La belleza del futuro
Con motivo de la presentación de la nueva sede de Stanpa en el centro de Madrid, se presentaron las tendencias globales de futuro en el sector de la belleza en colaboración con The Future Laboratory, una de las consultoras de tendencias más reconocidas en todo el mundo.
A pesar del duro contexto económico de los últimos años, el sector de la perfumería y la cosmética se ha consolidado en nuestro país y ha aumentado la exportación a otros mercados hasta alcanzar la presencia en más de 150 países. Hoy, la belleza española es una referencia mundial.
Para comprender hacia dónde se dirige el sector hay que tener presente el marco general.
Esto es se afianzará en las próximas décadas el estilo de vida urbano ya que la mayoría de la población mundial vivirá en ciudades o en áreas metropolitanas. El ritmo de vida será más acelerado y los consumidores buscarán la inmediatez. Habrá también una mentalidad más avanzada, con la incorporación de los avances de la tecnología y de la inteligencia artificial a las interacciones entre marcas, empresas e instituciones.
En los últimos años se han detectado que los identificadores tradicionales de sexo, edad o grupo social se han diluido y han dejado de ser relevantes. Por otro lado, la sociedad está envejeciendo y se han consolidado nuevos tipos de familia. Unos ciudadanos globalizados impulsan importantes cambios sociales y demográficos. Como consecuencia de ello, se han desatado compulsiones a nivel político y social en todo el mundo generando una sensación de desorden, preocupación e incluso ansiedad.
Este entorno explica el cambio de la visión de la belleza que se ha producido en las nuevas generaciones. Las nociones tradicionales de identidad se están rompiendo ya que las nuevas tecnologías permiten la interconexión y acceso a la información. Los jóvenes, además, buscan su auto-realización. Los consumidores cambian sus actitudes más rápidamente de lo que puede hacer la industria. De ahí, la importancia de explorar el comportamiento futuro de los consumidores para poder anticipar tendencias.
Cambios debidos a las redes sociales
Hoy día, los blogs y las redes como Instagram o Youtube están marcando nuevas tendencias en color y apostando por una belleza que muestra la diversidad y la individualidad. Antes, las marcas podían tardar hasta tres años en lanzar nuevos productos, hoy han aparecido start-ups capaces de poner nuevos productos al mercado en cuestión de semanas. Las marcas tratan de dar respuesta aumentando su velocidad, utilizando influencers y bloggers, cazando tendencias y acelerando sus esfuerzos en marketing. Es la visión del “pronto moda” aplicada a la belleza. En la reunión de Stanpa se analizó la evolución hacia el futuro desde tres puntos de vista.
Investigación y desarrollo
En el pasado: Exclusividad
En la actualidad: Red entre pares
En el futuro: Diálogo íntimo
Si hace unos años, el consumidor buscaba la exclusividad, ahora confía en las recomendaciones de sus iguales o de consumidores expertos. Por otra parte, algunas encuestas señalan que el 42% de los millenials estarían interesados en colaborar con las marcas en el desarrollo de productos y servicios a través de las redes sociales.
Sin embargo, la evolución indica que nos dirigimos a un concepto de la belleza personalizada. Las ofertas estándar son cada vez menos relevantes. Según Salesforce, hasta un 63% de los millennials estarían dispuestos a compartir sus datos con las empresas a cambio de ofertas y descuentos personalizados. Ya existen incluso algunas empresas que utilizan mechones de cabello de sus clientes para crear productos personalizados.
Expresión e identidad
En el pasado: Singular
En la actualidad: Diversa
En el futuro: Compuesta
Años atrás se consideraba el sentido de la belleza de forma individual. Hace lustros que tenemos una definición idealizada de la belleza. Ahora nos dirigimos hacia una definición fragmentada de la misma. Es la diversidad. Los consumidores reclaman que son diferentes en color de piel, en tipos de cuerpos, en género…. Y todos ellos quieren la industria los tenga en cuenta. Hoy, la industria recoge ingredientes y técnicas de diferentes partes del mundo y los incorpora a sus productos. El reto de las marcas será hacer frente a esta diversidad y multiculturalidad.
Protección y control
En el pasado: Anti envejecimiento
En la actualidad: Auto preservación
En el futuro: Protección Pro-activa
Durante años, la gran obsesión ha sido parecer más jóvenes, de ahí el auge de los tratamientos anti-envejecimiento y de los protectores solares. Ahora, el objetivo es preservar la belleza. Incluso algunos expertos proponen desterrar la expresión “anti-edad” porque el envejecimiento no es algo contra lo que se deba luchar.
Se ha detectado una tendencia creciente entre los consumidores hacia una convergencia de la forma física, la salud y la belleza. La belleza es un concepto holístico. En el futuro habrá una estrategia preventiva y proactiva en los ámbitos de la belleza, pero también de la salud. Los consumidores buscarán protegerse de todo tipo de contaminación: ambiental, sonora, digital…