‘La Comunidad Verde’ alza la voz en Demoverde

Para dibujar el contexto en el que se mueve actualmente el sector de las áreas verdes, José Luis García Seijas, presidente de la Asociación Española de Empresas de Jardinería (Aseja), dio varios datos ilustrativos, como la caída que ha sufrido la inversión en construcción de jardines, pasándose de los 1.182 millones de euros en 2009 a los 402 millones de euros del 2010, estimando para este año unas cifras también cercanas a los 400 millones de euros. Evidentemente, esta actividad se ha visto lastrada por la crisis que sufre la construcción en general y por la paralización de nuevos proyectos urbanísticos. Pero el problema se agrava aún más al conocer que el mantenimiento de los jardines no está paliando esta caída. De hecho, para este año se estima que las inversiones destinadas a la conservación van a sufrir la primera disminución interanual de los últimos cinco años, pasándose de los 1.190 millones de euros invertidos en 2010 a los cerca de 1.090 millones de euros previstos para todo el 2011.

Todo ello hace que el volumen de empleados en este sector también se esté viendo resentido. Mientras que en 2010 el número de empleados que estaban representados en Aseja era de 13.000 operarios, en la actualidad esta cifra se ha visto reducida a los 12.171 operarios. “A pesar de esta disminución, el personal sigue suponiendo un importante coste para nuestras empresas, ya que de cada euro que invierte la administración pública, 0,80 céntimos tienen como destino a los empleados”.

A la caída en las inversiones se suma otro problema, nada banal, la demora en los pagos por parte de la administración pública, que ya supera como media los 300 días y que hace que de los 500 millones de euros que facturan las empresas de Aseja, 400 millones estén aún pendientes de cobro.

Eugenio González Merino, de la Asociación Española de Parques y Jardines Públicos (Aepjp), confirmaba las malas perspectivas que se ciernen sobre la inversión en el sector verde. “No hay dinero y eso hace que la inversión en obra nueva vaya a ser prácticamente nula y que los presupuestos para el mantenimiento se reduzcan entre un 20 y un 30%. Para contrarrestar esta caída, habría que apostar por implantar nuevas soluciones técnicas que permitan ganar en productividad y sostenibilidad. El objetivo final debe ser conservar, al menos, lo que tanto nos ha costado crear”.

Precisamente, en el campo de la innovación aún queda mucho trabajo por hacer, como evidenciaron dos sectores que también estuvieron representados en la mesa redonda como fueron la arboricultura y el paisajismo. Aunque el árbol está presente en la ciudad desde hace muchos años, lo cierto es que la arboricultura moderna presenta nuevas técnicas y metodologías que pueden mejorar la convivencia del árbol en la ciudad. “Se tiende a hacer una gestión cada vez más individualizada del patrimonio de arbolado”, acotaba Salvador Cañís, presidente de la Asociación Española de Arboricultura (Aea).

En cuanto al paisajismo, éste es un sector que apenas ha tenido reconocimiento en España durante los últimos años, a diferencia de lo que ocurre en otras regiones europeas. Desde la Asociación Española de Paisajismo (Aep), como señalaba Eladio Hernando, vocal de su Junta Directiva, se siguen dando pasos interesantes para ganar en presencia, como el haber incluido esta actividad en el curso universitario 2011-2012, pero lo cierto es que, al estar tan directamente relacionado con el desarrollo de nuevos proyectos urbanísticos, se ha visto arrastrado por la crisis de la construcción. “Al no existir obra nueva, los profesionales del paisajismo nos estamos viendo muy afectados. Por tanto, nuestro objetivo ahora es crear la mentalidad de abordar el paisajismo más profesionalmente, aportando nuestras ideas para mejorar la eficiencia en la construcción y mantenimiento de jardines”.

La Asociación Española de Maquinaria Agropecuaria, Forestal y de Espacios Verdes (Ansemat) también apuesta por esta línea de mayor profesionalización y de eliminación del intrusismo. “A pesar de la caída sufrida en la inversión, las áreas verdes no están tan olvidadas en España. Durante los últimos años se ha ganado mucho en superficie destinada a jardines y parques y, de hecho, en algunos casos se han cometido excesos que ahora hacen muy complicado mantener esas zonas. Desde nuestra asociación consideramos que se puede mejorar aún mucho en eficiencia, empleando máquinas y equipos que hasta ahora eran prácticamente desconocidos”, indicaba Borja Aizpuru, presidente de la Comisión de Áreas Verdes en Ansemat.

Conocidos los numerosos y diferentes frentes que atañen al sector de las áreas verdes, así como su gran amplitud y la atomización que existe al englobar en su seno diversos subsectores, desde la Federación Española de Asociaciones de Productores Exportadores de Frutas, Hortalizas, Flores y Plantas Vivas (Fepex), su presidente en el Comité de Flores y Plantas, Vicente Peris, abogó por crear un gran foro sectorial en el que estén representados todos los agentes que participan de alguna u otra manera en esta ‘Comunidad Verde’. Una iniciativa que fue muy bien acogida por el resto de las entidades representadas en la mesa redonda, incluida la Asociación Española de Centros de Jardinería (Aecj), cuyo director, Santiago González, señalaba al respecto: “Cuanta mayor unión y comunicación exista dentro del sector, más podremos progresar. En EE UU, por ejemplo, ya existe una gran asociación que engloba a todo el sector verde y que cuenta con más de 40 empleados, y los avances que han logrado han sido muy notables. Tenemos que trabajar para incorporar a todos los agentes implicados”, concluía.

Con esta unión se pretende fortalecer el sector de las áreas verdes y seguir ganando peso, como ya ha ocurrido en otras regiones del mundo como Australia, actual referencia mundial en este mercado.