UPA advierte de las consecuencias de regalar el aceite de oliva
El responsable de la Sectorial de Olivar y Aceite de UPA y secretario general de UPA Andalucía, Cristóbal Cano, afirmó que las 95.000 toneladas vendidas en el mes de noviembre consolidan la fidelidad de los consumidores y lanzan un mensaje claro al sector olivarero: la situación del mercado es absolutamente incomprensible y no se puede seguir regalando el aceite de oliva.
Menos aceite de oliva que el año pasado. El mes de noviembre cerró con un 15% menos de stock con respecto a 2023. Si entonces había 378.900 toneladas, noviembre del 2024 se encuentra con 321.147; es decir, 57.753 toneladas menos, gracias a los magníficos datos de comercialización. Y es que las 95.000 toneladas vendidas en noviembre lanzan dos claros mensajes al sector olivarero, según confirma el responsable de la sectorial de Olivar y Aceite de UPA y secretario general de UPA Andalucía, Cristóbal Cano: la fidelización de los consumidores a la grasa vegetal más sana y saludable del mundo y, el más importante, que no se dan las condiciones para que el precio en origen siga bajando.
Para UPA Andalucía, la situación del mercado es absolutamente incomprensible. “La situación actual demuestra que el sector no ha aprendido nada de lo que los mercados nos han demostrado en estos dos últimos años, en el que se ha comercializado con valor, a precios a los que la demanda mundial del consumo no se ha visto resentida. Y el problema de todo esto es que no sabemos cuál será el suelo, no podemos prever hasta dónde vamos a llegar con esta tendencia bajista. El sector cooperativo está contribuyendo decididamente a esta espiral suicida regalando el aceite, porque ya nos constan operaciones por debajo de los costes de producción”.
Ante esta situación, Cristóbal Cano se cuestionó el futuro: “Probablemente habrá que pensar si las próximas movilizaciones, en lugar de cortar carreteras, tendremos que hacerlas a las puertas de las cooperativas. Ya está bien de buscar culpables fuera. La situación del precio se debe única y exclusivamente a las operaciones que se marcan en España, que somos el primer país productor a enorme distancia del resto de países. Ya está bien de echar las culpas al superintensivo de Portugal, al aceite de Túnez o a las supuestas mezclas en vez de preocuparse de una comercialización con valor y no de regalar el aceite cuanto más barato mejor para algunos”, afirma Cristóbal Cano.
El secretario general de UPA Andalucía explicó: “En noviembre se han producido 255.742 toneladas de aceite de oliva, por lo que la producción acumulada se sitúa en 292.019 toneladas. En estos momentos, la cosecha es un 9,7% superior a la campaña pasada. Sin embargo, las mejores cifras las encontramos en la comercialización, con otras 95.000 toneladas vendidas y un stock actual de 321.147 toneladas, un 15% menos que en noviembre de 2023. Estos datos consolidan la fortaleza del aceite de oliva en los mercados, pero no hemos aprendido nada y las cooperativas siguen promoviendo una tendencia suicida, vendiendo rápido cuanto más aceite posible a cualquier precio, por bajo que sea, en lugar de defender un precio en origen razonable por encima de los costes de producción en el olivar tradicional”.
El mes de noviembre cerró con 277.749,98 toneladas en manos de las cooperativas y almazaras; 92.550 en poder de envasadores, operadores y refinerías; y sólo 874 toneladas en los almacenes del Patrimonio Comunal Olivarero. Además, en noviembre se produjo 255.742 para un total acumulado de 292.019.