La inauguración del Jardín de la Paz en la sede del COI sirve para poner en valor la contribución del olivar
La ceremonia de izado de las banderas de Uzbekistán y de Arabia Saudí como nuevo miembros del Consejo Oleícola Internacional (COI), y la inauguración del Jardín de la Paz, situado junto a la sede del organismo, fue el último acto correspondiente a la semana de la 116 sesión plenaria del Consejo de Miembros del COI, desplazada este año a Jaén, y del Día Mundial del Olivo.
El ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación, Luis Planas, estuvo presente y subrayó que el aceite de oliva y las aceitunas de mesa son productos saludables, de gran calidad y que tienen un alto valor medioambiental, paisajístico y cultural, fundamentales para la dinamización económica y vertebración social de los territorios rurales.
Asimismo, animó a aprovechar las oportunidades que ofrecen los nuevos mercados, que muestran una tendencia creciente a la producción y el consumo de aceite de oliva, y ha recordado que éste representa apenas el 3 % de las grasas vegetales que se consumen en el mundo, una cifra pequeña pero “muy esperanzadora y muy positiva” porque indica que hay muchas posibilidades de desarrollo.
“Las grandes potencialidades del aceite de oliva son grandes oportunidades de mercado en calidad, en salud, en valor ambiental, paisajístico, cultural y por su capacidad de dinamización y vertebración social”, señaló. En este sentido, indicó que España, como país de referencia internacional en la producción y exportación, tiene la gran responsabilidad de defender, cuidar y promover el aceite de oliva y la aceituna de mesa y la calidad máxima de estos productos.
El ministro se refirió a la importante bajada de producción del aceite de oliva en la campaña recién iniciada como consecuencia de la sequía y de las altas temperaturas, y en relación con el incremento de los precios producido en las últimas semanas, ha hecho un llamamiento a la responsabilidad dirigido a todos los eslabones de la cadena. “De igual modo que como ministro he reivindicado públicamente la necesidad de que nuestros agricultores tengan una retribución justa por su trabajo, y que nuestra industria consiga beneficios para desarrollar su actividad, llamo en este momento a un esfuerzo en la moderación de los precios y evitar situaciones especulativas para permitir que el nivel de consumo y las exportaciones que tanto ha costado conseguir se puedan mantener”, afirmó.
El ministro reseñó la importancia de las políticas europeas en materia de preservación del medio ambiente y lucha contra el cambio climático y ha destacado la importancia del olivar para frenar la erosión del suelo y reducir las emisiones de efecto invernadero. En esta defensa de los valores del olivar, el ministro ha subrayado la importancia de mantener el apoyo al olivar de secano, que aporta menos en términos de productividad, pero mucho en términos sociales, territoriales y ambientales.