Investigadores de la UJA desarrollan un dispositivo para evitar adulteraciones en el aceite de oliva
Los investigadores de la Universidad de Jaén Diego Martínez Gila y Javier Gámez García, del Departamento de Ingeniería Electrónica y Automática y miembros del grupo de investigación Grupo de Robótica, Automática y Visión por Computador pertenecientes a la spin-off ISR, han presentado en el stand de la UJA en Expoliva el desarrollo de un dispositivo portátil para la clasificación ‘in-situ’ de aceites de oliva y la detección de adulteraciones de aceites de oliva con otros aceites vegetales.
Actualmente, tanto las categorías de los aceites de oliva como las metodologías para llevarla a cabo están reguladas según normativa europea y se realizan en laboratorios acreditados para tal fin. Los procedimientos químicos para realizar las diferentes determinaciones conllevan tiempo, gasto de consumibles y la destrucción de la muestra. Por otro lado, los fraudes relacionados con las adulteraciones de aceites de oliva con aceites de menor calidad siguen siendo un problema y los actuales métodos que se emplean para detectar estas adulteraciones requieren pasos previos complicados, consumiendo una gran cantidad de tiempo y dinero. Las tecnologías analíticas no invasivas, convenientemente conectadas con los laboratorios acreditados, pueden ser una alternativa a los métodos de análisis tradicionales.
Teniendo en cuenta este contexto, Diego Martínez ha explicado que el objetivo principal del proyecto, denominado ‘Desarrollo de un dispositivo portátil para la Identificación de negativos in situ en el marco de la inspección agroalimentaria oficial: Caracterización del Aceite de Oliva’ es diseñar, desarrollar y validar un innovador dispositivo portátil que permita la clasificación ‘in-situ’ de aceites de oliva y la detección de adulteraciones de aceites de oliva con otros aceites vegetales. “El dispositivo integrará dos tecnologías no invasivas que, por separado y en base a estudios previos, ya se han considerado efectivas para la obtención de huellas digitales sobre aceites y su correlación con características químicas y organolépticas de los mismos. Estas son la espectroscopía del infrarrojo cercano (NIR) y la tecnología nariz electrónica (ENOSE)”, ha asegurado el investigador de la UJA.