a un cumplimiento más estricto de plazos de entrega y a un trato más personalizado y de calidad de cada cliente, aspectos de especial relevancia en estos tiempos.
Para todo ello es clave contar con una solución verticalizada que además de las necesidades generales de toda empresa, cubra contemple los retos del sector de la construcción y que, a su vez, pueda adaptarse a las especificidades de cada compañía de forma rápida y sencilla.