“El juguete siempre ha sido y será una pieza fundamental del desarrollo psicomotriz del niño”

Los Juguetes de Primera infancia son productos que los padres y madres valoran por su papel en el desarrollo de los más pequeños, estimulándolos en las diferentes etapas de su crecimiento. En este artículo, Arnaud Sattonnay, CEO de BB Grenadine, nos presenta un análisis en el que trata diferentes aspectos como la evolución de las ventas, las tendencias de mercado y los factores clave de esta categoría.

El juguete siempre ha sido y será una pieza fundamental o un facilitador del desarrollo psicomotriz del niño, permitiéndole poder investigar, imaginar y expresarse. Sin embargo, durante mucho tiempo cobraba importancia la idea del juego individual y, gracias a situaciones como las vividas (confinamientos, crisis sanitaria), hemos visto que no hay nada como jugar en familia o con otros niños.

Por ello, se debe potenciar que el juguete de primera infancia sea un elemento unificador e integrador del niño con la sociedad y potenciar estos vínculos afectivos que se crean al pasar tiempo en familia y le ayudará a adquirir valores como la paciencia, la concentración, el compromiso, la tolerancia o el compartir, que son claves para la vida adulta.

Es muy importante tener en cuenta que en cada etapa del niño el juego cobra un protagonismo diferente y la forma de interactuar es distinta. Por ello, siempre se aconseja que se empleen juguetes aptos para su edad o etapa evolutiva para que sea lo más eficiente posible, así como apostar por juguetes en los que el grado de interés del niño sea estable y perdure, evitando la compra de productos que puedan conllevar una sobreestimulación del niño en la etapa en la que se encuentre, ya que esto no es recomendable.

Los hábitos de compra en juguetes no suelen variar de un año a otro, deben pasar tiempos prolongados, más de una década o un cambio generacional para notar estos cambios. Sin embargo, la conciencia medioambiental está cobrando un gran protagonismo que obliga a los fabricantes a buscar vías alternativas más sostenibles, tanto en la fabricación como en el tipo de packaging en que viene el producto, siendo este el elemento más diferenciador en el que el mundo juguetero está fijando sus ojos, y siendo la primera infancia uno de los primeros rangos de edad en los que se experimentarán cambios en los materiales al necesitar el bebé productos no solo que cumplan con las normativas vigentes, sino que sean lo más saludables posibles para su desarrollo.

Tenemos unas expectativas positivas en esta categoría ya que apostamos por una ampliación de línea más juguetera de artículos de primera infancia de Sophie la girafe, la cual está teniendo una muy buena aceptación.

Sin embargo, no sirve solo con tener un surtido amplio, sino que se requiere de una selección precisa que te permita exponer y explotar sus puntos fuertes como elementos diferenciadores.