Riesgos laborales en la almazara

Muchos han sido los cambios y modificaciones que se han ido sucediendo en los antiguos Molinos o Fábricas de aceite a las actuales almazaras, originados por la continua modernización e industrialización de este tipo de industria.

Las modificaciones han supuesto la adaptación y modificación de los métodos de trabajo, tanto de la propia industria como de la producción y entrega del producto por parte de los agricultores.

Derivado de estos cambios, así como la aparición de la Ley 31/95, Ley de Prevención de riesgos laborales, los riesgos laborales en el proceso de fabricación del aceite han variado.

El esquema reflejado en la imagen de la maqueta anterior diseñaba la recepción de la aceituna en fábrica, limpia, siendo este proceso de limpieza realizado por los agricultores durante la recolección de la aceituna y que posteriormente, era tratada la aceituna en el proceso de extracción de aceite mediante el empleo de la molturación con molinos de rulos o muelas.

Una vez obtenida la masa, a través del prensado de ésta en los capachos se obtenía el aceite que por decantación finalizaba el producto.

Poco o nada ha variado en síntesis el esquema de fabricación aunque si reseñar el modo y maquinaria empleada. Actualmente en una Almazara, podemos reconocer tres espacios diferentes de trabajo, el Patio, cuerpo de Fábrica y la Bodega, y cada una, ha sido modificada y adecuada a la innovación que la industria ha puesto al alcance para la obtención de un producto de mayor calidad y mejor proceso productivo, no sin reconocer que de este desarrollo se han incorporado una serie de riesgos para los trabajadores, que fruto de la investigación y del análisis de los procesos productivos se está en continua mejora para el cumplimiento de la normativa laboral respecto de los riesgos laborales para los trabajadores.

Todo ello, como no podía ser de otra manera, con la necesaria Formación e Información a los trabajadores para la consecución de la eliminación de estos riesgos o, en último caso, la disminución de los mismos hasta niveles tolerables, mediante la adopción de las distintas medidas preventivas y organizativas, tanto priorizando las de carácter colectivo como las individuales con la utilización de los Equipos de Protección Individuales (EPI's).

Pormenorizando, nos encontramos en primer lugar con la recepción del producto o materia prima, esto es, la aceituna, que se realiza en la primera zona denominada Patio de recepción y más concretamente en las Tolvas de recepción. Como se ha comentado, con anterioridad, la aceituna llegaba al Molino o Fábrica limpia desde la recolección, y generalmente en sacos que se producía el vaciado sobre las tolvas para alimentación a fábrica.

Hoy en día, tras la incorporación del Patio de limpieza, se ha descuidado en mayor medida y de una forma notoria esta limpieza que se realizaba durante la recolección, siendo habitual la recepción de la materia prima con diferentes materiales añadidos tales como hojas, ramas, y tierra o piedras.

La imagen contigua nos ilustra una tolva de recepción de aceituna totalmente protegida para los trabajadores, de acule, para vaciado de la materia prima desde el remolque o contenedor. Dicha tolva dispone de una serie de elementos que impiden la materialización de un accidente por riesgo de caída al interior del trabajador evitando el riesgo de golpe en tolva y/o asfixia por aplastamiento por la materia prima del trabajador.

La cada vez menor limpieza en el proceso de recolección del olivar, ha supuesto la necesidad de modificar las tolvas de recepción, procediéndose a la ampliación de las aberturas en dichas tolvas, para facilitar la entrada del material que acompaña a la aceituna, apareciendo los riesgos anteriormente citados que eran controlados.

Así como por la implantación del cierre y abertura de las tolvas, ha aparecido un riesgo de atrapamiento por elementos móviles que no existía con anterioridad y que podemos apreciar en las imágenes siguientes.

Tras el vertido de la aceituna en la tolva, se efectúa la limpieza de la misma a través de la zona de limpieza, por medio de cintas transportadoras, equipos de limpieza y lavado, pesadoras y cintas de remonte hasta su depósito en las Tolvas de aceituna limpia. Esta zona se ha implantado en las Almazaras como se ha expuesto anteriormente, que no existía en los molinos o fábricas de aceite.

Este patio de limpieza ha supuesto la aparición de otros riesgos laborales para los trabajadores, tales como atrapamientos, cortes, caídas desde equipos de trabajo y la aparición de residuos, tales como los materiales acompañantes a la aceituna reseñados, hojas, ramas, tierra, piedras…

La disposición del patio de limpieza se desarrolla en líneas independientes que transcurren desde la tolva de recepción a las de aceituna limpia con la disposición de los equipos antes descritos.

De su disposición y del espacio disponible, sobre todo en instalaciones antiguas, han obligado a la ubicación de la maquinaria de forma que dificulta el tránsito por esta zona, originando reducción de espacios, pasos de limitada altura y superposición de maquinaria lo que conlleva la consideración de los riesgos reseñados, sirva como ejemplo la imagen siguiente.

