El Congreso Nacional de la Distribución Química celebra con éxito su undécima edición

La Asociación Española del Comercio Químico (AECQ) ha celebrado con éxito este martes 21 de noviembre el Congreso Nacional de la Distribución Química (CNDQ) en el auditorio del Instituto Químico de Sarrià. Bajo el lema 'Química inteligente para un futuro sostenible', los asistentes han debatido sobre la digitalización de las empresas del sector y las consecuencias de la inteligencia artificial aplicada a la industria química. Una jornada que ha sido posible gracias al patrocinio de Bidons Egara, Tandem HSE, Daviplus, Eigenmann & Veronelli, Helm Ibérica y, como Institutional Partner, el Instituto Químico Sarrià (IQS).

El CNDQ es el punto de encuentro anual del sector de la distribución química que se ha convertido en una cita muy importante para el sector, por el interés de sus ponencias. El presidente de la AECQ, Joan Tortosa, dio una cálida bienvenida a los representantes del sector de la distribución química. Después de un breve análisis de la situación actual, destacó la importancia del congreso para impulsar el networking y conocer las herramientas de las que disponen los asociados. Como recordaba el representante de la asociación, el congreso se presentaba como un importante foro donde debatir y conocer cómo cerrará la industria el año: “2023 no ha sido como el año anterior. Los costes de la energía y otros factores, entre los que se incluye los efectos post pandemia, han marcado este año”. Tras el congreso tuvo lugar la asamblea de AECQ.

Como en otras ediciones, la asistencia fue muy representantiva.

Tras explicar los puntos destacados de la mañana, ha pasado la palabra a Salvador Borrós, director general del IQS. Borrós destacó la perfecta alineación entre los temas que se han tratado en el congreso y los estudios que realizan en el IQS los futuros profesionales del sector químico. La universidad juega un papel esencial para un sector que en 2021 facturó más de 18.000 millones de euros en España. El representante del IQS describió los cambios que se están desarrollando en el Instituto para estar en línea con los cambios del sector: “Hemos remodelado el departamento de química analítica. Las regulaciones son cada vez más exigentes y hemos desarrollado nueva instrumentación enfocada a dar servicio a la industria e investigación tanto a nivel de medioambiente y residuos como en el desarrollo de control de nuevos procesos más sostenibles”.

Están muy implicados en la descarbonización y en el reciclado químico por ello, las nuevas instalaciones plantean procesos de pirólisis, extrusión reactiva y  la creación de plantas pilotos para producir químicos en flujo. Asimismo, han creado junto a la Ramon Llull, un nuevo grado de matemática aplicada.

De izq. a dcha.: Irene Dávalos, Salvador Borrós, Joan Tortosa, Josep Ruano y Aitor Larrauri, ponentes del primer bloque.

Las ponencias de la jornada se dividieron en dos bloques según su temática. El primero se centró en cómo afectarán la digitalización y la inteligencia artificial a la distribución química. Respecto al impacto en la cadena de suministro, Josep Ruano, especialista tecnológico y miembro del consejo de administración de Ackcent Cybersecurity, BiteRight y Grupo Barcelonesa, remarcó que la IA “no predice el futuro, sino que proyecta el pasado de forma sofisticada”, y que su aplicación afectará a la distribución química a múltiples niveles.

Salvador Borrós, director general del IQS, durante su intervención.

Por su parte, Aitor Larrauri, director business Intelligence and Innovation en Hays, se ha centrado en la incidencia para los Recursos Humanos: “Habrá un cambio de roles, de técnicos a gestores, con conocimientos para controlar lo que hace la #IA”. Finalmente, Irene Dávalos, director, Digital and Sustainability en DKSH Business Unit Performance Materials, ha puesto como ejemplo la transformación de su compañía con la creación de un ecosistema digital propio y la inversión en el tratamiento de datos para mejorar la eficacia de las ventas comerciales: “Hemos aportado valor a los datos, tanto internamente como a nuestros partners”.

Josep Ruano, especialista tecnológico y miembro del consejo de administración de Ackcent Cybersecurity, BiteRight y Grupo Barcelonesa.

Tras un espacio de descanso para el reencuentro y networking, arrancó el segundo bloque del congreso, dedicado a la sostenibilidad. En este ámbito, Rafael González Olmos, Grupo de Ingeniería y Simulación de Procesos Ambientales (Gespa), Departamento de Ingeniería Química y Ciencia de los Materiales de IQS, afirmó que “la estrategia de la UE implica impulsar la resiliencia en el suministro y la sostenibilidad de las sustancias químicas clave para aplicaciones esenciales en la sociedad”. Destacó datos del sector: la industria química es la cuarta más importante de la UE; el sector comprende 30.000 empresas y da empleo a 1,2 millones de personas; el 95% de las empresas son pymes. Europa es el segundo productor mundial de sustancias químicias con un 16,9% de las vetas (2018).

"¿Por qué necesitamos una estrategia de sustancias químicas para un entorno libre de sustancias tóxicas y más sostenible para el 2030 y más allá? Muchos compuestos químicos son indispensables para nuestro nivel de vida y la economía, sin embargo, pueden dañar el medio ambiente y la salud humana, interferir en la vida de los ecosistemas y debilitar la capacidad de resiliencia humana. El 84%de los europeos está preocupado por el impacto en la salud de los productos químicos presentes en productos de uso diario y el 90% de los europeos está preocupado por el impacto de los compuestos químicos en el medio ambiente", apuntó. La UE y sus estados miembros están trabajando en una nueva estrategia sobre sustancias químicas para cumplir con el Green Deal Europeo para proteger la salud humana y apoyar un entorno sin sustancias tóxicas.

