Abierta la convocatoria de los Premios Green Alley 2018 para start-ups orientadas a la economía circular
Empresarios y start-ups que hayan desarrollado un modelo de negocio en el campo de la economía circular digital, el reciclaje y la prevención de residuos ya pueden presentar sus ideas de negocio al premio Green Alley, creado por Landbell Group, matriz de ERP. Las candidaturas para optar al premio, con una dotación económica de 25.000 euros para el ganador, pueden presentarse hasta el próximo 1 de julio de 2018.
El premio Green Alley, creado por Landbell Group, matriz de ERP, en 2014, es el primer galardon europeo para start-ups centradas en economía circular. En la presente edición, emprendedores y las start-ups tienen la oportunidad de presentar de nuevo sus proyectos más innovadores, hasta el próximo 1 de julio de 2018. La dotación económica para el ganador es de 25.000 euros.
Las candidaturas pueden realizarse online a través de la web www.green-alley-award.com. El ganador se anunciará a finales de octubre en un evento en directo.
El premio Green Alley 2018 se dirige a todas las start-ups y jóvenes empresarios que han desarrollado un modelo de negocio en el campo de la economía circular digital, el reciclaje y la prevención de residuos. Esta iniciativa se dirige a empresas que quieran lanzar sus productos o que estén en fase de crecimiento y a aquellas start-ups que quieran ampliar sus fronteras hacia mercados europeos. La única condición es que la idea de negocio contribuya al reciclaje de recursos.
De muchas ideas surge un objetivo común: una economía circular
“Estamos entusiasmados, ya que el premio Green Alley está entrando en su quinta edición este año”, explica Jan Schulz, CEO de Landbell Group. Esta compañía, con actividad a nivel global y sede en Mainz (Maguncia), Alemania, es líder en la prestación de servicios y asesoramiento en materia de cumplimiento de la normativa medioambiental y de productos químicos. “En los últimos años, hemos conocido muchas ideas de negocio innovadoras y emocionantes que nos ofrecen pautas concretas para establecer gradualmente un modelo de economía circular en Europa”. En una economía circular, el valor de los productos, materiales y recursos debe conservarse al máximo a lo largo de todo el ciclo económico, a la vez que se generan los mínimos residuos posibles”. En nuestro actual modelo económico lineal no todos los productos se reciclan al final de su vida útil, lo que implica un malgasto de materiales valiosos.
La economía circular ofrece un enorme potencial de negocio para los jóvenes emprendedores y start-ups, ya sea evitando la generación de materiales plásticos, fomentando el desarrollo de materiales sostenibles o el uso múltiple de productos, tal y como se desprende de la diversidad de ideas de los ganadores de Green Alley de las últimas ediciones. En 2017, la start-up finlandesa Sulapac, convenció al jurado con una alternativa sostenible al empaquetado plástico. Suvi Haimi y Laura Kyllönen, los dos científicos responsables, desarrollaron un material para empaquetado hecho con madera biodegradable pero que mantenía las cualidades de impermeabilidad y resistencia al agua del plástico. Este tipo de empaquetado ya se usa principalmente en la industria cosmética. Entre otras innovaciones previamente galardonadas encontramos ‘Breathaboard’ de Adaptavate, una alternativa transpirable y reciclable frente a las planchas de yeso convencionales; o la start-up finlandesa RePack y sus envases reutilizables para envíos.
El objetivo del premio Green Alley es reunir a los pioneros de la economía circular para trabajar con ellos en sus modelos de negocio y, en la medida de lo posible, ponerlos en contacto con potenciales clientes. “Queremos ofrecer a los emprendedores una plataforma en la que presentar sus ideas y desarrollarlas junto a nosotros”, comenta Schulz. “Los finalistas tienen la oportunidad de mantener un intercambio exhaustivo de ideas con nuestros expertos en los talleres”.
¿Cuáles son los siguientes pasos?
Los emprendedores interesados y las start-ups de toda Europa pueden presentar sus ideas hasta el 1 de julio de 2018. De entre las solicitudes recibidas, se seleccionará a 6 finalistas que se darán a conocer a principios de septiembre. Se invitará a los finalistas a acudir a Berlín el 18 de octubre, donde trabajarán en sus modelos de negocio en sesiones de debate individuales con profesionales de LBG, así como con otros expertos externos en economía circular y el sector de las start-ups. Al final de la jornada, los finalistas presentarán sus proyectos en el escenario frente a un jurado experto y un público internacional en un discurso de cinco minutos de duración. El jurado estará compuesto por representantes de Landbell Group así como por expertos externos entre los que se incluyen Alexis Figeac, creador del proyecto de la UE R2Pi sobre Modelos de Economía Circular, y Suvi Haimi, CEO y cofundador de la start-up Sulapac que ganó el premio en la edición anterior.
El ganador del premio Green Alley 2018 recibirá 25.000 € en metálico.