Entrevista a Franscisco José Bejarano, gerente de Centrifugación Alemana
Sin Centrifugación Alemana no se podría entender el papel que ha tenido la maquinaria Hiller en el sector del aceite de oliva. Gracias al gran equipo, formado por 9 socios y liderado por Francisco José, se han realizado más de 1.000 instalaciones en las últimas dos décadas, a pesar de ser la última gran marca de centrifugación en llegar. Una maquinaria de gran calidad y la excelencia del servicio prestado han sido los pilares básicos para que la unión con Hiller, incluso en los momentos complicados, nunca se haya debilitado. Con un sector consolidado en España, ahora la mirada está puesta en los nuevos mercados para seguir creciendo.
Centrifugación Alemana cumplió 20 años y lo hace habiendo consolidado su unión con Hiller como marca de cabecera. ¿Cómo evaluarías esa colaboración que viene incluso de antes de que se constituyera Centrifugación Alemana como empresa?
Desde el primer día hemos trabajado con Hiller codo con codo. Con ellos hemos de coordinar la previsión de ventas de cara a un desarrollo óptimo de la campaña, y en materia de I+D+i sus equipos de ingenieros se desplazan continuamente a España para supervisar la maquinaria instalada en las almazaras. Esa colaboración tan estrecha, que se ha ido afianzando a lo largo de estos veinte años, hace que parezca que estamos trabajando desde una misma sede.
¿Cuáles son los argumentos que hacen a día de hoy que la maquinaria de Hiller se diferencie de sus competidores?
La principal diferencia es la robustez de la maquinaria que instalamos y la simpleza de su puesta en funcionamiento. A pesar de que siempre estamos al lado del maestro a la hora de poner en marcha la máquinas, la realidad es que solo con unas pocas instrucciones el operador de la almazara puede manejar centrífuga para que se adapte al producto en cada circunstancia. Nuestros clientes son los principales avaladores de la maquinaria Hiller. Ellos son los primeros que transmiten el mensaje de la fiabilidad y durabilidad de nuestras máquinas, y de certificar también sus grandes capacidades.
¿Qué papel juega Centrifugación Alemana a nivel de servicio?
La centrifuga es de Hiller, pero somos nosotros los que garantizamos que el cliente nunca esté desatendido. Para ello le ofrecemos un servicio 24 horas durante campaña, asesoramiento telefónico, y estamos a su lado ante cualquiera de las incidencias que puedan surgir. El centro de servicio en Montoro, un equipamiento sin igual en empresas de este sector, es nuestro gran baluarte en este campo.
¿Qué cuota de mercado tiene Hiller en los países en los que trabaja a través de Centrifugación Alemana? Empezando por España naturalmente…
Aunque fuésemos casi los últimos en llegar, hemos penetrado muchísimo hasta hacernos con un trozo importante del mercado en España. En los últimos años hemos entrado con fuerza en los países de la cuenca mediterránea, eso si solo en la medida en la que podemos seguir asegurando la excelencia de nuestro servicio.
¿Cree que puede haber cambios en ese mapa a lo largo de los próximos años?
Centrifugación Alemana siempre ha querido estar a la vanguardia, con maquinaria que aportase más valor añadido y mirando por aspectos fundamentales como la eficiencia energética. ¿Ha sido valorada esta apuesta por el sector?
Hasta ahora ha tenido poca incidencia, pero esto cambiará. Las certificaciones energéticas exigidas por algunas administraciones para alcanzar algunas subvenciones hacen que los consejos tengan muy en cuenta la eficiencia de sus instalaciones y de su maquinaria.
Lleváis más de 1.000 instalaciones y habéis consolidado vuestra posición junto a Hiller. ¿Podemos esperar novedades en el desarrollo de nueva maquinaria para los próximos años?
La atención está centrada principalmente en la calidad, sin perder de vista la rentabilidad. Hacia ahí es donde se dirigen todas las miradas, con equipos dotados de sistemas que impiden el contacto del aceite con la luz y el aire, evitando así posibles alteraciones.
¿Qué papel juega el maestro de almazara en esa relación que tenéis como fabricante de maquinaria con la cooperativa o la empresa oleícola?
Ellos son los que trabajan con las máquinas y las juntas rectoras han de dejarse asesorar por ellos. Desde hace años venimos formando a los maestros en nuestras instalaciones, intentando que amplíen sus conocimientos teórico-prácticos y que puedan aplicarlos en la elaboración de los mejores aceites, realizando así un uso correcto de la maquinaria. Ahora son ellos los que se han dado cuenta de que han de hacer valer su posición en la almazara, y por ello se están formando y compartiendo ese conocimiento.