Repsol y OMV abandonan sus planes de fusión de la actividad de plásticos

La compañía española Repsol y la austríaca OMV han decidido, después de dos años de negociaciones, cancelar el proyecto de fusión de sus respectivas actividades de plásticos. El motivo oficial de la cancelación es la cambiante valoración de los activos de las dos compañías como consecuencia de la diferente variación de los precios de los productos fabricados.
El plan previsto significaba crear la tercera compañía petroquímica de Europa. Las empresas han puesto de manifiesto, de todas maneras, que aún negocian la colaboración en distintas áreas de actividad y explotan conjuntamente un pozo petrolífero de Libia.
La división de plásticos de la compañía petroquímica OMV atraviesa problemas desde mediados de 1993, cuando la empresa realizó una importante reestructuración. El aumento de los precios del año pasado hizo que la división ganara 40 millones de dólares. OMV está controlada por el Gobierno de Abu Dhabi.
La comunicación de la ruptura de las negociaciones llegó justo cuando Repsol había decidido privatizar una parte de las acciones que obran en poder del Estado español. La colocación de las acciones sin embargo fue todo un éxito, con mucha más demanda que oferta de acciones.
Por otro lado, el beneficio después de impuestos de Repsol en 1995 fue de 117.715 MPtas, un 21,6 % más que en 1994. El área química fue la que logró mejor resultado, con 62.859 MPtas y un crecimiento del 171 %. Las inversiones del grupo Repsol en 1995 fueron de 200.000 MPtas y su deuda neta bajó de 240.000 a 175.000 Mptas.