La ciudad de Nueva York establece una prohibición sobre los artículos fabricados con espuma de poliestireno
El ayuntamiento de Nueva York anunció que a fecha de 1 de julio de 2015, los establecimientos de servicio de alimentación, tiendas y fabricantes no deben estar en posesión, vender u ofrecer para su utilización artículos de espuma de Poliestireno Expandido o embalajes de poliestireno en esta ciudad.
Tras consultar con empresas, incluyendo Dart Container Corporation, organizaciones sin ánimo de lucro, vendedores y otras partes, el Departamento de Sanidad (DSNY) determinó que la espuma de poliestireno no se puede reciclar, lo que desembocó en la prohibición. El DSNY también determinó que tampoco existe un mercado para el consumo posterior del poliestireno recogido en programas de reciclaje.
«Estos productos causan un gran impacto ambiental y no tinen lugar en la Ciudad de Nueva York. Tenemos mejores opciones, mejores alternativas, y si más ciudades en el país siguen nuestro ejemplo e implementan prohibiciones similares, estas alternativas serán pronto más abundantes y baratos,» dijo el alcalde Bill de Blasio. «Mediante la eliminación de cerca de 30.000 toneladas de poliestireno expandido de nuestros vertederos, calles y conducciones de agua, el anuncio de hoy es un gran paso hacia nuestra meta de una Nueva York mejor y más verde.»
La decisión se tomó tras considerar la efectividad medioambiental, su factibilidad económica y la seguridad de los empleados del DSNY y Sims Municipal Recycling, la empresa de reciclaje de la ciudad. El análisis se basó en una estrategia de reciclaje que habría incorporado el poliestireno dentro del actual programa de recolección combinada de metal, vidrio, plástico y papel y no crearía un programa de recolección o clasificación independiente.
La ley establece un periodo de gracia de seis meses para los negocios desde su entrada en vigor antes de que se puedan imponer multas. El DSNy, el Departamento de Salud e Higiene Mental y el Departamento de Asuntos de los Consumidores llevarán a cabo la divulgación y educación en varios idiomas para los negocios a través de los cinco condados durante este periodo. El primer año de la prohibición, los negocios recibirán una advertencia en lugar de una multa.
Organizaciones sin ánimo de lucro y pequeños negocios con menos de 500.000$ de beneficio al año pueden solicitar exenciones a través del Departamento de Servicios a los Pequeños Negocios si pueden probar que la compra de productos alternativos sin poliestireno llevarían a dificultades económicas.