Las renovables generan ahorros récord en el sistema eléctrico español y superan el 50% de la producción energética
Las energías renovables han consolidado su impacto positivo en la economía y el medio ambiente de España durante 2023, marcando nuevos hitos en generación y ahorro energético. La integración de tecnologías limpias como la solar y la eólica permitió un ahorro de 12.745 millones de euros en el mercado eléctrico, el cual se complementa con un ahorro neto de 9.575 millones debido a una retribución regulada en mínimos. El uso de energías renovables en la matriz energética evitó la importación de combustibles fósiles por valor de 15.622 millones y contribuyó a reducir las emisiones de CO2, lo que supuso un ahorro adicional de 5.586 millones. Sin embargo, el sector tuvo que hacer frente a ciertas dificultades, como una leve reducción en la instalación de nueva potencia eólica y de autoconsumo, lo que afectó al empleo. Estos datos, extraídos del 'Estudio del Impacto Macroeconómico de las Energías Renovables 2023' de Appa Renovables, fueron presentados el pasado 25 de octubre por Santiago Gómez y José María González, presidente y director general de la asociación, respectivamente.
En 2023, el sector de las energías renovables en España mantuvo su tendencia de crecimiento, registrando cifras destacadas en ahorro económico y contribución a la sostenibilidad ambiental. Según el estudio de Appa Renovables, la generación de electricidad mediante energías limpias alcanzó el 50,4% de la producción total en el país, un récord histórico que consolida el papel de las renovables como eje de la transición energética.
Ahorros millonarios y menor dependencia de los fósiles
Durante el último año, el mercado eléctrico español experimentó ahorros notables gracias a la presión a la baja ejercida por la energía renovable en los precios del mercado mayorista. El informe detalla que la generación renovable redujo los costes eléctricos en 12.745 millones de euros, frente a una retribución específica de apenas 3.170 millones tras la salida de la eólica y la hidráulica de los incentivos, lo cual dejó el ahorro neto en una cifra récord de 9.575 millones de euros. En paralelo, el uso de renovables evitó la importación de aproximadamente 25 millones de toneladas equivalentes de petróleo, equivalentes a 15.622 millones de euros, destacándose como una herramienta clave para reducir la dependencia de fuentes fósiles.
La importancia de esta contribución es evidente cuando se observa que, en ausencia de renovables, el precio medio de la electricidad en España se habría situado en 142,60 €/MWh, muy por encima de los 87,10 €/MWh registrados en 2023. Esta disminución en los precios contribuyó significativamente al bienestar de consumidores e industrias, quienes pudieron acceder a una energía más barata y estable, incluso en un contexto de volatilidad energética global.
Aportación al PIB y empleo
Pese a la reducción de los precios de la energía, que limitó los ingresos sectoriales, las renovables aportaron un total de 16.495 millones de euros a la economía española, representando el 1,13% del Producto Interior Bruto (PIB) nacional. Este dato, si bien refleja una ligera disminución respecto a los máximos históricos de 2022, mantiene al sector en una posición de estabilidad económica. Además, las renovables generaron 127.576 empleos, aunque con una leve contracción del 2,5% debido a la desaceleración en la instalación de nuevas capacidades de autoconsumo y energía eólica.
Este leve retroceso en el empleo pone en evidencia la necesidad de dinamizar la demanda eléctrica en España. Appa Renovables ha insistido en la importancia de equilibrar la oferta y la demanda, señalando que, sin el desarrollo de soluciones de almacenamiento energético y una mayor flexibilidad en la demanda, podrían generarse periodos de sobreproducción que impacten negativamente en el precio de la electricidad. Como subraya Santiago Gómez, presidente de la asociación, "la electrificación de usos fósiles y el desarrollo de nueva industria electrointensiva son aspectos esenciales para aprovechar el potencial renovable del país".
