Superficies que no se manchan
15 de marzo de 2010
La flor de loto, considerada una flor sagrada y una de las más bellas del planeta, goza de la capacidad de mantener un aspecto impoluto. Su limpieza permanente se basa, de manera resumida, en que sus hojas repelen el agua, las gotas de agua se vuelven esféricas, y resbalan ante la mímica inclinación llevándose consigo cualquier partícula de suciedad que exista en su camino.
El mecanismo de limpieza de esta flor ha servido a Gaiker-IK4, centro tecnológico ubicado en Zamudio (Vizcaya), de “bio-inspiración” para el diseño de nuevos materiales, sistemas y tecnologías autolimpiables que aporten soluciones a las necesidades actuales y mejoren el día a día. En este contexto se enmarca el Proyecto Nanoclean, liderado por Maier S. Coop.-empresa de la Fundación Gaiker- y del que Gaiker-IK4 forma parte como experto en nanotecnología y procesado de materiales poliméricos, junto con otras 5 entidades –empresas y centros de investigación- de 4 países miembros de la Unión Europea. El proyecto Nanoclean se inició en octubre de 2009 y, con una duración prevista de 3 años, tiene como objetivo el diseño y desarrollo de piezas plásticas autolimpiables para el sector de la automoción.