Cero fugas
24 de marzo de 2011
Las fugas de emisiones son vistas a menudo como un residuo inevitable en las instalaciones industriales. El origen de las fugas de emisiones puede ser tanto intencionado (por ejemplo, venteo de tanques, controladores, compresores de venteo, etc), como no intencionado (daños en el equipamiento por roturas o desgaste, montaje incompleto o incorrecto de los componentes, defectos de fabricación, etc). En muchos casos, estas fugas han pasado desapercibidas porque se han considerado insignificantes y difíciles de detectar y medir.
Estudios recientes han demostrado que estas fugas no sólo le cuestan a la industria mucho dinero por pérdida de producto, sino que además pueden suponer considerables problemas de seguridad y provocar fugas significativas de metano (un gas que produce efecto invernadero) y componentes volátiles orgánicos (CVO).
Dado que a menudo las emisiones son invisibles, no se ha regulado sobre ellas y a veces pasan desapercibidas, la industria se ha visto confrontada con el reto de encontrar un método de coste reducido, eficiente y exitoso para eliminar o reducir las emisiones de fuga.

El programa de detección y reparación de fugas
El programa de detección y reparación de fugas (LDAR) es un sistema para cumplir con las cada vez más presentes regulaciones ambientales, y para reducir o evitar las emisiones de productos químicos al entorno. Los componentes de proceso sujetos a LDAR necesitan ser monitorizados periódicamente para detectar fugas que se deben reparar dentro de un periodo predefinido de tiempo.
Las válvulas de alivio de presión son indispensables para la protección de muchos procesos y, en definitiva, de sus negocios. Sin embargo, muchos de estos equipos, ampliamente usados, son también fuente de continuas fugas.
Si bien las válvulas de alivio de presión son una parte vital de los procesos industriales, pueden ser también una fuente de emisiones durante el proceso. Instalar discos de ruptura aguas arriba de las válvulas de alivio de presión no sólo las protege, sino que reduce el riesgo de emisiones.
Asequibles y efectivos para aplicaciones con líquidos y vapor, los discos de ruptura son 100% a prueba de fuga. De hecho, los niveles de estanqueidad de los discos de ruptura superan de lejos los límites establecidos por las regulaciones de la industria.

Además, al reducir la exposición de las válvulas a la corrosión y evitar la acumulación de materiales, polimerización y ebullición, las válvulas de alivio (válvulas de seguridad) protegidas por Fike Valveguard amplían la duración de su vida útil y aumenta su disponibilidad para funcionar cuando se necesita.
Otras ventajas que ahorran costes
- Posible exención de las obligaciones de monitorización de las PRV.
- Las emisiones cero durante el funcionamiento normal significa que no habrá coste de recogida y gestión de residuos.
- Reducir significativamente las posibles multas por fugas o emisiones.
- El cálculo de cero emisiones diarias debido a las PRV permite vender créditos de emisiones para aumentar los beneficios.
El uso de la combinación de las válvulas de seguridad y discos de ruptura permite a las industrias responder de una manera positiva a las nuevas directivas globales sobre emisiones, para proteger el medio ambiente, reducir los costes de mantenimiento y evitar las paradas de producción.