Italia actualiza al alza sus predicciones de producción de aceite de oliva
Con la campaña ya terminada, el Instituto Italiano de Servicio para el Mercado Agrícola (ISMEA) ha actualizado sus estimaciones de producción de aceite de oliva. Según las declaraciones de las almazaras, actualizadas a mediados de marzo, se producirían 365 mil toneladas de aceite de oliva en la campaña comercial 2019-2020. Una cantidad que equivale a más del doble de la cosecha de 2018, una de las más bajas de la historia. Los resultados de la producción, subraya el ISMEA, dividen perfectamente la península en dos: en el norte ha habido reducciones particularmente importantes que en algunos casos han llevado a volúmenes casi nulos, como el caso de la Toscana o Umbría, mientras que los aumentos se concentran todos en las regiones meridionales, algunas de las cuales han duplicado o triplicado los bajos volúmenes del año pasado. Ha sido el caso de regiones como Puglia, afectada por las heladas en la campaña anterior, y que este año ha registrado una recuperación muy importante de la producción. El mismo comportamiento ha tenido la región de Calabria, que ha triplicado la producción, mientras otras, como Sicilia, Campania o Cerdeña, han mejorado los datos respecto a la campaña anterior, pero quedan lejos de los promedios de anteriores producciones.
Según ISMEA, la producción mundial, en cambio, parece ser un 5% inferior a la del año pasado, debido a la caída de la producción registrada en España, que caerá un 35%, situándose alrededor de un millón de toneladas.
Como reflejo de la situación mundial, los precios del aceite de oliva italiano también están pasando por una fase de notable recesión, con reducciones para el aceite de oliva virgen extra de hasta el 44% en el primer trimestre de 2020. Traducido en valor absoluto, en los tres primeros meses de 2020 el precio medio del AOVE italiano fue de 3,1 euros por kilo, frente a los 5,61 euros del primer trimestre de 2019, el más bajo desde 2014 hasta la fecha. Esta reducción de los precios en Italia y en el extranjero ha permitido a las empresas embotelladoras comprar a precios asequible, tanto que, según ISMEA, con la crisis de Covid 19 en curso, no parece haber ningún problema de suministro por el momento.