Ifat 2018, una edición de récords
El Salón Internacional de Tecnología del Agua, Depuración, Residuos y Gestión y Reciclaje de Materias Primas, Ifat, confirmó en su edición de 2018 -celebrada entre el 14 y el 18 de mayo en Múnich- su liderazgo. Tanto las cifras de expositores y visitantes, así como la valoración de diversos expositores, corroboran que el salón muniqués continúa siendo el punto de encuentro global de mayor relevancia.
Fuentes de la Feria de Múnich cifraron en más de 141.000 los visitantes, provenientes de más de 160 países, que acudieron al salón, una cifra superior a la de la edición de 2016, cuando fueron 136.885 las personas que acudieron a la Feria de Múnich. Desde la organización de Ifat se subraya que el salón de este año ha acentuado aún más -si cabe- el carácter internacional del evento. Los países de origen que protagonizaron un mayor incremento por lo que respecta al número de visitantes fueron, por este orden, Japón, Rusia, Australia, China y Eslovenia. Otra cifra que da la medida de la dimensión de Ifat es el número de expositores: 3.305 (500 más que en 2016) de 58 países.
El salón, de unas dimensiones que justifican los cinco días de duración del mismo, giró en torno a cuestiones relacionadas con la gestión de agua, de los residuos y las materias primas secundarias. La (en líneas generales) buena salud económica mundial está propiciando un sostenido incremento de la demanda de productos y soluciones tecnológicas destinadas a gestionar la manera de mejorar el medio ambiente.
“Ifat muestra las tecnologías del futuro para lograr un entorno limpio”, informaron fuentes de la Feria de Múnich. La mayor concienciación, a nivel mundial, acerca de la necesidad de reducir el impacto de la actividad humana sobre el medio ambiente es la que está impulsando los nuevos marcos legislativos, que son los que fijan el escenario sobre el que proveedores de productos y servicios desarrollan su actividad.
Técnicos y políticos de multitud de países no dejan pasar la ocasión de acudir a Ifat, tal y como destacó el director general de la Feria de Múnich, Stefan Rummel, quien subrayó que el salón ofrece el marco idóneo para mostrar “la importancia de la industria” relacionada con la protección del entorno. Rummel remarcó el aumento de los expositores respecto a la edición de 2016 (un 7%, hasta alcanzar los 3.305) y de visitantes, con un incremento del 4% y aseguró que la edición de este año de Ifat se dirigió, principalmente, “a las autoridades locales y la industria”.
Los consumidores impulsan la demanda
Esa creciente conciencia de los consumidores y la mayor demanda de productos y políticas sostenibles son los que están empujando la actividad de la industria medioambiental, tal y como apuntó la ministra de Medio Ambiente alemana, Svenja Schulze, quien declaró que es necesario “utilizar recursos y reciclar plásticos y otros materiales de manera más efectiva y así evitar, por ejemplo, que los desechos plásticos terminen en el medio ambiente”.
Schulze agregó que “las tecnologías tienen un papel clave” para reducir el impacto de la actividad humana en la naturaleza. “Ifat acoge tecnologías ambientales inteligentes e innovadoras que ya son parte de la solución a muchos de nuestros desafíos ambientales”, añadió.
Tal y como sucede en cualquier sector económico, la revolución digital está propiciando grandes cambios en los productos y servicios que las principales compañías del sector ofrecen a sus clientes: bombas cuya actividad y estado pueden ser consultados online; contendores de residuos con sensores; barredoras autónomas; equipos de elevación y carga que pueden ser manejados gracias a sistemas telemáticos que mejoran la seguridad durante su uso… Los ejemplos son múltiples", afirmó.
Tras su paso por Intermat, Ausa también acudió a Ifat. La compañía española presentó en Múnich Excelway, la nueva empresa del grupo.
Contenur, de nuevo en Ifat
Un representante del Departamento de Comunicación de Contenur, resumió a Enviropres algunas de las novedades con las que la firma española acudió a Ifat, entre las que destacó la gama de soluciones de carga lateral, un segmento en el que la compañía es líder de mercado en España, tras haber comercializado, en todo el mundo, más de 220.000 unidades desde que lanzó el primer modelo en 2002.
