Las cooperativas olivareras Las Virtudes y Mairena Agrícola sellan su proyecto de fusión
Con esta unión, Las Virtudes suma los 200 socios, dos millones de kilos de aceituna y 950.000 euros de facturación de Mairena Agrícola a sus 1.500 socios olivareros, 38 millones de kilos de aceituna y 28 millones de euros. Por tanto, fruto de esta fusión, la nueva sociedad queda compuesta por un total de 1.700 agricultores, los cuales, con 40 millones de kilos de aceituna producirán unas 4.000 toneladas de aceite de oliva y transformarán entre 15 y 20 millones de kilos de aceituna de mesa, según campañas, rondando los 30 millones de euros de facturación anuales. Además, gestionará unas 6.000 toneladas de cereal de sus agricultores.
Según informó en un comunicado la cooperativa de Las Virtudes, “el renovado proyecto cooperativo pretende continuar e intensificar la prestación de servicios a todos los socios, al tiempo que ganar dimensión y posicionamiento en la comarca de Los Alcores, debido al crecimiento potencial que el sector de la aceituna de mesa presenta en la zona”. Asimismo, ambas cooperativas continuarán integradas, a su vez, en la entidad de segundo grado Manzanilla Olive, la cual aglutina a otras siete cooperativas, 6.000 agricultores y 30.000 hectáreas de producción. “Se trata de la principal productora y comercializadora de aceituna de mesa de variedad Manzanilla a nivel mundial, así como una de las empresas más importantes del sector en España y el tercer grupo cooperativo en el ramo”.
Manzanilla Olive, con sede en Utrera (Sevilla), produce anualmente una media de 30 millones de kilos de aceituna de mesa, unas 6.000 toneladas de aceite de oliva y en torno a 50.000 toneladas de cereal. Su facturación ronda los 40 millones de euros. Según han subrayado los presidentes de la extinta Mairena Agrícola y Las Virtudes, Diego Romero y Juan Carlos Lara, respectivamente, “esta operación corporativa debe ser el germen para acometer un ambicioso proyecto de integraciones y fusiones dentro del grupo Manzanilla Olive, cuyo objetivo final es convertirse en una cooperativa de primer grado que aglutine a todas las estructuras productivas de base”.
Romero ha querido poner en valor la “valentía y visión de futuro“de los socios de su cooperativa al respaldar esta fusión promovida por el Consejo Rector. Los consejeros de Las Virtudes, por su parte, destacan la”visión y cultura empresarial“que ha imperado durante todo el proceso y la”generosidad“de ambas sociedades, la cual ha quedado reflejada en los términos del acuerdo de fusión. Finalmente, las dos sociedades quisieron hacer hincapié en la”adhesión y actitud proactiva“de ambas plantillas de trabajadores”la cual ha sido decisiva, con sus aportaciones y colaboración, para la culminación exitosa del proceso”.