Los productores catalanes de aceite de oliva continúan su lucha contra la mosca del olivo
El Grupo Operativo contra la Mosca del Olivo, creado el 2017 por cinco cooperativas, una de cada denominación de origen del aceite catalán, lleva dos años estrategias buscando estrategias de lucha alternativa contra la mosca del olivo (Bactrocera Oleae). Lo que impulsó todos estos ensayos fue, por un lado, disminuir el impacto ambiental de los tratamientos de los olivares, reduciendo los tratamientos de síntesis química, y, por otro, la inminente retirada de los principales productos de síntesis química contra esta plaga, dado que, a partir de 2020, estará prohibido utilizar el dimetoato (producto de síntesis químico más utilizado para el control de la mosca del olivo y de referencia para todos los agricultores).
En 2017, se creó el Grupo Operativo Contra La Mosca del Olivo, formado por 5 cooperativas catalanas: Empordàlia, SCCL (DOP Empordà), Agrícola del Campo y Sección de Crédito de Santa Bárbara, SCCL (DOP Baix Ebre-Montsià), Frutos secos de Les Garrigues, SCCL (DOP Les Garrigues), Unión Corporación Alimentaria, SCCL (DOP Siurana), Agrícola Sant Isidre de la Fatarella, SCCL (DOP Terra Alta), todos ellos coordinados por la Federación de Cooperativas Agrarias de Catalunya y con IRTA como Instituto de investigación.
El objetivo del proyecto es implementar estrategias de lucha contra la mosca del olivo (Bactrocera Oleae), la principal plaga clave de los olivos, combinando diferentes métodos de control alternativos a los tratamientos de síntesis química. Cada cooperativa hace los mismos ensayos con sistemas alternativos, cada una en su zona y teniendo en cuenta sus variedades autóctonas. Estas estrategias se basan en métodos respetuosos con el medio ambiente, principalmente en la captura masiva de adultos de la Mosca del olivo, combinada con la aplicación de otros sistemas alternativos ecológicos como el caolín, el beauveria bassiana y el spinosad.
Cada sistema alternativo ecológico tiene su peculiaridad. La captura masiva se hace mediante la utilización de trampas y de sistemas de atracción (alimentarios, sexuales, visuales...). Con ellos se pretende capturar el máximo de individuos, de forma que las poblaciones restantes no provoquen daños al cultivo. En cuanto al caolín, es una arcilla que se utiliza como barrera física para dificultar la puesta de la mosca del olivo. Es un método preventivo, ya que hay que aplicarlo antes de que la mosca ponga los huevos. La aplicación de este producto debe ser muy precisa para cubrir bien la aceituna, si la aplicación no es correcta la eficacia es muy baja. El beauveria bassiana es un hongo que genera la toxina beauvericina (BEA) y que forma parte del control biológico de muchos insectos plaga. Y, por último, el spinosad es un insecticida de origen natural que se obtiene de forma natural durante la fermentación realizada por el microorganismo del suelo, saccharopolyspora spinosa. Es un método adulticida y se ha de aplicar al inicio de la infestación. La aplicación de estos métodos de control alternativos en sustitución de los tratamientos de síntesis química permitirá obtener aceite de oliva de alta calidad, minimizar el impacto medioambiental e incrementar la competitividad del sector oleícola catalán.