En su constante incorporación de nuevas prestaciones tecnológicas, Contenur mostró en Ifat 2018 el contendor 2Side System de carga bilateral en sus diferentes capacidades y opciones. Contenur, referente en soluciones integrales de contenerización de residuos, expuso también el resto de productos de su porfolio, como las papeleras y los contenedores de diferentes modelos de carga trasera.
Contenur acude al salón muniqués desde hace 16 años, afirmó el representante de la compañía, quien añadió que “Ifat para nosotros es una de las ferias más importantes, ya que desde el punto de vista internacional es el salón de mayor relevancia. Hay que estar aquí para analizar las novedades, estudiar cuáles son las tendencias que se pondrán en el mercado en los próximos años y mostrar nuestras evoluciones tecnológicas”, resumió.
La decidida apuesta de Contenur por la exportación ha dado sus frutos, como demuestran, entre otras durante los últimos años, la apertura de oficinas comerciales en Argentina, Singapur, Colombia o República Checa y la compra de una tercera planta de producción en Brasil este mismo año.
“En los últimos años hemos basado parte de nuestra estrategia en el crecimiento internacional, pero sin dejar de prestar toda nuestra atención al mercado nacional, que para nosotros sigue siendo uno de los más importantes”, En opinión del representante de la compañía, “la inversión municipal en España se está recuperando”.
Ese espíritu de internacionalización de Contenur, hace que el fabricante adapte sus desarrollos a las condiciones inherentes a cada país: “Nuestros productos se adaptan a las peculiaridades de cada mercado, en particular en lo que respecta a los desarrollos específicos, que permiten adaptarnos de manera adecuada a las necesidades reales de los clientes”
En cuanto a la marcha del salón, declaró: “Lo cierto es que en esta edición de Ifat nos está yendo muy bien y tenemos muchas expectativas de negocio. Venimos a la feria no solo para reforzar nuestra imagen de marca, sino para proyectarnos a nuevos mercados y para mostrar nuestros nuevos desarrollos. De hecho, hemos recibido visitas de empresas de Singapur, Myanmar, Filipinas, norte de África, Brasil…”.
Durante la celebración de Ifat se celebraron diversos debates y seminarios. Una de las novedades de la edición de este año fue la plataforma 'experience.science.future' que sirvió de pasarela a nuevas empresas interesadas en mostrar sus desarrollos tecnológicos.
Satisfacción de Anmopyc
El salón muniqués contó con la asistencia de empresas españolas, una presencia que en el caso de los fabricantes de maquinaria fue coordinada por la Asociación Española de Fabricantes de Maquinaria de Construcción, Obras Públicas y Minería, Anmopyc, cuyo director general, Jorge Cuartero, valoró muy positivamente el desarrollo de la feria. En declaraciones realizadas en el mismo certamen a Enviropres, el director general del colectivo apuntó que Ifat es, sin duda, la principal cita internacional para la industria medioambiental, una industria que gracias a la mayor preocupación de la sociedad por el cuidado del entorno, patente en las cada vez más exigentes normativas legales, está viviendo un momento dulce.
Cuartero, quien destacó la excelente imagen que la industria nacional tiene fuera de nuestras fronteras, enumeró algunas de las regiones en las que los productos y soluciones españolas gozan de una mejor acogida: Latinoamérica, el norte de África, Oriente Medio y Europa, aunque la labor exportadora está también dando sus frutos en otras zonas geográficas.
Asimismo, el director general de Anmopyc valoró el proceso de diversificación -tanto desde el punto de vista geográfico como de la oferta- realizado por la industria nacional en los últimos años, en los que el hundimiento de la demanda interna obligó a los proveedores españoles a intensificar su carácter exportador. Este proceso se ha apoyado en la flexibilidad de los fabricantes españoles, que pueden ajustarse a las demandas específicas de cada cliente, señaló Cuartero.
La asistencia a Ifat 2018 de las empresas integradas en Anmopyc fue organizada por la propia asociación y apoyada por Icex, España Exportación e Inversiones, y cofinanciada por los Fondos Feder.
Un sector exportador
Javier Vega, director comercial internacional de Imabe Ibérica, declaró a Enviropres que “todos los años desarrollamos nuevos modelos, en prensas de papel, de chatarra… Estamos trabajando con un atado de cuerda especial para CDR (Combustible de Residuo Sólido) que ya habíamos probado en otros sectores y que queremos potenciar en el CDR”.
