La química ayuda a almacenar y transportar la energía solar
Solzinc es un proyecto de investigación financiado con fondos europeos parcialmente, dentro de la acción clave de “Energía de bajo coste y eficaz para una Europa competitiva” del V Programa Marco. Su objetivo principal es desarrollar un reactor químico de tecnología solar para la producción de zinc. Entre los socios del proyecto figuran Promes-CNRS (Francia), ScanArc Plasma Systems AB (Suecia), ZOXY Energy Systems AG (Alemania), el Paul Scherrer Institute y el Institute of Energy Technology-ETH (Suiza), y el Weizmann Institute of Science (Israel).
El zinc producido con energía solar ofrece la posibilidad de almacenar y transportar energía solar. Es un combustible sólido compacto que tiene aplicaciones para las pilas de combustible y las baterías de zinc-aire. El zinc puede también reaccionar con el agua y formar hidrógeno de alta pureza. En cualquier caso, el producto químico de estos procesos de generación energética es el óxido de zinc que, a su vez, se reduce por la energía solar a zinc.
El éxito de este proyecto piloto de química solar abre el camino hacia un proceso termoquímico eficiente que permita el almacenamiento de la energía solar, su transporte en forma de combustible químico y su comercialización. Los beneficios esperados a largo plazo de esta tecnología incluyen una reducción de las emisiones de dióxido de carbono (CO2), la conservación de los recursos combustibles fósiles y un aumento de las oportunidades de empleo en el campo de la energía renovable.