La feria ha dado un giro de concepto, como señala el autor de este artículo

Euromold celebró este año 2015 en Düsseldorf su 21ª edición, entre los días 22 y 25 de septiembre. Es una feria de tamaño medio (unos 450 stands), que se puede recorrer sin agobios en un día. En este mundo todo se transforma y esta feria no es una excepción. Euromold es un ejemplo de este fenómeno de transformación, que hace que en pocos años las empresas cambien su visión y gradualmente dediquen sus mayores esfuerzos a actividades que, en su momento, se consideraban de poca relevancia.

Euromold ha cambiado su definición, su sede (antes era Frankfurt) y gran parte de los expositores que eran habituales. Para el que escribe estas líneas eso resulta en una feria que tiene su cara y su cruz. La cara es el nuevo mundo que expone Euromold, el del prototipado rápido, donde se encuentra gran número de expositores tanto de la maquinaria necesaria para la producción (impresoras 3D), como de los periféricos necesarios (escáneres 3d, materiales plásticos y metálicos, software…). La cruz es el sector del molde de inyección de plástico (hace unos años mayoritario en la feria), que se ha reducido en gran medida hasta el punto que, de no ser por los talleres de molde chinos (y por unas pocas honrosas excepciones europeas como talleres portugueses, checos y gallegos), no tendría presencia alguna. Comentaremos los dos sectores, comenzando por la cara, el sector de ‘rapid prototyping’, de mayor presencia en la feria.

Rapid 3D Printing Fashion Show.

Aparte de la exposición, en el recinto ferial se celebraron tres días de conferencias sobre 'Additive manufacturing & 3D printing', donde se trataron temas de actualidad sobre las tecnologías de prototipado, cada vez más cercanas a aplicaciones funcionales, como en el campo de la cirugía, donde por ejemplo se presentan resultados de instalación en pacientes de prótesis de mandíbula creadas con prototipado rápido (Pr. Jules Poukens-Universidad de Hasselt y Lovaina).

En un animado debate sobre la aplicación de las tecnologías de prototipado a la producción en serie (ya llamado ‘rapid manufacturing’), en el que participan directivos de BMW (Frank Wöllecke), General Electric (Barbara Negroe) y Northrop-Grumman (Eric Barnes), queda claro que estas empresas ya están trabajando seriamente en el tema, y que apuestan por el ‘rapid manufacturing’. De hecho Northrop-Grumman (fabricante de armamento para el ejército norteamericano) ya monta miles de piezas en sus aviones fabricadas con técnicas de ‘rapid prototyping’. GE y BMW no han llegado tan lejos, pero sus representantes constatan un cambio de mentalidad en los ingenieros, que empiezan a pedir información y estimaciones de coste para fabricar piezas de serie por medios no convencionales.

Todos los ponentes coinciden en que los dos aspectos clave para avanzar en el ‘rapid manufacturing’ es que aumente la velocidad y la fiabilidad de los equipos de producción.

Para mejorar los resultados ante el primer problema, los ponentes destacan que HP está lanzando un nuevo tipo de impresoras 3D (con tecnología Multijet Fusion) que ataca el primer problema, creando capas por medio de tintas curables que, según aseguran, cuatriplican la velocidad de producción de las máquinas convencionales, permitiendo además una mezcla de los materiales de construcción que aportarían a las piezas fabricadas propiedades imposibles de conseguir con otros medios de producción.

El segundo problema parece más difícil de resolver, y en la actualidad obliga a que todas las piezas fabricadas por ‘rapid manufacturing’ tengan que ser analizadas dimensionalmente al 100%, y a parte ensayadas en pruebas funcionales antes de ser utilizadas.

Los conferenciantes están de acuerdo en que el futuro del ‘rapid manufacturing’ estará en la fabricación de piezas que no tengan medios alternativos de producción, bien por su geometría o bien por sus propiedades funcionales extraordinarias.

Respecto a la exposición y a los medios de impresión 3D, el aparato más visible por todas partes es la impresora 3D de sobremesa, de la que hay disponibles gran cantidad de modelos de diversas marcas: HP, 3D systems, DWS, be 3d, Sharebot, Klonner… La multitud de equipos presentes parece explicarse porque están venciendo gran cantidad de patentes utilizadas en la construcción de este tipo de maquinaria.

