Arturo Rosaleñ con Montibello
Autor de numerosas colecciones, algunas de ellas han sido portada en C&C Magazine (nº 187, nº 173, nº 160 en los últimos 5 años), Rosaleñ se incorpora al equipo creativo de Montibello para aportar su creativa visión sobre la peluquería.
Su salón trabaja ya con todas las gamas de la marca (color, styling y tratamiento). En opinión de Rosaleñ: “necesitaba aire fresco en el salón, tanto a nivel de productos como de motivación para todo el equipo”. Otro factor que influyó en su decisión fue la calidad de los cosméticos capilares: “Es excelente”. Una de sus pasiones es la formación: “Me entusiasmó el completo programa formativo que Montibello ofrece a sus clientes y la ilusión que me transmitieron por formar parte de su equipo creativo”. También ayudó “el hecho de que sea una empresa nacional y familiar. El trato es muy de tú a tú, y eso para mí es muy importante”.
Por su parte, Albert Sanromà, director de marca de Montibello, asegura que “la incorporación de Arturo Rosaleñ a Montibello llega en un momento fantástico para nuestra compañía: estamos creciendo y renovando tanto nuestra imagen como la de nuestro portfolio de productos. Y la frescura, modernidad y creatividad de Arturo Rosaleñ encajan a la perfección con la nueva imagen de marca que estamos construyendo así como con nuestros valores, entre los que sin duda destacan la pasión y el compromiso con el sector de la peluquería. Estoy convencido de que Arturo va a aportar mucho a nuestra compañía y que nuestra trayectoria juntos va a ser muy exitosa”.
Arturo Rosaleñ inició su carrera profesional en el salón Pelegrín, donde aprendió todo lo relacionado con el funcionamiento de un negocio, pero sin dejar de lado la parte creativa del trabajo. En 1995 adquiere el salón donde trabajaba y, en ese momento, empieza su andadura empresarial. Apasionado de la peluquería británica, cada año viaja a Londres para asistir a desfiles, ateliers y seminarios y poder formarse con mayor precisión. Arturo Rosaleñ apuesta por total look (peinado y maquillaje). “Cuando hacemos un total look para eventos, me gusta que la clienta salga de mi salón con un servicio completo.”, asegura Rosaleñ. Una de sus grandes pasiones, además del salón y de las colecciones, es la formación, labor que pronto podrá ejercerla de la mano de Montibello, donde compartirá su vertiente artística y creativa con los clientes de la marca.