Nuevo método para clasificar el aceite de oliva de las almazaras de manera automática y no invasiva
Ainia Centro Tecnológico ha desarrollado una nueva técnica para la clasificación del aceite en función de su calidad. Gracias a la aplicación de tecnologías de espectroscopía visible e infrarrojo cercano se puede diferenciar aceites de oliva virgen extra, virgen y lampante en los controles rutinarios y en los procesos de recepción y de clasificación de aceites dentro de la almazara.
Ainia Centro Tecnológico trabaja con un nuevo método que permite clasificar el aceite de oliva de manera rápida y precisa mediante la aplicación de tecnologías innovadoras de espectroscopía óptica (VIS/NIR).
Este método permite obtener una huella espectral completa, de manera instantánea, no invasiva y respetuosa con el medioambiente, de los principales atributos de calidad del aceite de oliva en el momento del proceso de clasificación en la almazara.
En concreto, se pueden conocer algunos de los indicadores de calidad generales como la acidez total o el índice de peróxidos y algunos minoritarios, todos ellos responsables de las características del aceite de oliva. Además, se ha desarrollado un sistema de medida propio y nuevos modelos de calibración para este tipo de aceite.
La aplicación de estas técnicas, que ha obtenido un alto nivel de precisión con muestras de aceite en almazara, también puede resultar de gran utilidad a los laboratorios de aceite de oliva que operan en las diferentes fases de la cadena de valor, desde la almazara hasta el control de calidad en la distribución final.
Esta innovadora tecnología se enmarca en el proyecto Recupera 2020, en el que Ainia colabora con cerca de 40 grupos de investigación pertenecientes a 9 centros del CSIC ubicados en Andalucía.
Investigaciones con espectroscopía óptica en las instalaciones de Ainia.
Una mejora para la competitividad del sector oleícola
La clasificación del aceite de oliva en función de sus características, requiere de una caracterización instantánea para poder almacenar por separado las distintas clases de aceite de oliva, manteniendo su calidad, identidad y trazabilidad. Un error de clasificación en el proceso de mezcla puede suponer importantes pérdidas económicas y dificultades de maximización del rendimiento de las almazaras.
Un control exhaustivo del aceite de oliva sólo es posible mediante sistemas analíticos que proporcionen información sobre el producto de manera inmediata y continua. Gracias a la aplicación de esta nueva tecnología, las almazaras podrían emplear esta técnica para dirigir el aceite que reciben o que generan al tipo más adecuado de producto, según su calidad, de manera automática y no invasiva.
Por este motivo, el uso de sistemas analíticos automatizados que sean capaces de clasificar los aceites en los depósitos en función de sus calidades de manera rápida y que permitan, paralelamente, un control de su trazabilidad, resulta un avance de gran interés para el sector.
Entrevista a Lorenzo Cervera, departamento de Instrumentación y Automática de Ainia
El nuevo desarrollo se enmarca dentro del proyecto Recupera 2020. ¿Qué objetivo persigue este proyecto?
Recupera 2020 es un proyecto de desarrollo e innovación, propuesto por el CSIC, que pretende transferir al sector agrícola andaluz, en forma de nuevos productos y servicios, los resultados de las actividades de investigación llevadas a cabo durante los últimos años por los institutos y centros participantes, y que se ejecutará por los centros del CSIC en Andalucía, en cooperación con otros centros públicos de investigación y pequeñas y medianas empresas de la región.
¿Cuál es el papel de Ainia en Recupera 2020?
Ainia ha participado en dos de los proyectos dentro del programa Recupera 2020. En el que nos ocupa, el proyecto, de título ‘Investigación, desarrollo e innovación para el desarrollo de tecnologías innovadoras que permitan la monitorización de la calidad del aceite de oliva’, se centró en desarrollar un método rápido y no destructivo para la medida de parámetros de la calidad del aceite basado en la espectroscopia en el visible e infrarrojo cercano.
El nuevo método se ha desarrollado a través de las tecnologías de espectroscopía visible e infrarrojo cercano. ¿En qué consisten?
La espectroscopia se basa en que la materia absorbe la luz, visible e infrarroja, en cantidades y en longitudes de onda diferentes en función de la cantidad y tipo de los compuestos químicos que la forman. Por tanto, analizando estas absorciones, es posible detectar y cuantificar determinados compuestos de interés. Esta búsqueda de correlaciones entre los espectros de absorción de la luz y la concentración de determinados compuestos se efectúa a partir de métodos estadísticos multivariantes.
Desde Ainia se ha desarrollado un sistema de medida propio y nuevos modelos de calibración para el aceite. ¿Podría hablarnos de ellos?
Se trata de modelos que correlacionan los espectros de absorción de la luz visible e infrarroja con algunos atributos de la calidad del aceite y que permiten clasificarlo en tres categorías: lampante, virgen y virgen extra. Por tanto, mediante la aplicación de este método de medida, de una manera rápida y fácil, se puede determinar el nivel de calidad de un aceite, lo que puede ser de mucho interés para almazaras y empresas productoras de aceite.