El 2023 llega con energías renovadas para el retail de puericultura

Recién estrenado el nuevo año, el retail de puericultura debe poner la vista al frente y pensar en todo lo que se puede mejorar de cara al 2023. En su nuevo artículo de colaboración, Beatriz Colina, gerente de Amatxu Denda (Bermeo, Vizcaya), celebra que los comerciales estén de vuelta a las tiendas, destaca la importancia de que vayan llegando novedades de producto y se marca el objetivo de llegar al consumidor actual, más conectado y enganchado a las pantallas.

Resulta grato volver a ver que las rutas comerciales regresan a las calles, y la verdad es que es de agradecer que te vengan a visitar a la tienda después de tanto tiempo en el que apenas venía nadie. En este sentido, antes de acabar el año tuve una gran sorpresa, en forma de visita doble. La cuestión es que había un comercial con el que tenía una visita pendiente desde hacía casi un año, y casualmente se presentó una mañana a la tienda para verme, pero justo ese día yo tenía un compromiso fuera del comercio y no lo pude atender. La verdad es que habría sido una lástima perder la visita del comercial, así que estuvo la mañana explicando las novedades de su marca a mi compañera y me dejó su catálogo. La segunda sorpresa llegó cuando, al decirle que no podía llegar a su visita, se ofreció a volver por la tarde, para hablar conmigo y explicarme de nuevo sus productos y novedades. Y así lo hicimos, y pudimos comentar las novedades, ojear los productos y hablar sobre los próximos lanzamientos. La verdad es que esa visita fue un soplo de aire fresco, después del mes tranquilo en ventas que tuvimos en noviembre, que junto a febrero suelen ser meses de poca venta (y este último año no fue diferente).

Tras la visita del comercial con el que hacía un año que nos teníamos que ver y que finalmente vino dos veces el mismo día para poder coincidir conmigo, vinieron también a verme a la tienda otros dos compañeros para enseñarme unas sillas nuevas, de las que solo habíamos podido ver los prototipos, y que parece que por fin podrán llegar después de los retrasos en la producción que sufrieron durante el año pasado. Y es que eso es lo que necesitamos, novedades. Y es que parecía que estábamos adormilados, pero ahora nos vamos reactivando y llegan nuevos comienzos. Tengo muy buenas sensaciones con el nuevo año que justo ahora estamos estrenando.

Para esta primavera tendremos una buena oferta en puericultura, con varios modelos nuevos y opciones de mercados que nuestros clientes ya nos venían pidiendo, así que ya no tendremos excusa para no renovarnos y darle la vuelta a nuestros comercios. Hay que aprovechar entre todos este próximo periodo de rebajas para liquidar los productos que no tengan rotación, y poder hacer espacio así a todas las novedades que vienen. Necesitamos renovarnos más que nunca.

Para estos próximos meses que vienen, tenemos una tarea, o al menos es lo que yo me he propuesto para este 2023: llegar al público menor de 40 años. Digo esta cifra por poner una, pero creo que ya me entendéis. Me refiero a aquellos consumidores que no tienen la experiencia de comprar en el comercio local, que tienen más aplicaciones instaladas en su móvil que fotos, y que van mirando la pantalla mientras van paseando a sus hijos. Se trata de la nueva generación de la inmediatez y de las opciones múltiples, padres que compran productos de alimentación y farmacia de manera online porque les parece más cómodo. Esto está destruyendo nuestras ciudades, y solo hay que fijarse en los datos, que apuntan que en los dos últimos años una de cada cuatro tiendas ha cerrado. ¿Y se preguntan por qué? Yo no quiero vivir en un lugar sin comercio, sin panadería, sin frutería, sin zapatería…porque todos esos pequeños lugares dan vida y trabajo a una ciudad. Espero que no se olvide.

Nuestra tarea es aprender de los nuevos hábitos y dar la oportunidad a estos nuevos padres a que nos conozcan y que sepan que estamos aquí para ayudarles y aconsejarlos para que tengan lo mejor para sus hijos. Al consejo de un profesional también hay que darle valor, ya que no solo somos comerciantes, somos vuestros vecinos, somos, en cierto modo, parte de ti, aunque aún no lo sepas. En este sentido, vino a la tienda una madre porteando a su bebé buscando calcetines porque el niño pasaba frío. Estuvimos un rato hablando y al final le expliqué que la mejor solución, teniendo en cuenta que ella utilizaba frecuentemente la mochila de porteo, era que comprase un cobertor, y le estuve explicando cómo funcionaba y lo que le podía ofrecer. Al final se lo llevó, y cuando ya estaba pagando me confesó que llevaba tiempo mirándolos en internet, pero como no podía ver ni tocar los tejidos, no se había atrevido a comprarlo. Yo al principio me quedé callada ante su sinceridad, pero le acabé comentando que esa era una de las muchas ventajas que tiene comprar en un comercio, no solo se trata del precio, sino también de la atención, el asesoramiento y las recomendaciones, fruto de una experiencia que jamás podrá ser sustituida por ninguna oferta digital.

Quizá deberíamos transmitir más nuestros puntos fuertes y dar a conocer las ventajas que ofrecemos, ya que en el tema de los precios no podemos competir (las tarifas son muy ajustadas y con los incrementos poco podemos hacer), por eso deberíamos dar más valor a lo que lo tiene. La tención y la experiencia personal nunca van a ser sustituidas, así que hagámonos nuestra lista de buenos propósitos para el 2023, y que cada uno valore lo que debe hacer. Lo que está claro es que, si nada haces, nada cambia. Así que manos a la obra y a por esta nueva oportunidad que nos viene con el nuevo año.