Sate, el sistema de aislamiento térmico líder en Europa

Sate, Sistema de Aislamiento Térmico por el Exterior, es un revestimiento de fachadas que optimiza las prestaciones térmicas del edificio, mejora sus condiciones de confort y habitabilidad y reduce los consumos energéticos de calefacción y aire acondicionado.

Este sistema permite obtener buenas prestaciones energéticas en cualquier tipo de edificio; desde los edificios de bajo consumo, a los pasivos y a los que producen más energía de la que gastan.

La asociación de fabricantes de morteros y Sate, Anfapa, divulga las prestaciones del Sate en España y los beneficios que puede tener este sistema de cara la implantación de los objetivos de ahorro energético europeos, avalada por su continua actividad de investigación y formación.

Como contribución en la lucha global contra el cambio climático, el Consejo Europeo definió en 2007 los objetivos de ahorro energético para 2020.

Según los datos de Eurostat del 2008, el 40% de los consumos energéticos totales se realizan en edificios residenciales, por lo que resultan ser una pieza clave para obtener los objetivos de ahorro energético que apunta la directiva europea (Epbd, 2010/31/EU). Para ello, las autoridades nacionales deben establecer una serie de requisitos mínimos de eficiencia energética que permitan alcanzar unos niveles óptimos en términos de costes que se revisen cada cinco años.

Datos sobre la rehabilitación de los edificios residenciales en Europa.

Los Estados serán los responsables de tomar las medidas necesarias que garanticen el establecimiento de los requisitos mínimos de eficiencia energética de los edificios con el fin de alcanzar niveles óptimos de rentabilidad. Asimismo, adoptarán las medidas necesarias para garantizar que cuando se proceda a la sustitución o mejora de los elementos de un edificio, se fijen unos requisitos mínimos de eficiencia energética para ellos, con el fin de alcanzar unos niveles óptimos de rentabilidad.

Estos requisitos deberán tener en cuenta condiciones ambientales generales interiores, como una ventilación inadecuada, así como las particularidades locales, el uso a que se destine el edificio y su antigüedad. En estos casos, no se exigirá que establezcan unos requisitos mínimos de eficiencia energética cuando no resulten rentables a lo largo del ciclo de vida útil estimada del edificio.

Los Estados pueden no establecer o aplicar los requisitos mínimos de eficiencia energética a edificios protegidos oficialmente por ser parte de un entorno declarado o en razón de su particular valor arquitectónico o histórico, así como edificios utilizados como lugares de culto, construcciones provisionales o con un plazo de utilización igual o inferior a dos años, edificios independientes con una superficie útil inferior a 50 m² o viviendas utilizadas durante menos de cuatro meses al año.

Por otro lado, la Comisión es la responsable de establecer la metodología empleada para calcular los niveles de coste óptimos para los requisitos de eficiencia energética.

• Los edificios nuevos deben cumplir los requisitos mínimos e incluir instalaciones energéticas alternativas de alta eficiencia. Los nuevos edificios que estén ocupados y sean propiedad de autoridades públicas deben alcanzar un consumo de energía casi nulo hasta el 31 de diciembre de 2018, un plazo que se amplía en dos años (hasta el 2020) para el resto de edificios nuevos.
• Los edificios existentes en los que se hagan reformas importantes deberán mejorar también su eficiencia energética para cumplir los requisitos de la UE.

Los certificados ofrecen información a los posibles compradores o arrendatarios sobre la calificación energética de un edificio, así como recomendaciones para la mejora de los niveles rentables. Estos, también deben incluirse en todos los anuncios publicitarios que aparezcan en los medios de comunicación cuando un edificio o vivienda se ponga a la venta o en alquiler y, además, las autoridades nacionales deben asegurarse de poner en marcha programas de inspección de las instalaciones de calefacción y aire acondicionado en estos espacios.

Aplicación de m² de Sate en europa en 2015.

El nuevo plan energético de 2015 reconoce como la medida más eficaz para reducir los consumos y las emisiones de CO2 en Europa, la mejora energética de los edificios residenciales, fácilmente conseguida con el sistema Sate. Conseguir los objetivos de este plan aseguran que tendrá efectos notables como:

• Ahorrar hasta 1.000€ al año por familia.
• Mejorar la competitividad industrial europea.
• Generar hasta 2 millones de nuevos puesto de trabajo.
• Reducir la emisión de gases de efecto invernadero.
• Reducir la dependencia energética de Europa.