“Ifat es un punto de encuentro y más aun siendo la feria más importante del mundo. Este tipo de salones son una oportunidad para ver a los agentes, a los distribuidores, a algunos clientes, así como a empresas interesadas en conocer nuestros productos”, declaró el director comercial internacional de Imabe Ibérica, compañía que en algunos ejercicios logra el 80% de su facturación en mercados exteriores. “Somos una empresa eminentemente internacional. Tenemos maquinaria en 60 países diferentes. Nuestro principal mercado es lo que denominamos ‘las Américas’, desde Estados Unidos a Chile. Es un continente en el que somos bastante fuertes”.
“La ventaja de estar diversificados, tanto desde el punto de vista geográfico como de producto (trabajamos con chatarra, papel y cartón, plástico y residuos), es que las caídas que se puedan sufrir en un segmento son compensadas por subidas en otros. Al final, lo que conseguimos es cierta estabilidad en las ventas”, agregó Vega, quien añadió que “la imagen de los fabricantes españoles fuera de nuestras fronteras es buena. Hay ciertos fabricantes con prestigio y, además, nos ayuda el hecho de que las principales constructoras españolas están muy presentes en el sector de la gestión de residuos. Son empresas como Urbaser, FCC, Ferrovial… Se trata de grandes ‘players’ a nivel internacional”.
“El trabajo más relevante relacionado con la asistencia a una feria como Ifat empieza cuando finaliza el salón. Hay que ser persistente y trabajar todos los contactos logrados durante estos días. El seguimiento posterior es muy importante, ya que aquí hay un exceso de oferta, por lo que es necesario diferenciarse del resto de proveedores”, explicó.
En cuanto a la conciencia medioambiental en España, Vega opinó que “está mejorando”, aunque admitió que este cambio “va poco a poco”. Entre todos los actores que participan en el sector de la protección del medio ambiente “se está haciendo una gran labor, pero mucho residuo termina todavía en el vertedero”, lamentó.
“Ese cambio cultural, que aún es preciso impulsar, debería iniciarse incluso a nivel educativo para que los niños sepan el valor que tienen los residuos y las ventajas medioambientales y económicas que genera una correcta gestión de los mismos”, propuso Vega.
Las intermitentes lluvias primaverales limitaron la actividad en la zona exterior del salón, pero cuando el sol logró imponerse el seguimiento de las demostraciones fue masivo.
La inteligencia artificial aplicada a la selección de residuos
La asistencia a Ifat fue valorado muy positivamente por parte de Tomra Sorting Recycling, compañía que corroboró en el salón el creciente interés en las tecnologías de reciclaje, en parte debido, como hemos señalado a los nuevos marcos legislativos y a la cada vez mayor concienciación ambiental.
El stand de la compañía estuvo dividido en las secciones ‘Reciclaje de metal’, ‘Residuos’, ‘Economía circular’ y ‘Futuro’, en esta última se reunieron las próximas innovaciones de la empresa noruega.
El vicepresidente ejecutivo y director de Reciclaje de Tomra Sorting Recycling, Tom Eng, valoró positivamente “la creciente demanda de soluciones de clasificación” y apuntó que “cada vez hay más países que exigen tecnologías eficientes de clasificación y reciclaje, y existe un interés real en los avances que se lograrán gracias a la innovación”. En este sentido, Eng señaló que las mejoras más relevantes “serán cada vez más sofisticadas gracias a la aplicación de la inteligencia artificial (IA), cuya integración en las máquinas Tomra es mayor que en cualquier otro fabricante”.
Un ejemplo de esta apuesta por la IA es el sistema de Detección de Objetos mediante Láser (LOD, en sus siglas en inglés), capaz de detectar materiales que la tecnología de infrarrojo cercano no puede identificar ni clasificar. Mediante su utilización se logra “que el reciclaje de residuos y chatarra alcance niveles de pureza impensables hasta el momento”, apuntaron fuentes de la firma nórdica.
Otra muestra reciente de la innovación tecnológica que Tomra aplica a sus productos es el ‘Autosort Black’, “la primera máquina que recupera polímeros negros con valor económico procedentes de material de envases o embalajes”.
Dentro de la sección ‘Futuro’ los visitantes pudieron comprobar algunas de las prestaciones de ‘Tomra Insight’, un sistema telemático de software que permite a los usuarios disponer de información a distancia y en tiempo real sobre el funcionamiento de sus máquinas de reciclaje.
