AEA organiza una visita a la planta de reciclaje de su asociado Hydro
La Asociación Española del Aluminio (AEA), que representa a más de 600 empresas del sector, en colaboración con la Asociación para el Reciclado de Productos de Aluminio (Arpal) y su asociado Hydro Aluminium, organizaron el 2 de octubre una visita para autoridades y periodistas a la planta de reciclaje de ésta última.
La jornada reunió a más de una treintena de personas, entre las que se encontraban autoridades del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, así como del Ministerio de Industria, Comercio y Turismo. También fue convocada una representación de la Asociación de Periodistas de Información Ambiental (APIA) y dos de las principales agencias de comunicación a nivel nacional, señalaron en una nota de prensa fuentes de AEA.
Durante la visita —que incluyó un recorrido guiado por la planta de reciclaje— portavoces de Hydro, de AEA y Arpal explicaron a los asistentes los detalles del proceso de reciclaje de aluminio y su importancia tanto para el medio ambiente como para la economía, puesto que todo el aluminio que se recupera se recicla. Esta característica “lo convierte en un material circular estratégico y de gran valor en los muchos sectores en los que se emplea”.
Un proceso efectivo y eficiente
La jornada forma parte del plan de acción y encuentros institucionales que desde la AEA se están llevando a cabo “con el fin de aumentar el conocimiento de la industria del aluminio en el panorama político, económico y social”. Mediante estas acciones también se pretende “aportar toda la información necesaria para contribuir a la elaboración de las políticas públicas pertinentes, enriquecer el diálogo sobre circularidad y convertirlo en palanca de cambio e influencia”.
Desde AEA se remarca que el aluminio es reciclable en un 95% sin merma de sus cualidades, y que la energía que precisa su reciclado apenas alcanza el 5% de la que fue necesaria para producir aluminio primario, lo que permite un ahorro del 95% de la energía invertida en producirlo, en cada uno de sus infinitos reciclajes posteriores.
“Todo ello”, concluyen las mismas fuentes, “avala la idoneidad del aluminio como material que apoya el camino hacia la economía circular. Esa inmutabilidad de sus propiedades por un proceso de reciclaje lo convierte en una excelente materia prima para volver a fabricar productos de aluminio iguales o diferentes. De hecho, el 75% de todo el aluminio que se ha fabricado desde hace cien años se encuentra actualmente en uso, gracias al reciclado y a su gran durabilidad”.