Para aproximar la realidad a la impresión 3D son necesarios escáneres capaces de leer las formas en relieve y transformarlas en mediciones y superficies. Por esto, el otro aparato más representado en la feria son los escáneres 3D de todo tipo, ya sean de uso manual (Scan in a box), fijos de sobremesa (Scanbull, Perceptron, Open Technologies), o escáneres industriales para uso en producción (LMI Technologies, Breuckmann). De hecho, se presentan durante la feria algunos sistemas de cabinas dotadas de sistemas multicámaras capaces de digitalizar completamente una figura humana, alguno de ellos la digitaliza en sólo un segundo.

Euromold 2015, Inside "the Egg" de Michiel van der .Kley

Otras novedades presentes en la feria incluyen aspectos secundarios a la fabricación 3D, como son propuestas de formación en estas nuevas tecnologías presentadas por la SME (Society of Manufacturing Engineers de los EE UU) y por la empresa UL, y asimismo otra novedad es la web 3D HUBS de ofertas de servicios de impresión 3D, que permite a los clientes interesados en la impresión de un producto rápido contactar con un fabricante de ese producto y realizar sus encargos.

En la feria se observa un moderado número de visitantes, que sobre todo se mueven por esta zona de tecnología de rapid prototyping. De hecho, el acto más concurrido de la exposición se produce el viernes al mediodía, en un original y sorprendente pase de modelos en el que se muestran diversos accesorios de moda realizados con tecnología de fabricación 3D. Queda claro que la bondad de los diseños (algunos de ellos eran bastante estrafalarios) influye en la percepción de las posibilidades de éxito de estas tecnologías en este campo. Determinados corpiños y cuellos que se presentan en el acto son verdaderamente atractivos y muy llamativos, y permiten augurar un futuro brillante a estos conceptos de moda.

Este último acto constituyó una prueba más del poder de imaginación y de iniciativa tecnológica que demuestran tener las técnicas de rapid prototyping, y que contrasta con la oferta del sector del molde de inyección durante la feria, totalmente convencional y sin un atractivo especial.

Euromold 2015, 3D Systems.

Hablamos de la cruz de la feria, el sector del molde, tan sufrido en los últimos años y tan importante para la cadena de valor de la industria del plástico. Como ya comentaba al principio del artículo, sorprende la escasa presencia de talleres de moldes europeos (del país anfitrión, Alemania, puede ser que no hubiese ninguno), y que la única presencia importante del sector sea de talleres chinos. Sorprendentemente, estos talleres chinos llegan a la feria con un personal que habla un inglés muy escaso y con un enfoque comercial muy simple (perseguir al visitante, muchas veces no interesado en sus stands, para ofrecerle tarjetas y bolsas).

Como manifiesta el expositor Francisco Calvo de Asime (Asociación gallega de las empresas del metal), los resultados de esta feria no les dejan satisfechos, y comenta que la presencia de moldistas es cada vez menor en esta feria, lo cual hace que los posibles clientes cada vez la visiten menos.

Están presentes algunas de las empresas que suministran componentes para moldes como Hasco (que presenta como novedad unos puentes para la refrigeración de moldes Coolcross Z99 que permiten los cruces de flujo de refrigerante en un espacio muy reducido), Meusburger, Knarr y los polacos FCPK.

La empresa Stemcke Cooling Systems ofrece unos atemperadores para insertos de molde que necesitan refrigeración especial.

RUD presenta un desplazador de moldes giratorio muy original y de robusto diseño, que permite posicionar cavidades o punzones en diferentes ángulos, hasta los 90 grados.

La empresa holandesa Schouemberg & Partners muestra el software “Calcmaster” de cálculo de precios de molde y de pieza que permite estimar los costes mencionados a partir del modelo 3D y de la valoración de determinados parámetros del molde, en muy poco tiempo.

Quizás la industria del molde necesite otro tipo de formato de feria, más especializado, y que permita el encuentro entre fabricantes y clientes en un espacio más profesional, con objetivos concretos. Si el concepto de feria para un producto tan tecnológico pero tan maduro industrialmente como los moldes sigue tan estancado, es difícil que las ferias sirvan para hacer evolucionar positivamente al sector. Los fabricantes de tecnologías 3D muestran el camino, ofreciendo no sólo novedades sino también imaginación a la hora de presentarlas.