Los primeros análisis de los lotes de aceite de oliva inmovilizados en Extremadura confirman la mezcla de lampante y refinados
La Dirección General de Salud Pública ha recibido los primeros resultados de los análisis de aceites en relación con la alerta alimentaria por posible fraude. La muestra analizada, según los parámetros estudiados, es mezcla de aceite lampante con aceites refinados. Las muestras las ha analizado el laboratorio Agroalimentario de Extremadura, en este caso de la marca “Cortijo del Oro”. Este resultado supone un delito contra la salud pública y se dará traslado a la justicia.
En relación con la alerta alimentaria por posible fraude al comercializarse aceite de oliva virgen extra, la Dirección General de Salud Pública se han inmovilizado ya unos 18.000 litros de diferentes marcas.
Según la Dirección General, hasta el día de la fecha no hay identificada la presencia de un riesgo para la salud derivado del consumo de aceites comercializados objeto de la alerta de la Agencia Española de Seguridad Alimentaria y Nutrición (AESAN), al tratarse de un fraude por una mezcla de aceites con calidades que no se corresponden con el tipo de aceite que aparece en la etiqueta de los envases, e incluso, en el caso del aceite analizado con un aceite no apto para consumo humano.