El AOVE mejora la salud cerebral de personas con deterioro cognitivo leve
El aceite de oliva virgen extra puede tener efectos positivos en personas con deterioro cognitivo leve, según un estudio reciente de Amal Kaddoumi, de la Facultad de Farmacia Harrison de la Universidad de Auburn, en Estados Unidos. Sus conclusiones, publicadas recientemente en la revista 'Nutrients', sugieren que los compuestos del aceite de oliva influyen en la salud cerebral y mejoran la barrera hematoencefálica.
Kaddoumi utilizó a 25 participantes con deterioro cognitivo leve en su estudio, que incluía el consumo de 30 mililitros, o unas tres cucharadas soperas, de aceite de oliva al día durante seis meses. Trece participantes consumieron aceite de oliva virgen extra (AOVE) y 12, aceite de oliva refinado (AOR). El AOVE es rico en fenoles, una clase de compuestos orgánicos que contienen un grupo hidroxilo y un anillo bencénico, mientras que el aceite refinado ha sido purificado de fenoles.
“Los participantes fueron sometidos a varias pruebas antes y después del consumo de aceite de oliva, entre ellas resonancias magnéticas, una batería de pruebas cognitivas y análisis de sangre para detectar biomarcadores relacionados con la enfermedad de Alzheimer”, explica Kaddoumi. “Nuestros resultados mostraron que el AOVE y el AOR mejoraban la función cognitiva, según determinaba la mejora de la calificación clínica de la demencia y otras puntuaciones conductuales. Curiosamente, los resultados de las resonancias magnéticas no fueron iguales entre el AOVE y el AOR. Mientras que el AOVE mejoró la función de la barrera hematoencefálica y la conectividad funcional entre distintas áreas cerebrales, el AOR aumentó la activación cerebral funcional ante una tarea de memoria en regiones cerebrales implicadas en la cognición.”
La barrera hematoencefálica y su permeabilidad son indicadores clave en su estudio. La barrera hematoencefálica, una red de vasos sanguíneos y tejido formado por células estrechamente espaciadas, desempeña un papel vital en el mantenimiento de un cerebro sano al protegerlo de la exposición a neurotoxinas relacionadas con la sangre y en la eliminación de productos de desecho cerebrales. Una barrera hematoencefálica funcional es vital para un cerebro sano.
“En cuanto a los biomarcadores sanguíneos, nuestros hallazgos mostraron que el AOVE y el AOR alteraban dos biomarcadores importantes relacionados con la enfermedad de Alzheimer, a saber, el beta-amiloide y la fosforilación de tau, lo que sugiere que el AOVE y el AOR modificaban el procesamiento y la eliminación del beta-amiloide”, dijo Kaddoumi. “Estas alteraciones colectivamente podrían haber desempeñado un papel en la mejora de la barrera hematoencefálica y la mejora de la función y la memoria”.
Los resultados concuerdan con los hallazgos preclínicos de Kaddoumi realizados en modelos de ratón de la enfermedad de Alzheimer. El estudio piloto sobre personas con deterioro cognitivo leve es el primero que analiza lo que ocurre directamente en el cerebro de los seres humanos cuando consumen aceite de oliva.