La nueva Estrategia de la UE de Sostenibilidad para las Sustancias Químicas tendrá cinco ámbitos de actuación: apoyar la innovación para que se diseñen productos más seguros; prohibir las sustancias químicas tóxicas a menos que sean esenciales o no existan alternativas, garantizando a la vez la protección de las personas; limitar la exposición a las sustancias químicas nocivas para el sistema hormonal y a los efectos combinados tóxicos de las sustancias químicas; mejorar la legislación y simplificar los procedimientos para evaluar el riesgo de las sustancias químicas y, por último, dar ejemplo para lograr un planeta sin sustancias tóxicas.

Rafael González Olmos, Grupo de Ingeniería y Simulación de Procesos Ambientales (Gespa), Departamento de Ingeniería Química y Ciencia de los Materiales de IQS, en su ponencia.

Acciones clave de la estrategia:

• Prohibir la mayoría de los compuestos químicos dañinos en los productos de consumo permitiéndolos solo cuando sea esencial.
• Considerar los efectos sinérgicos por presencia de múltiples substancias (cocktail) cuando se evalúen riesgos asociados a compuestos químicos.
• Reducir progresivamente la presencia de substancias polifuoroalquiladas (PFAS) en la UE, siempre que su uso no sea esencial.
• Impulsar la inversión y la capacidad de innovación para la producción y uso de compuestos químicos que sean seguros y sostenibles mediante diseño a través de todo su ciclo de vida.
• Promover la resiliencia de la UE en el suministro y sostenibilidad de sustancias críticas.
• Establecer un proceso simple “una substancia una evaluación” para la evaluación de riesgo y peligros de compuestos químicos.
• Jugar un rol de líder global promoviendo altos estándares y no exportando compuestos químicos prohibidos en la UE.

Desde IQS que podemos ofrecer a las empresas", indicó Rafael González:

• Asesoramiento y consultoría en temas de sostenibilidad.
• Análisis de ciclo de vida de la producción de nuevos compuestos químicos.
• Análisis de sostenibilidad de nuevos procesos productivos.
• Estudios de mejora de procesos basándonos en enfoques de economía circular i/o biotecnológicos.
• Análisis químico y evaluación de toxicidad de la presencia de múltiples substancias (cocktail) en diferentes matrices (productos o medio ambiente).
• Búsqueda de alternativas más seguras y sostenibles a productos que cada vez sean más regulados por la normativa.

El bloque se completó con una mesa redonda sobre la voz de los SCRAPs una vez iniciada su singladura, moderada por José María Plana, technical manager en Quimidroga, en la que han participado Isabel Goyena, directora del Proyecto Envalora, Laura Sanz de Siria, coordinadora de Implica, y Esther Colino, responsable de Asuntos Públicos y Comunicación de Procircular.

La intervención de Isabel Goyena se centró en los cambios que supondrá para las empresas el nuevo marco legal. Con la aprobación del nuevo Real Decreto 1055/2022 de envases y residuos de envases, todas las empresas que por su actividad ponen envases y embalajes en el mercado nacional para transportar y vender sus productos a los clientes, deben asumir una serie de obligaciones y responsabilidades que suponen un gran cambio de paradigma. Por ello, desde la industria y de forma proactiva y solvente, se ha creado Envalora: un nuevo Sistema Colectivo de Responsabilidad Ampliada del Productor (Scrap), impulsado por más 690 empresas y más de 20 asociaciones de diversos sectores industriales.

El nuevo marco legal trae nuevas responsabilidades de obligado cumplimiento para las empresas, incluidas las del sector de la automatización industrial. En concreto, responsabilidades individuales como la inscripción en el Registro de Productores de Producto habilitado por el Ministerio de Transición Ecológica (Miteco) o las declaraciones anuales de los envases puestos en el mercado cuyo plazo para los datos del año 2022 finaliza este 31 de octubre. Así como también la llamada Responsabilidad Ampliada del Productor (RAP), que puede cumplirse de manera colectiva mediante la adhesión a un Scrap como Envalora.

En la práctica, la RAP traslada la responsabilidad de la financiación y la gestión de los residuos generados de los envases industriales y comerciales que se ponen en el mercado español a las empresas envasadoras, importadoras, adquirientes intracomunitarias y extranjeras de productos envasados. "Envalora es un sistema colectivo para envases industriales y comerciales, reutilizables o de un solo uso, y de cualquier tipo de material (papel, cartón, plásticos, metales, madera, etc.) que garantiza a todas sus empresas adheridas el cumplimiento de la nueva normativa, ahorrando en costes y ganando en eficiencia".

En caso de querer dar respuesta de manera individual a todos los requisitos que se derivan del Real Decreto, incluida la RAP, las empresas envasadoras tendrán que realizar grandes inversiones de recursos y tiempo. Por esta razón, más de 690 empresas de diferentes sectores y tamaños ya se han adherido a Envalora, delegando en el mismo su obligación RAP y beneficiándose del asesoramiento técnico y legal que el Scrap les proporciona de cara a sus obligaciones individuales.