A continuación, determinado por equipos, se enumeran los siguientes riesgos:

• Cintas transportadoras: riesgo de atrapamiento por elementos móviles accesibles en bandas de rodadura, elementos de transmisión, correas y poleas descubiertas, golpes contra objetos por espacios reducidos, limitados y pasos de limitada altura, caídas de objetos y proyecciones de partículas por ausencia de protecciones.
• Limpiadoras, lavadoras: riesgos de caídas de personas a distinto nivel por ausencia de barandillas, atrapamientos por deficientes protecciones en elementos de transmisión, ventiladores, además de los riesgos derivados del mantenimiento y limpieza de los equipos de trabajo.
• Tolvas de aceituna limpia: riesgos de caídas de altura por el acceso a la parte superior de las tolvas dada la altura de la pasarela para supervisión de éstas así como el acceso a través de escalas, que generalmente están ubicadas a una altura superior a 4 m.

Se han de adoptar medidas preventivas como protecciones colectivas:

• Cintas transportadoras: protecciones en zona de transmisión de correas, poleas y tambores, protecciones laterales que impidan el acceso a la cinta de transporte, instalación de parada de emergencia tipo cordón para facilitar la parada de la cinta transportadora desde cualquier posición accesible del trabajador, señalización, limitación y protección contra golpes en zonas de limitado espacio y altura reducida, así como dotación de bandejas en zona inferior en evitación de caídas de objetos y proyección de partículas.

Cintas transportadoras.

• Respecto de las tolvas de aceituna limpia, se ha de adecuar las escalas de acceso a pasarelas superiores con protecciones circundantes a partir de 2,50 m de altura, con dotación de líneas de anclaje vertical o dispositivos retráctiles para anclaje de arnés de seguridad a utilizar por los trabajadores al acceder a la parte superior y pasarela dotada de barandilla perimetral en el transcurso de la misma.

Siguiendo con el recorrido que efectúa la materia prima, entramos en el cuerpo de Fábrica, desde las tolvas de aceituna limpia, a través de sinfines se efectúa el traslado de la aceituna a los molinos de martillos donde se efectuará la molienda de la aceituna transformándose en pasta que vertida en Termobatidora y posteriormente a través de las centrífugas horizontales o decanter y finalmente centrífuga vertical o decantadores se obtiene el producto final, el aceite.

Estos equipos de trabajo han determinado la aparición de riesgos de atrapamientos por partes móviles accesibles, tanto en los sinfines por el vertido desde las tolvas de aceituna a los mismos, vertidos de sinfines a tolvines de molinos de martillos, accesibilidad a molinos de martillos, transporte de masa mediante sinfines a termobatidoras, accesibilidad a partes móviles y caídas de altura en termobatidoras, que se puede apreciar en la secuencia fotográfica siguiente:

La aceituna a través de la abertura en la parte inferior de las tolvas, por su propio peso, vierte sobre los sinfines que discurren horizontalmente para distribuir la aceituna a los distintos molinos de martillos, pueden estar cerrados o parcialmente descubiertos en su recorrido y generalmente en la zona de vertido de las tolvas están descubiertos. Estos sinfines dependiendo de la instalación estarán ubicados en altura, pudiendo ser accesible desde el suelo o bien a través de escaleras metálicas que utilizan los trabajadores para acceder a la abertura de la tolva. Han de ser protegidos por ser partes móviles accesibles.

Desde los sinfines se efectúa el transporte de la aceituna hasta su vertido en unos embudos o tolvines dispuestos en los molinos de martillos para su molienda, quedando al descubierto las partes móviles superiores de éstos, por lo que se ha de colocar una protección en evitación de la accesibilidad al interior de los mismos, sin que se realice la parada del equipo de trabajo, causa por la que se ha de dotar asimismo de enclavamiento del molino de martillos.

Estas protecciones se diseñarán conforme a la distinta tipología de máquinas. En especial, también se ha de considerar por la industrialización y modernización de la industria los riesgos inherentes al mantenimiento y limpieza de los equipos de trabajo, finalizada la campaña, situación en la que se producen descuidos, eliminación de protecciones y bajada de la guardia en la consideración de todos los riesgos enumerados anteriormente.

Especial atención se ha de considerar a las recomendaciones de los fabricantes reflejadas en los manuales de instrucciones de uso y mantenimiento de los equipos de trabajo y la utilización de los medios auxiliares que se determinen necesarios para este tipo de trabajos.

Para finalizar, reseñar que la presente visualización se efectúa a titulo meramente informativo de una forma generalizada, por lo que se hace necesario una exhaustiva e individual evaluación para cada una de las Almazaras, en las que se deben analizar las particularidades propias de cada instalación, en la consideración tanto de la ubicación, lugar de trabajo, procedimientos de trabajo, así como las características de los trabajadores que intervienen en el proceso productivo.