Diversificación tecnológica
En 2023, las energías renovables en España mantuvieron un papel decisivo en la generación eléctrica, destacándose especialmente la solar fotovoltaica, la eólica y la hidráulica, tecnologías que han logrado afianzarse en el mix energético gracias a sus aportaciones en capacidad instalada y generación de electricidad.
La energía solar fotovoltaica agregó 6,1 GW para venta a red y registró 1.943 MW en autoconsumo, aunque este último segmento mostró un retroceso del 27% respecto al año anterior. En conjunto, la fotovoltaica cubrió el 14% de la demanda eléctrica nacional y generó miles de empleos directos.
La eólica, que aportó el 23,5% de la electricidad generada en España, produjo unos 63 TWh, consolidándose como la mayor fuente de generación renovable. Sin embargo, el crecimiento en capacidad fue limitado, con 714 MW adicionales, y su ralentización impactó en la creación de empleo del sector.
La energía hidráulica se recuperó en 2023 tras la sequía de 2022, alcanzando el 9,5% de la generación eléctrica. Este incremento ha sido clave para estabilizar el mercado eléctrico, especialmente en picos de demanda y fluctuaciones de otras renovables.
Tecnologías como la biomasa y la geotermia aportan estabilidad en áreas rurales y contribuyen a diversificar el mix energético, reforzando la autosuficiencia y la generación de empleo local, aunque su peso en la generación global sigue siendo menor.
Este despliegue de renovables en 2023 evitó la emisión de 66,9 millones de toneladas de CO2, generando un ahorro en derechos de emisión por valor de 5.586 millones de euros. Este logro representa una importante contribución al objetivo nacional de reducir las emisiones y cumplir con las directrices europeas para alcanzar la neutralidad de carbono en 2050. De hecho, España ha avanzado en sus compromisos ambientales, al tiempo que mantiene su independencia energética en máximos históricos gracias al mayor protagonismo de fuentes autóctonas.
Estrategias para la próxima década: alineación con el PNIEC
La actualización del Plan Nacional Integrado de Energía y Clima (PNIEC) 2023-2030 establece objetivos claros para maximizar el potencial renovable en el país. Para 2030, el Gobierno se ha propuesto reducir las emisiones un 32% respecto a 1990 y lograr un 81% de energía renovable en la generación eléctrica. Estos objetivos, aunque ambiciosos, se consideran alcanzables siempre y cuando se implementen medidas que fomenten la electrificación de la demanda y el desarrollo de infraestructura para el almacenamiento y distribución.
“El PNIEC establece metas claras y ambiciosas, entre las que destaca de forma importante la electrificación de la demanda, un objetivo que, desde Appa Renovables, compartimos plenamente y valoramos de manera muy positiva”, destacó Santiago Gómez. Sin embargo, también señaló los importantes retos a los que se enfrenta el Plan: el desequilibrio entre oferta y demanda y el desequilibrio entre tecnologías. "Si no avanzamos en el desarrollo del almacenamiento energético, la flexibilidad en la demanda y la búsqueda de un mix renovable equilibrado, lo que vivimos en abril (precio eléctrico mensual más bajo de la historia) podría convertirse en tendencia", reflexionó Gómez Ramos.
En su intervención, el presidente de la asociación se refirió al objetivo de incrementar un 34% la demanda eléctrica hasta 2030 como una meta "tan ambiciosa como necesaria" y recordó que tendrá que convivir con el desarrollo del autoconsumo y el impulso a la eficiencia energética, medidas ambas que reducen la demanda eléctrica de forma efectiva.
"Debemos impulsar las renovables en todos los ámbitos, especialmente en usos térmicos y transporte. Para equilibrar oferta y demanda en el sector eléctrico, es necesario que pongamos medidas efectivas sobre la mesa para incentivar la electrificación de usos fósiles y atraer nueva industria electrointensiva que nos permitan aprovechar todo nuestro potencial", concluyó el presidente de Appa Renovables.