UPA lamenta que los altos precios del aceite de oliva no repercutan en el agricultor
El precio del aceite de oliva a 9 euros no beneficia a consumidores ni a agricultores. Así lo considera la Unión de Pequeños Agricultores (UPA), cuyo responsable de la Sectorial de Olivar y Aceite, Cristobal Cano, afirma que el sector olivarero continúa en crisis pues el actual precio del aceite no repercute directamente en los olivareros debido a la drástica disminución de sus cosechas a la vez que continúan los elevados costes de producción.
Según UPA, a los olivareros les perjudica un precio anecdótico, ficticio, porque no repercute directamente en su cuenta de resultados al no tener una cosecha significativa que poder vender. El sector permanece en crisis debido a que los olivareros ven cómo siguen aumentando sus pérdidas con los elevados costes de producción y, sobre todo, con esa drástica disminución de cosecha al encaminarnos a una segunda campaña muy mala, además de forma consecutiva tras el desastre de la pasada campaña 2022/23. Algo que es la primera vez en la historia de este sector que ocurre, lo que agrava su situación crítica con la pérdida de rentabilidad de las explotaciones, especialmente de olivar tradicional.
“Hay que ser conscientes de que los olivareros vamos a vivir dos campañas seguidas muy malas, con una drástica reducción productiva, lo que influye negativamente en nuestra rentabilidad. Da igual que el precio esté alto, a nosotros no nos sirve, porque nuestro problema es que no tenemos ingresos al no tener cosecha”, explica el responsable de la Sectorial de Olivar y Aceite de UPA y secretario general de UPA Andalucía, Cristóbal Cano.
“Estos precios en origen lamentablemente son una realidad intangible para los olivareros”, afirma Cristóbal Cano. “A los olivareros no nos salen las cuentas. Este precio no nos beneficia, ya que no hay cosecha que vender. En realidad, estos precios no benefician a nadie, pero al final, como siempre ocurre, son los eslabones más débiles de la cadena los que salimos peor parados. Nosotros necesitamos estabilidad para ser rentables”.
A juicio del secretario general de UPA Andalucía, lo que realmente necesitamos son “mecanismos de regulación de los mercados”. “El sector olivarero funciona bien siempre que hay una estabilidad en los precios. A los agricultores nos iba muy mal cuando el aceite de oliva estaba por debajo de los 2 euros, porque teníamos pérdidas. Pero ahora tampoco nos va bien, porque el precio a 9 euros no repercute en nuestra cuenta de resultados”.
Desde UPA Andalucía se insiste en que se necesita estabilidad en los precios a lo largo de toda la cadena alimentaria. “Desde nuestra Organización siempre hemos pedido la regulación de los mercados. Lo hacíamos cuando hace no tantos años el aceite de oliva estaba a 2 euros en origen y lo hacemos ahora que está a 9. Resulta imprescindible que las administraciones pongan en marcha esos mecanismos de regulación de los precios de una forma valiente.
La actual Ley de la Cadena Alimentaria es una herramienta clave en este sentido, porque está diseñada para que todos los eslabones tengamos rentabilidad. Junto a ella deben incorporarse nuevas herramientas como, por ejemplo, unos observatorios oficiales de costes de producción ágiles, que marquen los costes en tiempo real, o un observatorio de márgenes comerciales que vele porque la gran distribución no caiga en la tentación de maximizar sus beneficios especialmente en momentos de gran dificultad como el actual”, reitera Cristóbal Cano.