Vogelsang, marcando el camino
Vogelsang acudió a Ifat 2018, donde mostró su tecnología de gestión de aguas residuales, incluido el nuevo XRipper XRG, indicado para caudales máximos, así como el XRipper XRC100-960QD, que ofrece tasas máximas de flujo para diámetros estrechos.
El fabricante de bombas lobulares, trituradores y maceradores, con casi nueve décadas de actividad (fue fundada en 1929), ha ido adaptándose a las demandas de la sociedad y ha diversificado su actividad, que originalmente estaba especializada en la fabricación de cisternas para el traslado de purines. Las dificultades a las que se enfrentaban sus clientes a la hora de cargar las cubas, hizo que la empresa familiar diseñara bombas lobulares con lóbulos engomados, trituradores para macerar fibras o alimentadores para plantas de biogás, entre otros muchos productos, resumió a Enviropres Jaume Tarragó, gerente de Vogelsang en España.
La firma opera, principalmente, en los sectores de la gestión de aguas residuales, en el de Biogás, en Agricultura y Ganadería y, además, en el Transporte, explicó Tarragó, quien recordó que en España está vigente una nueva regulación “que prohíbe la utilización del plato para tirar los purines y obliga a la utilización de sistemas medioambientalmente respetuosos. Nosotros estamos comercializando un sistema que lleva utilizándose más de 30 años en Alemania y que permite repartir el purín de forma uniforme. Además, fabricamos y comercializamos sistemas para trasvasar purines entre balsas, otros que trituran fibras contenidos en el purín… Nuestro catálogo es muy amplio”, remarcó.
En España hay muchas zonas que son vulnerables al vertido de purines. De hecho, “hay lugares en las que la concentración de granjas es tan alta que no se pueden depositar purines en ellas”. Esta situación obliga a buscar soluciones “a un serio problema medioambiental como es éste. Hasta hace un tiempo las plantas de biogás eran una adecuada forma de gestionar de manera adecuada y respetuosa con el entorno los purines, pero los cambios legislativos que han desincentivado estas plantas”, lamentó el gerente de Vogelsang en España.
Estos cambios legislativos, en particular el que ha afectado a las renovables en España, han generado problemas, sobre todo a la industria solar, que estaba logrando importantes cuotas de penetración, pero también a tecnologías más emergentes como el biogás, cuyo desarrollo quedó cercenado con estas modificaciones, que han frenado muchas inversiones.
Evolución positiva
El mercado ibérico representa un 3% del volumen de negocio total de Vogelsang, mientras que alrededor del 45% proviene de su mercado doméstico, el alemán. El desarrollo de la empresa en España -cuya delegación se ubica Valls, Tarragona, desde 2007- es muy positivo. “Contamos con un equipo de doce personas y seguramente vamos a iniciar la puesta en marcha de una planta de ensamblado, lo que supone una decidida apuesta de la compañía por el mercado ibérico”, anunció Tarragó.
El potencial del biogás en España es muy elevado, “pero el problema, como he señalado antes, es que no hay un marco legislativo propicio. Las tecnologías son conocidas, lo que es necesario es que haya un entorno favorable. Un ejemplo muy revelador es que en Alemania operan unas 10.000 plantas de biogás y en España hay 38. Una diferencia abismal, más aún si se tiene en cuenta que la diferencia en cuanto a cabezas de ganado no es, ni mucho menos, tan grande entre ambos países. La ausencia de un marco estable ha frenado la actividad de fondos de inversión interesados en entrar en el sector español”, constata Tarragó, quien apunta que “la valoración que reciben los purines ha cambiado. Si antes se consideraban un residuo, ahora se consideran un producto. En los últimos diez años ha habido un gran cambio, y creo que en los próximos cinco el cambio será aún mayor”, augura.
Apoyo a las ‘startups’
Una de las novedades de la edición de 2018 de Ifat fue la plataforma 'experience.science.future', ubicada en el pabellón B4, que sirvió de pasarela a nuevas empresas interesadas en mostrar sus desarrollos tecnológicos.
El director general de Messe München, Stefan Rummel, afirmó que “como la feria más importante del mundo dedicada a las tecnologías medioambientales, Ifat es el lugar perfecto para avanzar en el desarrollo de nuevas ideas de negocio. El objetivo de nuestra nueva plataforma ‘experience.science.future’ es impulsar un centro de innovación para la industria al traer ‘startups’ que trabajan en tecnología junto con clientes potenciales, socios e inversores”.
