La adaptación al cambio climático y la transición a la almazara 4.0 marcan las VII Jornadas Nacionales de Olivicultura

La olivicultura aborda una transformación digital y un avance hacia modelos de cultivo más sostenibles para su adaptación al cambio climático. Esas fueron algunas de las conclusiones de las VII Jornadas Nacionales del Grupo de Olivicultura de la Sociedad Española de Ciencias Hortícolas (SECH), que se celebró en Riojaforum en Logroño los días 19 y 20 de octubre, con presencia de expertos nacionales e internacionales de institutos de investigación y universidades de referencia, y asistencia de investigadores, técnicos, agricultores, comercializadores y otros agentes del sector para un intercambio de experiencias que contribuya a aumentar la rentabilidad y sostenibilidad de este sector.

El Riojaforum de la capital riojana acogió durante dos días a más 100 profesionales relacionados con el sector oleícola. Los expertos concluyeron la importancia de estudiar sistemas de cultivos alternativos basados en la gestión de técnicas de cultivo como el riego, utilización de restos de poda y la aplicación de nutrientes, que permitan la sostenibilidad de explotaciones olivareras, desde el punto de vista ambiental y económico. Asimismo, han destacado la necesidad de incorporar en la gestión técnicas de agricultura digital, utilización de drones y procesado de datos masivos.

Las jornadas se estructuraron en sesiones científicas centradas en propuestas innovadoras del sector de la olivicultura en la producción, transformación, comercialización o mejora de la calidad. A las sesiones han precedido conferencias plenarias, impartidas por investigadores de prestigio, seguidas de sesiones de comunicaciones orales y otras en forma de pósteres, además de mesas redondas.

Durante las jornadas se ha evidenciado que la tecnología de producción de aceite está evolucionando hacia la denominada “almazara 4.0”, donde se monitoriza el proceso completo mediante sensores de todo tipo y se regula el sistema para producir un aceite lo más adaptado posible a los requisitos del consumidor. También se comentó, sin embargo, que esta digitalización y el manejo de datos en la nube puede suponer riesgos de seguridad propios de otros sectores, y hace necesario pensar en la ciberseguridad asociada a la gestión de las nuevas almazaras.

Además, se puso de relevancia que la industria de la aceituna de mesa está muy desarrollada y es capaz de aprovechar nuevas oportunidades de mercado mediante la innovación. Actualmente se dedican muchos esfuerzos de investigación en solucionar problemas concretos como evitar la formación de acrilamida o la mejora de las tecnologías aplicables a la elaboración de aceitunas negras.

Respecto de la industrialización de otros productos del olivar, como hojas y semillas del hueso, se está trabajando en conocer mejor estos productos con el fin de permitir una mejor transformación y valorización de estos recursos.

En referencia al análisis sensorial, los científicos participantes coincidieron en que el panel de catas no debe ser eliminado ni sustituido por nuevas tecnologías analíticas. Sin embargo, es evidente que dichos avances analíticos, tanto de la fracción volátil como no volátil, pueden y deben ayudar al panel de catas, tanto en la fase de entrenamiento de catadores, como de evolución comercial de muestras.

Por otra parte, se está avanzando en el estudio de las bases químicas de atributos positivos del aceite poco convencionales, pero que pueden ser útiles para la tipificación de variedades y zonas productoras. Estas estrategias se están estudiando desde el ámbito de la investigación pública y también desde el sector privado para su implementación final y el desarrollo de aplicaciones concretas.

En relación a la protección de los cultivos, las imágenes hiperespectrales y térmicas de alta resolución permiten ya la detección precoz de las infecciones y síntomas causados por enfermedades con un impacto muy negativo sobre los olivares, como son Xylella fastidiosa y Verticilosis, con una precisión muy elevada.

Además, el estudio de comparación entre las cubiertas vegetales y el uso de herbicidas en las plantaciones de olivo, presentado durante las Jornadas, confirma el interés de las cubiertas vegetales para aumentar la diversidad del suelo, la generación de biomasa y la reducción de huella de carbono.

Mejor comunicación oral

'Variabilidad en la producción de polen en el olivo cultivado', de Mercedes Rojas Gómez (Universidad de Córdoba)

Mejor Póster

'Genes clave en el metabolismo de compuestos secoiridoideos en olivo' de Rosario Sánchez, Pilar Luaces, Carlos Sanz y Ana G. Pérez.