¿Está preparado el sector del aceite de oliva para una criptomoneda?
Olivacoin tiene su origen en el Departamento de Economía Financiera y Dirección de Operaciones de la Universidad Sevilla y se desarrolla conjuntamente con miembros de la Escuela Técnica Superior de Ingeniería Escuela de esta misma Universidad.
Lo que impulsó el desarrollo de Olivacoin era encontrar una alternativa innovadora a la desaparición del Mercado de Futuros del Aceite de Oliva (MFAO), que se produjo principalmente por las estrictas exigencias de adaptación y requerimientos normativos y económicos demandados por la reglamentación comunitaria y por las cuantiosos desembolsos exigidos. La utilidad que ofrecía el MFAO al sector del aceite de oliva estaba en la aportación de transparencia al mercado y que cumplía con la función de observatorio de precios, dando cobertura y seguridad ante la volatilidad de los mismos. El MFAO, que comenzó a operar en el 2004, contaba con 250 clientes y tenía un promedio anual de más de cien mil contratos.
Olivacoin propone un nuevo modelo de negocio a los tradicionales mercados de futuros internacionales de commodities, articulándose éste sobre la tecnología Blockchain, que permite la trazabilidad total del aceite de oliva (aprovisionamiento-fabricación-distribución-consumo del cliente final), garantizando y certificando el origen del mismo, de forma fiable y segura, sin necesidad de intermediarios. El propósito planteado en esta criptomoneda es llevar la Industria 4.0 (o cuarta revolución industrial) al sector económico del Aceite de Oliva. La consecución de éste se conseguirá mediante el desarrollo e integración de las tres fases y funcionalidades principales, que ofrece la tecnología de Cadena de Bloques de Olivacoin: identificar, marcar y asegurar.
A partir del 1 de abril, fecha en la que se presenta la Pre-ICO, sólo se centra en la fase Identificar: la cadena de bloques de la criptomoneda 'Olivacoin' permitirá registrar e identificar la trazabilidad del aceite y dotarlo de identidad digital 'inteligente', mediante una tecnología propia de contabilidad distribuida: segura, veraz, incorruptible y descentralizada. Esto permitirá convertir un mero commodity como el aceite de oliva en un producto dotado de inteligencia ('aceite inteligente”), facultado, gracias a su 'iIdentidad digital', de interactuar con agentes, medios, información y otros elementos de la propia cadena de suministro global del Aceite de Oliva.
La segunda fase es la de Marcar: la Blockchain de la criptomoneda Olivacoin permitirá marcar digitalmente cada tarea y proceso de la cadena global de suministro del aceite de oliva en los mercados internacionales, generando nuevas ventajas competitivas como:
- El aumento de la velocidad del comercio internacional del aceite de oliva.
- La eliminación considerable de intermediarios y de los costes de intermediación.
- La reducción del riesgo cambiario al emplear el Olivacoin.
- La reducción drástica de trámites en los procesos de importación y exportación (créditos documentarios, etc.) gracias a los smart contracts de Olivacoin.
- La aceleración de los procesos de cobro y pago internacionales seguros en segundos, gracias a la tecnología criptográfica de Olivacoin.
Finalmente la tercera etapa es Asegurar: Olivacoin se convertiría en una criptomoneda con el propósito de ser el instrumento de mercado referente del precio actual y futuro del commodity 'Aceite de Oliva', viniendo a sustituir las funcionalidades del difunto Mercado de Futuros del Aceite de Oliva (MFAO), gracias a su tecnología de smart contracts.