Cloro para fabricar aviones
Gracias a la utilización de materiales obtenidos a partir de cloro se reduce el peso de los aviones, hecho que conlleva un notable ahorro de combustible. La empresa aeronáutica Boeing ha anunciado que su último avión de pasajeros, el Dreamliner 787, será construido, en gran parte, con plásticos de polímero avanzado. El fuselaje de resinas epoxi, obtenidas a partir del cloro, simplificará su montaje de forma considerable. La familia de los 787 se compone de tres aviones de última generación, el 787-8, con capacidad para 223 pasajeros y un recorrido de 15.700 kilómetros., el 787-3, una versión más pequeña del anterior con capacidad para 296 pasajeros, ideado especialmente para trayectos más cortos, aproximadamente 6.500 km. y finalmente el 789-9, una versión más grande del primero con capacidad para 259 pasajeros y un recorrido de 15.400 kilómetros.