El sector de la puericultura a la espera…
El año ha arrancado tímido, sobre todo en las localidades que hemos estado en rojo bastante tiempo. Han sido meses duros ya que hasta finales de febrero no conseguimos bajar la incidencia y con la hostelería cerrada la gente a penas salía a la calle. Y la verdad he de decir que se volvió a tener respeto y cierto miedo como al inicio de la pandemia… y claro como no se salía apenas, tampoco fueron meses de mucha venta, aunque a pesar de las circunstancias hemos salido al paso. No podemos decir que haya sido un buen trimestre y como es obvio nuevamente la facturación pues tampoco mejoró. Pero con el fin de las rebajas y la llegada de la nueva campaña de primavera parece que poco a poco ha vuelto la luz y el color, bajamos a parámetros normales y se reabrió la hostelería y parece que la vida de nuevo. Y es que por aquí en el norte lo de salir a dar una vuelta y tomarse algo es una actividad que podría decirse sagrada y está demasiada arraigada en nuestra cultura. Así que la gente dejó de momento los paseos y las salidas al monte para poder respirar, para retomar poco a poco la cotidianidad y volver a visitar las tiendas y a alegrar las calles. Se guardaron los abrigos y las lanas, sustituyéndolos por nuevos colores y cálidos algodones, llegaron los perlés y los conjuntos cortos y queríamos imaginar que ya estábamos en verano. Con nuevos colores y surtidos, al fin llegaron las novedades tan esperadas y la nueva colección, dando así un cambio a la tienda y llenándonos de color.
Incertidumbre y retrasos en el sector de la puericultura
No podemos decir lo mismo de la puericultura, ya que de nuevo se retrasaron lanzamientos debido a los retrasos ocasionados por la pandemia y nos dejaron con los stocks bastante justos y haciendo encaje de bolillos en cada venta. Hay varias cosas que esperábamos poder tener en tienda y no acaban de llegar y nos retrasan entregas que deberían haber estado en enero para mediados de mayo, algunos queriendo hacer la presentación en la feria de Harrogate que finalmente ha sido aplazada a octubre. Así que vivimos estos tiempos con incertidumbre ya que parece que al final la norma es que todo se aplace o retrase y la única feria que parece por el momento inamovible es la de Colonia, aquella a la que deseamos poder ir, pero dudo mucho que podamos dado como está el asunto. Parece que la Pitti Bimbo en Italia y la feria CBM Shanghai siguen adelante con estrictos protocolos, pero dudo mucho que se celebren. Desde el mercado nacional tampoco podemos contar mucho, ya que los únicos showrooms que estamos teniendo son los virtuales y algún muestrario de textil. Parece que al menos por aquí tenemos un poco más de sentido común y nuestra feria ya se ha trasladado de fecha nuevamente y esperamos poder ir a Valencia en febrero del 2022 para cuando seguramente estará la cosa mejor y podamos al fin disfrutar de una feria, que la verdad se echa de menos.
¿Y qué esperamos del próximo verano?
¿Tendremos verano? Tener lo tendremos, seguro, y espero que haga tan buen tiempo como el pasado y lo poco que podamos salir la gente se anime, pero con cabeza. Seamos relistas que para entonces no habrá cambiado mucho la cosa y seguramente ya habremos pasado esta 4ª ola que está comenzando y seguro que, como ya sabemos de qué va el asunto, podremos contralarlo. La vida sigue y los niños siguen naciendo y siguen necesitando cuidados y accesorios que nosotros les proporcionamos. Así que adelante, llenemos las tiendas de novedades y de color porque lo necesitamos, porque hemos de dar esa alegría que las calles están perdiendo y la primavera y el verano son épocas de disfrutar y haremos lo que podamos.
Una vez llegue septiembre con los datos que tenemos dicen que estaremos casi todos vacunados así que pienso que serán tiempos mejores y que estaremos todos algo más tranquilos, aunque en el sector financiero avisan que vienen curvas así que tendremos que estar de nuevo preparados. Vamos que esto es un poco como el día de la marmota, sabemos lo que va a pasar así que adelante.
Las nuevas generaciones
No sé qué va a pasar con las nuevas generaciones, ya que la maternidad estaba estancada y ahora con toda esta situación y la precariedad laboral que ha traído consigo, las parejas jóvenes se encuentran en una situación difícil para traer familia a este mundo que está un poco revuelto, y esto a la larga traerá consecuencias que quizá ahora no podemos ver, ya que estamos demasiado centrados en el aquí y el ahora y debemos mirar de vez en cuando al futuro. Necesitamos nuevas políticas que fomenten la natalidad y que ayuden a las familias porque si seguimos así no vamos bien… Deberíamos mirar más a otros países con medidas conciliadoras o con bonos económicos como ha hecho Italia. Necesitamos más niños y no solo porque son nuestros principales clientes, sino porque la población necesita regenerarse y hace falta nuevas energías para el futuro.
Si que he de decir que con el confinamiento hemos notado un pequeño repunte, ya que parece que el parar, tampoco ha traído solo cosas negativas, ha hecho también meditar y darse cuenta a aquellas parejas que se lo estaban pensando, a dar el paso. Así que, aunque las estadísticas marcan una tendencia negativa, por aquí parece que la gente a pesar de todo se ha animado. También hemos visto pasar a familias numerosas a varios de nuestros clientes, el ahora o nunca parece que ha sido una máxima, de lo cual me alegro, así que a seguir pensando en positivo y sigamos haciéndolo así de bien y podamos hablar de cambios dentro de no demasiado.