La tecnología se caracteriza por la flexibilidad tanto del material en entrada como en salida
Regeneración, cristalización y deshumidificación del poliéster
G-Moby es la tecnología que permite la regeneración, la cristalización, deshumidificación y el aumento de la viscosidad intrínseca (IV) del poliéster (PET). Creada en la colaboracion de la empresa SB Plastics Machinery y Gamma Meccanica, la línea G-Moby se ha diseñado para permitir la regeneración la regradación adecuada y el denominado PET 'Super Clean'.
Esta solución ofrece la posibilidad de obtener gránulos adecuados para ser utilizados en la prooducción de envases de alimentos de acuerdo con las normas de la FDA y la AESA, así como gránulos para aplicaciones que requieren alta viscosidad. Esta tecnología fue desarrollada para el tratamiento de gránulos de PET. La decisión de concentrarse en los gránulos en lugar de en las escamas ha sido principalmente por la reducción de los volúmenes ya que la escama tiene un peso específico 2,5 veces menor que el gránulo. Los gránulos también evitan la presencia de polvo en los procesos de transporte y en los procesos posteriores. En este contexto, G-Moby funciona a través de dos fases principales: la fase de recuperación de los productos de desecho que se procesan en gránulos y la fase en la que los gránulos se tratan térmicamente con un sistema de SSP (policondensación en estado sólido).
Al comienzo del proceso, el material a ser recuperado pasa por un primer tratamiento de deshumidificación. Esta operación es muy importante debido a que la ausencia de humedad inhibe la degradación por hidrólisis durante el proceso de extrusión. Logramos este resultado en el triturador Compac donde el PET se lleva y se mantiene a la temperatura de 180-200 °C para asegurar la completa evaporación del agua. El segundo paso en el proceso es la fusión, la filtración y la granulación de PET que se produce a través del uso de la extrusora (contigua a la trituradora), de un cambia filtro y un corte sumergido. El resultado obtenido al final del proceso es un gránulo de PET amorfo con un grado muy bajo de disminución de IV, que en la mayoría de los casos se reduce a cero.
Ejemplo de línea de plantas de reciclaje de residuos que consta de un triturador Compac, extrusora y cambia filtro corte sumergido TI.
La filtración es de gran importancia porque elimina las impurezas presentes en el material (papel, madera, aluminio, etc...) y puede ser empujada hasta la eliminación de partículas mayores de 32 micras. En este punto, la salida de gránulo por el corte y que en sí mismo aún conserva la mayor parte del calor adquirido durante los dos procesos anteriores, se introduce en el Moby. Este dispositivo utilizando el principio de las ondas infrarrojas y el vacío hasta 10-20 bar, en una sola fase, cristaliza, deshumidifica y opera el 'Super-Clean' en el material. De esta manera, se eliminan todos los agentes contaminantes presentes en el PET, lo que es adecuado para su uso con alimentos.
La misma máquina se puede utilizar para 're-gradar' el material por medio del SSP (policondensación en estado sólido), devolviendo al material las mismas características mecánicas y las propiedades reológicas que tenían en su estado virgen. De hecho, sólo mediante el aumento del tiempo de permanencia del gránulo en el Moby, se puede llegar incluso a un mayor grado de IV arriba de 0,9 dl/g.
G-Moby garantiza al usuario final el máximo beneficio gracias a la flexibilidad tanto del material en entrada como del material en salida. De hecho, puede peletizar desechos de cualquier forma como botellas, hojas, cintas, hilados textiles, por medio de la unidad de trituración Compac que aglomera el material para prepararlo a la extrusora. A través de la filtración cuidadosa, el corte sumergido TI y el sistema de infrarrojos y vacío Moby, la línea de la regeneración G-Moby devuelve un PET que puede destinarse para cualquier producción, a partir del uso por envase a alimentar (el llamado Bottle-To-Bottle) hasta aplicaciones que requieren alta resistencia.