Más responsabilidades, más agilidad

Los clientes esperan cada vez más de sus proveedores. Buscan una responsabilidad más extensa. Hay una tendencia clara del suministro de submontajes o subsistemas al suministro de plantas completas llave en mano. Este tipo de plantas debe cumplir con las exigencias tanto de clientes de gran tamaño como de las multinacionales, pero también con las de las empresas pequeñas y medianas. Y esto nos convierte a todos en responsables de un ámbito cada vez más amplio, una forma de actuar muy implantada ya en la industria en general y en la de los plásticos en particular. Un ejemplo máximo de exportación de la responsabilidad fuera de la empresa es el de la externalización de servicios, incluso de toda la producción, como se explica en un artículo de esta revista.
Pero hay más novedades a las que atender. Hubo un tiempo en que la credibilidad de una empresa se medía en metros cuadrados y según el número de empleados. Hoy las cosas han cambiado. ¿Quién no se ha sorprendido alguna vez al visitar una empresa puntera y encontrarse con una pequeña oficina o un pequeño taller de donde sale tecnología, conocimiento? Si saber es muy importante, no lo es menos contar con los medios adecuados. El esfuerzo inversor de la industria transformadora de plásticos española ha sido notable en los últimos años, si bien ahora mismo muchos están a la espera de que lleguen tiempos mejores. Aunque bien es cierto que, según los últimos datos de Anaip, la situación de los transformadores no es mala, gracias sobre todo a las exportaciones. Por poner un ejemplo, en los diez primeros meses de 2001 los fabricantes de film de PE exportaron 8.378 t más que en el mismo periodo del año anterior. El producto transformado con mayor incremento exportador fue la tubería de PVC, que aumentó un 128 por ciento (9.305 t más).
Debemos, como camaleones, hacernos a la nueva situación, convivir con un mundo cambiante en el que no hay certezas de ningún tipo. Todo está en continuo movimiento y cada uno debe flotar dejando de lado las referencias del pasado incluso si han conducido al éxito de la empresa. Independientemente de que el cambio sea algo positivo o negativo, debemos tener la capacidad de tirar a la basura las referencias del pasado. El reto es vivir afrontando cada día como una nueva conquista. Vencerán las empresas que consigan efectuar el cambio con más rapidez.