Entrevista a Paco Lorente y Francisco Torreblanca, autores del libro ‘Egology’ (ESIC Editorial)
¿Cómo consideran que una marca puede conectar y ofrecer al consumidor una experiencia única y personalizada, haciéndolo protagonista de su estrategia?
Estar siempre en una permanente revisión de aquello que eres, ofreces, transmites. El consumidor es cambiante como lo es el entorno que nos rodea y por eso las marcas deben tener una actitud activa que les permita estar actualizadas y en contacto con la realidad. Esto no quiere decir que se tenga que cambiar o sumar ante cualquier tendencia o dinámica que pueda surgir, sino que hay que tener una mentalidad estratégica sólida para saber cuándo es positivo actuar y cuando no, según las demandas del público al que se dirige.
Si la marca es capaz de alinearse con aquello que el consumidor siente, éste será el protagonista.
¿Cuál creen que es la clave para establecer una conexión auténtica entre una marca y su audiencia?
La conexión más fuerte que puede surgir es aquella que vincula conductas. Se pueden dar dos tipos de conexiones: funcional o emocional. La primera atiende a la necesidad de cubrir una demanda racional que valora los pros y contras de la decisión, pero, por otro, la segunda apunta directamente a la conducta emocional y al vínculo que provoca. Una clave es ser consciente que la marca debe ser una fuente de estímulos que sean capaces de activar la reacción del consumidor.
En un mercado saturado de opciones, ¿cómo puede una marca diferenciarse y crear una conexión emocional con los consumidores?
Conocer muy bien al público y estar en contacto con el entorno es vital. Ahí es donde habitan los puntos clave que pueden detonar de una conexión exitosa y auténtica. Las conexiones emocionales no son estables, varían en el tiempo y por causas ajenas a las marcas, por eso es importante estar muy aferrado a la actualidad para reaccionar el primero ante sucesos cambiantes.
¿Qué indicadores consideran más importantes para medir el nivel de conexión entre una marca y su audiencia?
La conexión emocional es muy importante en la actualidad. El componente funcional de un producto o servicio es necesario, pero es muy probable que el componente emocional sea determinante para que el consumidor tome una decisión.
Por otro lado, la propuesta de valor de una marca, bien sea funcional o emocional, hace que brille por encima del resto y se presente como la mejor opción disponible en un ámbito específico.
Adaptarse a las cambiantes expectativas y valores de los consumidores
Al preguntar a los autores de libro ‘Egology’ (ESIC Editorial), Paco Lorente y Francisco Torreblanca, sobre cómo pueden las marcas adaptarse a las cambiantes expectativas y valores de los consumidores para mantener una conexión relevante y significativa, comentan que “es necesario entender los hábitos, preferencias, gustos y motivaciones del consumidor en cada momento. Para ello, es imprescindible analizar segmentos de mercado específicos, ya que de este modo una marca puede obtener un mejor data y proceder a un análisis exhaustivo acerca de la conducta”. Y añaden: “Además, dominar uno o varios nichos de mercado supone para una marca ser relevante y entender qué insights son los que van a marcar la pauta a futuro a nivel de comportamiento, lo que permitirá anticipar soluciones prácticas y reales adaptadas a las necesidades o deseos del consumidor”.
¿Cuál consideran que debe ser el enfoque de una empresa para abordar la fidelización del cliente y mantener una conexión a largo plazo con la marca?
Es necesario entender los hábitos, preferencias, gustos y motivaciones del consumidor en cada momento. En definitiva, conocer el por qué el consumidor elige a la marca y no a otras marcas sustitutivas en el mercado.
De este modo, se podrán potenciar las fortalezas estratégicas de la marca y corregir las posibles debilidades que puedan presentarse. A la vez, esto servirá para aprovechar posibles oportunidades que surjan en el mercado y minimizar potenciales amenazas del entorno.