La limpieza urbana, hábitat de las cajas de cambio Allison Transmission
Empresas con fuerte presencia internacional, también en nuestro mercado, acudieron a Ifat para mostrar algunas de sus últimas novedades. Fue el caso de Allison Transmission, que ha suministrado una de sus transmisiones completamente automáticas de la serie 3200 a una barredora hidrostática Euro 6 sobre un chasis Volvo.
Fuentes de la compañía estadounidense apuntaron que el uso de cajas de cambios completamente automáticas en barredoras hidrostáticas es “muy reciente. Estas transmisiones”, añadieron, “ofrecen una mayor productividad, menores gastos de explotación y -sin duda- una mayor comodidad en la conducción”.
La barredora, montada sobre un chasis Volvo FL 250 4 x 2 y carrocería dual Johnston VS651, está equipada con un motor diésel Euro 6 de 7,7 litros y 188 kW (252 cv de potencia), ofrece 969 Nm de par motor y está equipado con caja de cambios Allison 3200.
La combinación de una transmisión Allison con una transmisión hidrostática permite combinar perfectamente el “modo transporte” de la barredora con el “modo trabajo”. Cuando el vehículo circula con normalidad la caja de cambios Allison permite velocidades convencionales de hasta 80 km/h. La transmisión automática, “de conmutación mecánica con tracción hidrostática integrada, permite un control continuo de la velocidad en el modo de barrido. Está incorporada al bastidor y puede cambiarse de forma directa y activarse estando en el modo de transporte”, detallaron fuentes de Allison.
Para las operaciones de barrido, la transmisión hidrostática pasa al modo trabajo. “La aceleración en dos etapas permite un absoluto control de la velocidad que puede establecerse entre 0 y 40 km/h en marcha rápida, y de 0,1 a 16 km/h, para el modo barrido. El accionamiento hidráulico de turbinas, bombas de agua y cepillos se lleva a cabo a través de bombas hidráulicas instaladas en la transmisión hidrostática”, explican desde la compañía.
“La velocidad del vehículo puede regularse en cada momento y de forma independiente de la función de aspiración”, afirmó Peter Bantlin, director de ventas para Europa de Johnston Sweepers, quien agregó que “la caja de cambios automática Allison elimina los golpes por interrupciones de potencia entre marchas y en los procesos de cambio manual de marcha entre ambos modos”, una característica que “logra reducir de forma significativa tanto el estrés como la tensión de los conductores”.
La transmisión automática Allison 3200 cuenta con una exclusiva tecnología de ahorro de combustible que selecciona de forma automática la mejor marcha según el ciclo de trabajo y las condiciones de la carretera. Además, la coordinación entre la Allison 3200 y una unidad hidrostática elimina la necesidad de un segundo motor de combustión, por lo que se reducen las emisiones tanto en términos de contaminación como de ruido. Además, al ir equipados con único motor se trata de vehículos más ligeros capaces de transportar mayores cargas.
Las cajas automáticas del fabricante estadounidense permiten controlar y maniobrar el vehículo con una mayor precisión que las cajas manuales o automatizadas. Para ello, en lugar del tradicional embrague seco, utilizan un convertidor de par que multiplica suavemente el par motor durante el arranque y la aceleración. Las transmisiones automáticas Allison ofrecen cambios suaves sin interrupciones para lograr una mayor velocidad media, mayor productividad y mayor comodidad para el conductor. Además, el mantenimiento de la caja de cambios Allison requiere menos tiempo y es más económico que el de las manuales o manuales automatizadas, que requieren pasar periódicamente por el taller para cambiar el embrague.
El vehículo expuesto en Ifat es propiedad de Berliner Stadtreinigung, el Servicio de Limpieza de Berlín, ciudad en la que será sometido a pruebas durante un año. “En la actualidad contamos con unos 650 vehículos equipados con transmisiones completamente automáticas Allison. Poco a poco iremos equipando con estas cajas de cambios aún más vehículos de nuestra flota, ya que están sometidos a intensos ciclos de arranques y paradas”, avanzó Wolfgang Wüllhorst, director de Gestión de Flota de Berliner Stadtreinigung.