El aceite también será protagonista en Simei
Simei (Salón Internacional Máquinas para la Enología y el Embotellado) es la feria referente a nivel mundial en lo que a tecnología del vino se refiere y es el único evento internacional bienal que presenta al mismo tiempo equipos, máquinas y productos para la producción, el embotellado y el embalaje de todos los líquidos comestibles.
En esta ocasión no se hablará sólo de vino. El evento, que se celebrará del 3 al 6 de noviembre en Fiera Milano, será también una buena ocasión para ponerse al día de todo lo que concierne al sector del aceite: tecnología, especialización, encuentros, ponencias y momentos de mayor simplicidad que afrontarán todos los aspectos de este interesante sector. Aunque el tema ya se ha tratado en pasadas ediciones, los organizadores han querido colocarlo en primer plano en este 2015 por el enorme interés que este alimento ha engendrado en los últimos años.
Para componer un programa que sea realmente interesante y cargado de ocasiones para los operadores del sector, se ha renovado la histórica colaboración con el oleólogo Luigi Caricato, quien este año también se ocupará de Olio Officina, el grupo de trabajo del cual es inventor y presidente.
El calendario será intenso e interesante ya que el aceite representa un papel importante para el Made in Italy, de reconocido nivel de excelencia debido a sus variedades productivas.
Durante Simei 2015 se celebrarán 8 workshops, dos cada día, donde se profundizará sobre temas específicos. Se hablará de innovación en el packaging, tema de absoluta importancia para el mantenimiento de la calidad organoléptica del producto, de mejoría tecnológica de los lagares, de soluciones para la conservación y el transporte de los aceites, de gestión de los efluentes, de aspectos inherentes a la espinosa cuestión del etiquetado y las tapas, de acciones de mercadotecnia necesarias a posicionar los productos en la GDO, y del controvertido tema del análisis sensorial, fundamental para volver a lanzar todo el sector. Asimismo, se abarcarán momentos de carácter formativo como la presentación de una nueva concepción del oil bar, y otros más lúdicos, como la presentación de una exposición de viñetas dedicadas a las tecnologías aceiteras.
2014 ha sido una estación desastrosa capaz de poner de rodillas la olivocultura italiana que para el año 2015 espera lograr una excelente reactivación. Corresponde ahora a los profesionales del sector unir sus fuerzas para volver a dar auge al sector, sirviéndose de la excepcional calidad de la materia prima y de las grandes potencialidades que la tecnología pone a disposición del sector. Simei será la ocasión perfecta para todos los operadores para determinar la situación, evidenciar la criticidad y buscar las oportunidades definiendo las directrices para el futuro.
Con más de 50 años de actividad, Simei se ha impuesto como protagonista en el panorama de los eventos feriales internacionales: una cita única imperdible que este año se llevará a cabo del 3 al 6 de noviembre de 2015 en Fiera Milano.
Italia es reconocida por la excelencia de su aceite de oliva, que produce y exporta a todo el mundo: el 29,7% de la cuota export está destinada al mercado EE UU (con 11,2% de incremento), el 10,9% a Alemania, el 7,9% a Francia, el 6,1% a Japón, el 6,8% a Canadá, el 3,4% al Reino Unido y el 1,7% a China. Los datos Istat (Istituto Nazionale di Statistica) ilustran una situación que muestra como la región italiana Apulia sobresale con el 40,07% de 1.144.422 de hectáreas invertidas en aceite en Italia y con el 60,65% de la producción total Made in Italy.
A pesar de su excelente calidad, y en consecuencia de su gran demanda para uso interno o destinado al extranjero, desde hace algunos años la olivicultura italiana padece de una situación crítica que ha alcanzado su nivel más alto en la pasada estación. Son las cifras las que lo demuestran: durante la campaña 2014-2015, la más difícil de todos los tiempos, se han registrado sólo 204.558 toneladas de aceite. Para compensar esta falta ha sido necesario importar 660 mil toneladas de aceite. Una situación crítica que sólo puede afrontarse con inversiones serias en agricultura.